El sector hotelero y turístico del departamento del Cauca pasa el momento más crítico de su historia, razón por la cual este viernes 11 de diciembre, los empresarios y demás integrantes de esté renglón económico salieron a manifestarse en el puente del Humilladero de la Ciudad Blanca.
El Nuevo Liberal habló con Katherine Vargas, directora de Cotelco en el Cauca, quien explicó que el plantón fue una iniciativa de las agencias de viajes, guías turísticos, hoteles, restaurantes, industrias culturales y economía naranja, “debido a la situación precaria que estamos viviendo. Nosotros comenzamos con el tema del COVID no en marzo, sino en febrero porque las personas empezaron a escuchar lo que sucedía con cierre de aeropuertos y terminales, fuimos los primeros en ser afectados y ahora los últimos en reactivarnos”.
Según la vocera de Cotelco, en el papel tienen total apertura con los decretos, sin embargo, no se puede desconocer que existe el miedo de viajar, más las diferentes restricciones que persisten lo que conlleva a un gran impacto económico. “El encarecimiento de todos los productos turísticos, por ejemplo la entrada a los termales estaban entre 10 o 15 mil pesos, ahora están en 20 y 40 mil; el transporte de turistas, hay que llevar la mitad del cupo a costos totales, por estos factores la reactivación es muy lenta, la proyección es que veremos un cambio en el 2022”.
La directora del sector hotelero en este departamento, afirmó que no ven una ayuda clara por parte de las entidades a pesar de las múltiples gestiones de los gremios a nivel nacional y regional. “Lo que queremos mostrarle a los entes es que no hemos recibido todas esas líneas de crédito de Bancoldex que son muy buenas y han ayudado a muchos sectores pero para nosotros no ha sido así y más en el Cauca. Nosotros no somos sujetos de crédito, no tenemos un nivel de endeudamiento para los bancos que sea atractivo prestarnos”.
La crisis del sector venía sintiéndose desde el año pasado por los diferentes movimientos sociales que ocurrieron en 2019 como las protestas indígenas y estudiantiles. “Fue un año el cual trabajamos apenas cinco meses”, por lo cual ya tenían deudas y llega el 2020 con la pandemia que afectó a todos. “Queremos que los esfuerzos que se hagan para ayudarnos sean dirigidos al sector, que sean blindados y nos traten de manera diferencial, porque somos diferentes, no nos comportamos como el comercio en general. Necesitamos el compromiso y gestión de los funcionarios de Alcaldía y Gobernación para trabajar por el turismo en Popayán y el Cauca, porque no es una región de industrias, esto lo mueve el turismo”.
Los impactos y supervivencia
Actualmente en alojamiento, la ciudad de Popayán está por debajo del 3 por ciento de la ocupación. Muchos hoteles han cerrado definitivamente, otros no han abierto sus puertas, debieron despedir empleados o darles licencias no remuneradas. Como consecuencia tuvieron dificultades para acceder a los subsidios del gobierno y la ocupación de hoy no permite que los empleos se restablezcan, explicó Katherine Vargas.
“Si esta tasa de ocupación continúa en ese nivel no va a ser posible tener empleos fijos y menos la supervivencia de los hoteles en el Cauca”, manifestó Vargas.
La manera de sobrevivir a esta difícil realidad ha sido acudir a los ahorros, otros empresarios con préstamos adquiridos antes de Semana Santa. Muy pocos prestaron el servicio con pacientes Covid-19. Hoteles desatacados como Los Portales sigue cerrado, aunque tiene abierto su restaurante, mientras que varios en el sector histórico, alrededor de 10, cerraron de forma definitiva. Otro caso es el hotel San Jerónimo, que tenía un grupo grande de empleados y ahora la administradora tiene a dos personas máximo y debe asumir múltiples labores.
“Los pocos que sobrevivimos estamos con un solo empleado que es el dueño, gerente o administrador que debe hacer de todo, servir desayunos, camarería, portería y cuando hay ocupación una personal adicional que ayuda a los quehaceres operativos”, concluyó la directora de Cotelco en el Cauca.
Por último, Reinaldo Muñoz, director de Acodres Cauca, agremiación que reúne a los restauranteros, indicó que son 1.300 establecimientos formales, con seis mil personas empleadas, más de la mitad no asisten porque los negocios funcionan al 40 por ciento. Su llamado es que integren a este sector como un equipo de trabajo en los Planes de desarrollo del Cauca y Popayán y luego nacional “pero no vemos voluntad, sin embargo, vamos a hacer una solicitud formal porque queremos trabajar de la mano para el sector turismo”.