‘Mama’: la historia de las parteras Misak que se conocerá en Nueva York

Ella es Mama Agustina, partera, médica tradicional y lideresa de la comunidad Misak en el resguardo indígena de Guambia, en Silvia Cauca. Cuando estaba pequeña tuvo un sueño con una abuelita que prometía regalarle un libro si ‘curaba’ a una gallina que no podía tener huevos, Agustina lo hizo, y desde ahí se dedicó a ‘curar’ a mujeres y ayudarlas a tener a sus hijos. Así se hacen las parteras en esta comunidad. /Fotografías: Suministradas

Este documental realizado por estudiantes de séptimo semestre de Comunicación Social de la Universidad del Cauca, fue seleccionado en el Festival Corto Circuito en Cali, como uno de los tres audiovisuales que participará de la muestra de videos latinos que se hace en Nueva York.




Por Olga Portilla Dorado

 En la parte alta de una montaña del resguardo indígena de Guambia vive Mama Agustina, una mujer indígena Misak de 60 años. Médica tradicional, partera y lideresa de su comunidad. Agustina Yalanda Tumiñá, es la mama de todos en ese territorio sagrado ubicado en el municipio de Silvia.

“Las Mamas somos las mayoras que somos parteras, en todos los resguardos a los que voy las mamitas me dicen mama, así como a los médicos tradicionales se les dice tatas. El trabajo de la partera es ser psicóloga, ser mamá… y esa trasmisión es de generación en generación”, dice en uno de los apartes del documental ‘Mama’, en el que esta líder indígena protagoniza la historia y refleja cómo es la vida de estas mujeres, que a pesar de ser la madre de muchos, terminan siendo la mamá de nadie, porque en el camino van quedando solas.

Rescatar una de las tradiciones de los pueblos campesinos, afrodescendientes e indígenas del Cauca, como es la partería, fue el objeto con el que ocho estudiantes de Comunicación Social de la Universidad del Cauca se reunieron para plantear la idea de realizar un documental, que además de cumplir el requisito para pasar una materia de su semestre, también sirviera como material para reivindicar esas prácticas ancestrales que hacen únicas a algunas comunidades de este departamento.

Aquí parte del equipo de producción del documental, junto a dos mamas de la comunidad Misak. Los estudiantes de séptimo semestre de Comunicación Social hicieron la investigación para realizar el documental durante más de cuatro meses. El rodaje se hizo en cuatro días, desde las 5:00 a.m. hasta las 7:00 de la noche.

“Fueron muchos elementos los que nos llevaron a realizar este documental, primero pues se nos ocurrió dar cuenta de una práctica que está desapareciendo en el departamento y que solo muy pocas comunidades la mantienen, como los afrodescendientes, la comunidad Misak, los Nasa; pero hubo algo especial con los Misak, y es que las mujeres para ser parteras primero deben tener un sueño que les permite comenzar su formación, entonces eso nos llamó la atención porque tiene una trascendencia cultural que está muy arraigada a su cosmovisión y a las tradiciones de esta comunidad”, comenta Keinner Meneses, director del documental Mama.

Y aunque no fue fácil ingresar a la comunidad, lograr obtener el permiso para hacer las imágenes, las entrevistas, para recorrer el resguardo y lograr que la comunidad Misak no se sintiera “invadida” o “amenazada” por extraños que solo llegan a “abusar de su imagen y su cultura”, estos ocho jóvenes (siete mujeres y un hombre) lograron ganarse la confianza y la amistad de estas mujeres, con quienes durante más de cuatro meses compartieron conocimientos, y en cuatro largos días rodaron las escenas que hoy hacen parte de este documental. Documental, que en el mes de octubre se presentará en ‘Corto Circuito el Festival de Cortos Latinos de Nueva York’.

Sí, hasta Nueva York llegará la historia de las parteras del Cauca, de las mamas indígenas de la comunidad Misak, recopiladas en el día a día de Agustina Yalanda Tumiñá; algo que los realizadores de este documental no imaginaron, pues era su primera experiencia en este género audiovisual. El documental no había sido presentado al público todavía, ya que cuando se dieron cuenta de la convocatoria, solo días antes habían acabado su edición y montaje, además sabían que la competencia en el Festival Corto Circuito que se realiza en Cali, era reñida, pues son piezas audiovisuales de todo el Pacífico colombiano que llegan a participar.

“Nosotros fuimos la montaña de ese Valle (risas), es que así se llamó la muestra regional del Festival ‘historias de valles y montañas’. Que nos eligieran entre 62 trabajos que se presentaron para esta muestra, estar entre los 9 finalistas y luego ser elegidos como uno de los tres ganadores, es una satisfacción que no se puede describir; además porque fue el único trabajo hecho en Popayán, los demás eran hechos en Cali, algunos sí eran dirigidos por estudiantes, pero otros directores ya contaban con más experiencia local, nacional e internacional”, describe Keinner.

¿Qué es Corto Circuito?

´Corto Circuito, el Festival de Cortos latinos de Nueva York en Cali´, es una versión regional del Festival que tiene el mismo nombre, pero que se lleva a cabo cada año en la ‘capital del mundo’. Desde hace 13 años, en Nueva York se realiza esta muestra audiovisual de piezas hechas por latinos, con el objetivo de resaltar el talento de los realizadores que desde diferentes visiones cuentan distintas realidades de su país, su región o su ciudad.

“Corto Circuito ha abierto una nueva puerta para conocer lo último en creación audiovisual en el mundo, uno de los objetivos de mayor interés en el concepto mismo del Festival en Nueva York, es contribuir a la formación de públicos como una tarea que no se improvisa y que requiere entender a quiénes van dirigidas cada actividad, y evaluar las mejores formas de llegar a esas audiencias para seducirlas”, expresaron Isabella Prieto y  Carlos Augusto Albán, directores ejecutivos en Cali.

Corto Circuito Cali se ha convertido en una excelente vitrina para que realizadores de la región den a conocer sus producciones, además ya ocupa un lugar muy importante en la agenda cultural de esta ciudad y se consolida como uno de los Festivales a los que los realizadores del suroccidente colombiano le apuestan para participar.

La partería es una tradición ancestral de comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas de departamentos como el Cauca. Mujeres dedicadas a este oficio visitan a las embarazadas, las ‘soban’ con algunas plantas medicinales, les revisan en qué posición está el bebé, con este ‘arte’ solo con pasar sus manos por encima del estómago de la embarazada, las parteras saben en qué posición viene el bebé y como ‘acomodarlo’ para cuando sea hora de su nacimiento.

En esta ocasión, el Museo la Tertulia de la capital del Valle, estuvo colmado durante los 4 días de Cinemateca, hubo 6 funciones: incluida una para toda la familia y otra para el talento regional (en la que se presentó Mama el documental hecho por payaneses); participaron 46 cortos de realizadores de 17 países, premiados internacionalmente; participaron 9 directores del Valle del Cauca y la región Pacífico (entre ellos uno de Popayán), también se llevaron a cabo 2 exposiciones de arte paralelas al Festival, y se estima que alrededor de 2.000 espectadores lograron disfrutar de estas nuevas propuestas cinematográficas.

“En esta ocasión quisimos que en la clausura se presentaran los trabajos de los realizadores del Valle del Cauca y la región Pacífico, fue una gran muestra de talento y creatividad. Corto Circuito es una fiesta cultural que ya alista motores para lo que será la próxima versión”, concluyeron los organizadores.

Por ahora, el documental no está disponible en la web, ya que este fue uno de los compromisos que hicieron los estudiantes con la comunidad, pero los payaneses tendrán la oportunidad de ver el trabajo este viernes cuando se realice el lanzamiento de Mama en el Teatro Bolívar, a partir de las 6:30 de la tarde.