El violinista y el arte ruso

JORGE ALONSO RUIZ MORALES

@kemistry09

El violinista, cuadro de Konchalovsky; googléenlo, búsquenlo. Podría decirles con absoluta franqueza y certeza, destapando el alma, que es mi cuadro favorito (de los que conozco) del arte ruso. Seguro hay muchos más: está lo abstracto de Malevich, que no me gusta tanto, y el impresionismo de Kotov; sí, es verdad, no todos los impresionistas son franceses. Si me pongo a describir el cuadro del violinista, yo un ignoto en cosas de arte y solo empleando mis palabras, les diría que es una imagen no abstracta, claramente es un señor que toca violín, pero pintado de una manera difusa, con la superposición de colores y líneas de manera irregular. Ahí está, ese es el arte, tan múltiple e inexplicable como las almas.

Hay un documental llamado “Revolution: new art for a new world”, dirigido por Margy Kinmonth, en el que se narra toda la historia de los últimos cien años en la anteriormente llamada Unión Soviética, pero todo esto contado a través del arte. La historia a través del arte, o el arte a través de la historia; en últimas es casi lo mismo, no pueden ir separados. Hablan de la época de los excesos de los zares, de cuando en 1918 la capital pasó a ser Moscú, del surgimiento del proletariado, tema fascinante, de la llegada de Lenin, de su posterior muerte y luego de la represión de Stalin, un líder revolucionario que no quería, paradójicamente, que nadie fuera revolucionario.

A través de todo este tiempo hubo muchos artistas, no solo pintores sino escultores, arquitectos y realizadores de cine. Diré qué me gusta: Klutsis, un artista que fue un duro en toda la técnica del collage, esa técnica que quienes me conocen saben que me encanta, recortando fotos y haciéndoles montajes. Si quieren ver a qué estilo me refiero, busquen la portada del álbum “you could have it so much better” de Franz Ferdinand. Así es el estilo de Klutsis, me encanta. Las fotografías de Aleksandr Ródchenko son espectaculares, si las veo tan modernas ahora en 2018 no imagino cómo sería hace 100 años. Muy bueno todo.

El documental habla de Kandinsky, cuyas abstracciones no me gustan para nada. Tampoco me gusta el estilo de Pavel Filonov, cuyo estilo surrealista estilo Dalí es un poco excesivo para mí. En fin, lo maravilloso es que hay gustos para todos. Hay algo muy loco y es el famoso cuadro negro (literalmente, un cuadrado negro, o sea) “pintado” por Kazimir Malevich.

Mil temas, todo un portafolio.

Si quieren ver más, busquen en la cartelera de Cine Colombia, solo este fin de semana. Sí, solo el 1 y 2 de Septiembre, no se lo pierdan.