¡Qué suerte!… ¡Qué puntería!

EDUARDO NATES LÓPEZ

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Comienzo por manifestar que para mí, suerte y puntería van casi siempre de la mano. En Tiro al Blanco, por ejemplo, no se acierta si la suerte no ayuda, bien arreciando el viento o amainándolo. O jugando lotería, puede tenerse muy buena suerte pero hay que apuntarle con precisión al número y la serie. Es decir, suerte y puntería tienen que cantar a dúo, con el mismo compás y afinación.

Por eso ha llamado tanto la atención la precisión con que la Honorable Corte Suprema de Justicia se “equivocó,” pero “el tiro” (la llamada) cayó, milimétricamente, en el teléfono de Álvaro Uribe Vélez. Imposible negar que en esa corte le vienen apuntando desde hace mucho tiempo. Con frecuencia inusitada le pasan raspando con sus declaraciones, fallos, citaciones etc. Vale decir que lo tienen en la mira desde hace años.

Por otra parte, en cuanto a suerte, esta vez le fue peor a la Corte. Obró con perfección la Ley de Murphy que dice: “No hay situación, por mala que esté, que no sea susceptible de empeorar.” ¡Preciso! Cuando la credibilidad en este alto tribunal atraviesa el peor de los momentos, gracias a unos de sus miembros agrupados en el Cartel de la Toga, se les viene ahora encima este “errorcito”. Pero, aún peor: Dicen, en su pueril aclaración al inaceptable incidente, a través de una secretaria, que ese número telefónico lo encontraron en un expediente perteneciente a un proceso contra el parlamentario chocoano Nilton Córdoba; El presidente de la Corte, Honorable Magistrado Barceló, intentó achacarle la culpa al parlamentario… Los periodistas, buscando información sobre el asunto, le preguntaron al excongresista si él había entregado ese teléfono y este contestó que ni lo conocía. Y como si fuera poco, en la Corte, sin vergüenza alguna anticipan que, aunque la chuzada sea accidental, lo que oyeron y extractaron en esa interceptación ilegal, van a usarlo en un forzado proceso que, por otro lado, llevan contra Uribe Vélez. Francamente, jamás había visto ni leído algo tan aberrante y absurdo.

Volviendo al tema aleatorio, vamos a imaginarnos que en la Corte Suprema de Justicia, una tarde, que estaban desocupados y sin nada de trabajo pendiente, se pusieron a jugar a marcar teléfonos celulares (que es tan divertido…) y apuntándole a un número cualquiera de diez (10) dígitos, pum, preciso, la llamada cayó en el celular de Uribe… y entonces se les olvidó colgar, y la llamada -pero sobre todo la pila del aparato- les duró un mes… ¡Si de suerte se trata, como esta no hay dos! Sinceramente, podrían ganarse el baloto cuantas veces quisieran. Ahora, en términos de puntería, si acaso desean mejorarla aún más, pueden acudir a un Contrato de Asesoría con Helmut Bellingrodt, el tirador barranquillero que en Munich, en 1972, obtuvo la primera medalla olímpica para Colombia, en la modalidad de Tiro al Jabalí.

No quiero imaginarme lo que hubiera sucedido en este país, si el “errorcito” hubiese ocurrido con el teléfono de Gustavo Petro o cualquiera otro líder de la oposición. Quién se hubiera aguantado la gritería de Claudia López; los insultos en tono menor de Iván Cepeda, las agresiones de Robledo, etc., los cuáles, “valientemente”, hoy no dicen ni mu, frente a la “mala suerte” de la Corte.

Lo más preocupante de todo esto es que a la justicia -nada menos que al más alto tribunal colombiano- le ocurran este tipo de “accidentes involuntarios.” Y lo peor: que sus integrantes, absurda y descaradamente politizados, actúen con esa falta de responsabilidad y de respeto, aportando esas explicaciones que en vez de aclaratorias resultan ofensivas para sus conciudadanos. Sin embargo el abogado Barceló salió de su anonimato con este tipo de actuaciones. “Voy a detener a Uribe”, dicen que comentaba, en víspera de elecciones cuando llamó a “panelistas” de radio para dar información. Aunque los togados gozan de la impunidad que les garantiza su juez: la Comisión de Acusaciones de la Cámara, en esta oportunidad el señor Barceló, quedó en ridículo y su conducta, al parecer, tocó las páginas del código penal. ​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​