Mantiene activo su sistema de lucha y resistencia política y militar, pero también su disposición para avanzar en un proceso de paz.
Redacción El Nuevo Liberal.
El ELN, Ejército de Liberación Nacional, anunció a Gustavo Petro su disposición para avanzar en un proceso de paz que dé continuidad a la mesa de conversaciones iniciada en Quito en febrero del año 2017 siempre y cuando el presidente electo emprenda varias reformas económicas y sociales que el grupo armado ilegal considera urgentes.
Por su parte, Petro, que ganó los comicios con aproximadamente 11,3 millones de votos (el 50,44 %) frente a los casi 10,6 millones (47,31 %) de su rival, Rodolfo Hernández, se ha mostrado abierto a negociar con el ELN durante su Gobierno y a retomar los diálogos que de Quito fueron trasladados a La Habana, donde fueron interrumpidos en 2018.
Durante su campaña electoral el presidente electo aseguró que quería retomar el plan de paz del expresidente Juan Manuel Santos (2010-2018), desde implementar totalmente el acuerdo de paz firmado con las FARC, a retomar las negociaciones con el ELN.
Un acuerdo con el ELN, indicó entonces, «que quedó en mitad de camino pero que habría que acelerar y que podría, depende del ELN, volver a crear el clima de paz y de avance democrático».
Este grupo armado, mantiene activo su sistema de lucha y resistencia política y militar, pero también su plena disposición para avanzar en un proceso de paz que dé continuidad a la Mesa de Conversaciones iniciada en Quito en febrero de 2017 dice el comunicado emitido por el grupo guerrillero.
Asimismo, establecen mediante el comunicado que, “si el presidente elegido se posiciona el 7 de agosto para hacer los cambios que nos encaminen a superar el clientelismo y sacar la violencia de la política, avanzar en planes de inclusión social que contemplan empleo y emprendimiento para las mayorías, un plan de reforma agraria, un nuevo modelo de lucha contra las drogas y le da continuidad al proceso de paz, Colombia tendrá un gobierno respaldado por el movimiento popular, pero si se instala para hacer ‘más de lo mismo’ tendrá al pueblo en las calles reclamando cambios con más vehemencia que en 2019 y 2021”.
En el comunicado el ELN establece que, “sustituir los cultivos de uso ilícito en Colombia es solo una parte necesaria para poner fin al narcotráfico, pues sus ganancias provienen principalmente de la comercialización internacional, el lavado de narco dinero, del negocio de los insumos y de los lavatorios de procesamiento; la fracasada guerra contra las drogas después de 50 años de desastres exige una política alternativa consensuada con los países consumidores, Colombia como país más afectado por esta guerra reclama un cambio radical de estrategia antidrogas”.
Es de anotar que el gobierno del presidente Iván duque cesó las conversaciones con el ELN tras un ataque terrorista contra la Escuela de Cadetes de Policía General Santander, el 17 de enero de 2019, que cobró la vida de 23 personas y dejó casi 100 personas más heridas; la mayoría de ellos jóvenes cadetes que realizaban su formación como Oficiales de Policía.