Rosana Mejía es la Consejera Mayor de la Asociación de Consejos Comunitarios Negros del Norte del Cauca (Aconc), el atentado contra su integridad se presentó en el municipio de Caloto.
Rosana Mejía líder de Aconc denunció que el domingo 21 de agosto, cerca de las 11:00 p.m. se encontraba con su hermana en su vivienda, ubicada en la vereda Santa Rosa, del municipio de Caloto (Cauca), cuando comenzaron a disparar a la ventana de su habitación, su reacción para protegerse fue meterse debajo de la cama, lo que ayudó a que saliera ilesa del ataque armado del cual informó la Policía, habían vaciado un proveedor de un arma frente a su vivienda.
Ante el hecho que no dejaron heridos ni víctimas la Defensoría del Pueblo reitero el llamado a la Unidad Nacional de Protección para que, con carácter de emergencia y prioridad, refuerce el esquema de seguridad asignado a la Defensora de Derechos Humanos, para responder de manera efectiva a los riesgos que implica el ejercicio de su labor de defensa de las comunidades afrocolombianas que habitan el Cauca.
Actualmente Rosana Mejía cuenta con un esquema de seguridad de dos hombres, le quitaron el vehículo blindado para movilizarse con sus escoltas, aspecto que la pone en riesgo. Esta no es la primera acción intimidatoria de la que es víctima la lideresa, pues señaló que ha sido amenazada y ha aparecido en panfletos que circulan en el norte del Cauca.
Por su parte Feliciano Valencia líder indígena del Cauca y ex Senador manifestó, por medio de Twitter, “rechazo absoluto al atentado en contra de la Consejera Mayor de Aconc, Rosana Mejía Caicedo y su familia la noche del domingo. Exigimos a las autoridades y al gobierno nacional que se haga una investigación para conocer a los autores y se proteja su vida y la de su familia”.
De esta manera, la Asociación de Consejos Comunitarios del Norte del Cauca, Aconc, denunció el atentado contra la Consejera Mayor, Rosana Mejía, perpetrado en una casa familiar ubicada en la vereda Santa Rosa, zona rural del municipio de Caloto, norte del Cauca.
Rosana Mejía también denunció que ha registrado ante las autoridades competentes 28 amenazas y que su nombre aparece en dos panfletos que grupos armados al margen de la ley han emitido recientemente.
La víctima relató que, “se escuchó un ruido en la ventana y luego empezaron unos disparos que impactaron en la pared y en el closet. Afortunadamente alcancé a tirarme de la cama impidiendo que el hecho pasara a mayores”; igualmente advirtió que, “en el mes de marzo se me desmejoró el esquema de seguridad, la Unidad Nacional de Protección me levantó el vehículo y quedé simplemente con dos hombres a pie, un chaleco y un medio de comunicación”, quedando incompleto su esquema de protección.
Por su parte, Mauricio Capaz, consejero mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca, Cric, rechazó el atentado contra la lideresa y su familia y llamó a las autoridades del Estado colombiano a que den con el paradero de los responsables y los lleven ante la justicia.
“Es inaceptable todo lo que viene pasando en la zona norte del Cauca, y es necesario revisar todos los mecanismos de protección alrededor de estos liderazgos, puesto que los niveles de afectación y complejidades que se viven en la región ponen en riesgo muy alto a los líderes de los procesos sociales”, aseveró Capaz.
Los 43 Consejos Comunitarios del norte del Cauca puntualizan que sientan una voz de protesta contra estos hechos violentos que quieren callar a sus representantes.