“Yo soy un ejemplo de que una mujer sí puede ser protagonista en política”

Liliana Ararat Mejía, alcaldesa electa de Caloto.

Liliana Ararat Mejía, alcaldesa electa de Caloto

María Liliana Ararat Mejía fue elegida, bajo las banderas del partido Liberal, alcaldesa del municipio de Caloto en las pasadas elecciones del 25 de octubre con un porcentaje del 48, 81 de la votación. Se ha  desempeñado  como tesorera del Municipio y ha manifestado que una de sus prioridades será la de   impulsar la política social sin sectarismos.

El Nuevo Liberal ¿Quién es Liliana Ararat?

Liliana Ararat Soy administradora de empresas y gerente social. Empecé a hacer política desde el año 1990, cuando comencé a trabajar y a servir en la administración municipal de Caloto. Tengo cinco hermanos, mi marido y tengo una hija de 17 años, mi familia es muy unida.

Allí pasé por los diferentes cargos de la administración y terminé siendo tesorera en el año 2010. Mi idea ha sido siempre hacer algo por nuestro pueblo y estoy segura que, desde el municipio, se puede hacer un gran aporte por nuestras gentes, por nuestras comunidades.

Todo ese tiempo he estado haciendo trabajo social, fuí presidente de una asociación de mujeres  con el ánimo de responderle a la gente con iniciativas que se puedan sacar adelante y avanzar en procesos que la comunidad necesita.

E.N.L. ¿Cuál era su trabajo concreto como directora de la asociación de mujeres?

L.A. La idea siempre ha sido visibilizar el papel de la mujer en muchos roles;  en general, la mujer no participa mucho en la vida política de las comunidades, entonces trabajamos duro para visibilizar la importancia, el papel fundamental de las mujeres. En el año 2.002 sacamos una concejal aquí en Caloto, y fue una experiencia bonita.

Pero, por esa poca participación que tenemos las mujeres, la asociación perdió ese espacio en el Concejo  hasta el punto de que hoy no sacamos ni una sola mujer. Además, hubo casi que rogarle a las mujeres para que participaran en la actividad política. De las mujeres que teníamos en las listas para el Concejo no salió ninguna y entonces la idea es que nosotras, las mujeres caucanas, podamos hacer parte activa de la política de nuestros municipios

ENL ¿Por qué las mujeres de su municipio no participan tan activamente en política?

L.A. Tal vez falta conciencia política o falta también de que la mujer se meta en los procesos. Hoy todavía no hay mucho interés, tal vez  nos hemos acostumbrado a que sean los hombres los que dirijan y nosotras estar de segundonas, pero hay que cambiar esa mentalidad y en eso estamos, yo soy un ejemplo de que sí se puede cambiar eso.

E.N.L. ¿Qué dificultades ha tenido que vencer en la política por ser mujer y por ser afrodescendiente?

L.A. A nosotras las mujeres nos toca doble el trabajo porque tenemos que estar pendientes de la casa, de los hijos, y no podemos libremente salir y hacer campaña únicamente pensando en la política, sino que también hay que pensar en otras cosas.

Además, siempre existe el prejuicio de que las mujeres no somos capaces y de que llega una mujer y entonces el marido es el que va a mandar o que el líder político es el que va a mandar. Mucha gente no cree en uno y romper con esos paradigmas es bien difícil, pero se dio en Caloto y pudimos convencer a la mayoría de la gente de que podíamos hacer algo importante para la comunidad, y que no era únicamente como mujer, sino que alrededor de Liliana hay otras mujeres, otros hombres, hay un equipo de trabajo que se complementa.

Además, venimos de una administración que no fue la mejor para el pueblo,  entonces la gente también sienta su voz de protesta por eso.

E.N.L. ¿Por qué Caloto confía en una mujer para que sea su alcaldesa?

L.A. Las mujeres somos mejores administradoras, las mujeres aparte de la razón, le ponemos un poquito de corazón a las cosas y tenemos un sentido humanitario de ver la vida, y eso nos ayudó bastante, porque le tocamos el corazón a la gente, sobre todo a las mujeres.

E.N.L. Y a usted ¿los hombres sí le hacen caso?

L.A. (Risas) Bastante, yo creo que sí.