Editorial
Por: Marco Antonio Valencia Calle
EEnero es el mes en el que regresamos a clases después de las vacaciones. Con ello llegan nuevos compromisos para maestros, padres de familia, estudiantes, instituciones educativas y directivos.
Librerías y papelerías comienzan a moverse por compra de útiles escolares. Un aspecto importante, ya que cada uno de estos elementos ayuda al proceso educativo. Además, es esencial fomentar la lectura, ya que ésta es un compromiso vital hoy en día. Esperamos que los precios de cuadernos y otros enseres, estén a la alcance de la economía regional.
En las escuelas, sus directivos deben pensar en la importancia que tiene hoy en día la educación por proyectos pedagógicos, y el acompañamiento psicológico a sus estudiantes, ya que no solo se trata de educar en saberes tradicionales, sino también en valores, ecología, arte, convivencia y paz. Especial atención merecen los estudiantes en situación de discapacidad.
Las Secretarias de Educación están llamadas a atender los desafíos que implica el servicio escolar en áreas rurales. Allí hay que reforzar el compromiso de educar con calidad, llegar con herramientas didácticas acordes y acompañamiento de tutores pedagógicos, brindar apoyo alimentario a los estudiantes todo el año, no rebajar el número de horas de clase.
Hay que revisar el tema de aulas multigrado, donde a un solo docente le toca atender hasta seis grados de manera simultánea y se cierran sedes escolares por bajo número de estudiantes perjudicando a los pocos que hay.
Los padres de familia tienen el compromiso diario de acompañar el proceso educativo, al mismo tiempo que cuidar, escuchar y proteger a sus hijos. La educación no es solo para el futuro, sino para vivir hoy.
Los mejores estudiantes son quienes tienen compañía de sus padres para hacer tareas y estudiar. Sin embargo, es importante tener en cuenta que habrá retos, dificultades y problemas, pero hablando, con paciencia, se pueden resolver. Los padres tienen que ayudarse entre sí, solicitar apoyo de todo tipo de entidades para lograr hacer su tarea de formar.
Los estudiantes, igualmente tienen retos complejos para su regreso a clases.
Sus dificultades tienen que ver con la edad, habilidades sociales y circunstancias personales. Veamos algunos desafíos que deben sortear.
El inicio de un nuevo año supone temas que pueden ser difíciles o aburridos e implica tener ganas de aprender. Es necesario que padres y maestros enseñen a concentrarse para que no se distraigan e incluso puedan controlar su hiperactividad.
Hay que recomendar y motivar la participación en clases, discusiones de grupo y expresión de ideas. Al regreso de vacaciones se requiere recordar aspectos de orden y organización persona para el uso de tiempos, entre otros; estudiar implica hacer tareas y requiere apoyo y motivación en la casa para hacerlas.
El uso de la tecnología demanda aprendizaje, hay que brindarlo desde la escuela y en la casa, no es cierto que los niños nazcan aprendidos en el tema de las TICS.
A veces adaptarse a nuevos ambientes, colegio, profesores o compañeros requiere hacer un esfuerzo adicional para sobreponerse. Hay que tener paciencia, dar apoyo y generar espacios de confianza.
Finalmente, en todo grupo humano suelen presentarse personas con problemas personales, familiares, económicos o de salud, y estos temas son necesarios atenderlos por parte de los adultos para no disminuir la capacidad de atención y aprendizaje.
Y claro que los estudiantes sean comprensivos con sus compañeros, así evitamos el matoneo y la deserción escolar.
Buen regreso a clases y éxitos para todos.