La Institución Educativa Granja – Escuela Amalaka es la única en Colombia que cuenta con una reserva Natural.
Por: Leidy Capote López
El Nuevo Liberal.
El pasado miércoles 27 de julio, se llevó a cabo la gran jornada de siembra, por la restauración de los ecosistemas, actividad que tuvo como escenario y principal promotor la Reserva Natural de la Sociedad Civil (RNSC) Amalaka e Institución Educativa Granja – Escuela Amalaka, quienes de la mano con la Fundación Cauca Verde Ambiental, Universidad Cooperativa de Colombia, Fundación Universitaria de Popayán, Guardia Comunitaria los Sin Techo, Ejército Nacional y comunidad en general, que también se unieron a esta causa, ayudaron a hacer posible la sembratón.
Al llegar a la Reserva Natural de la Sociedad Civil Amalaka, donde se encuentra ubicada la Institución Educativa Granja – Escuela Amalaka, sólo se percibe tranquilidad, armonía y paz. Es un lugar donde se dan cita más de 60 estudiantes, de lunes a viernes, con el propósito de aprender cada día algo nuevo, y es que, a diferencia de los colegios tradicionales, Amalaka se caracteriza por brindar una educación fuera de la monotonía que implica un salón de clase, pues gracias a la imponente reserva natural que los rodea, los docentes encuentran en estos escenarios naturales una forma diferente para enseñar a sus pupilos.
Anne Marie Fankhauser es la directora de la Fundación Amalaka y Gestora de la Granja Escuela Amalaka, que inició sus labores hace 25 años. Cabe resaltar que, esta es la única Institución educativa en Colombia ubicada dentro de una reserva natural de la Sociedad Civil.
“Aquí estamos en tres escenarios; el territorio es de la Reserva Natural de la Sociedad Civil Amalaka, que dentro de ella está ubicada la única Institución Educativa colombiana Técnica Agroambiental, con una pedagogía alternativa y también tiene la sede la Fundación Amalaka, de la cual soy la directora actual y representante legal”, indicó Fankhauser.
Los primeros en llegar al majestuoso lugar fueron miembros de la Guardia Comunitaria los Sin Techo, quienes aprovecharon para enviar un mensaje a la comunidad en general sobre estas importantes causas. “Nosotros pertenecemos a la organización de los Sin Techo estamos en la lucha por una vivienda digna que necesitamos y esta actividad de siembra la hacemos con el fin de tener oxígeno, además, para que en estas lluvias nos protejan. El sembrar un árbol se relaciona con la luchar por la vida, pues se trata de tener un oxígeno libre y puro. Queremos que todo el pueblo payanés se una a estas lindas tareas”, indicaron los líderes de esta organización.
“Hoy es una gran alegría, pues estamos con un gran sembratón donde se ha vinculado muchísima gente, por lo cual es muy lindo ver aquí la Fundación Cauca Verde Ambiental que ha organizado esto con nosotros, está presente El Ejército, la Guardia Comunitaria, han llegado personas desconocidas que se unieron a esta gran labor de sembrar la vida acá, la vecindad y obviamente la comunidad educativa; nuestros estudiantes de preescolar hasta grado once, para ellos es muy importante porque es parte de nuestro territorio”, explicó Fankhauser.
Un poco más tarde comenzaron a llegar habitantes de la zona aledaña, con el fin de unirse a esta actividad, como fue el caso de Edgar Cortés, miembro de la Junta de Acción Comunal de la Vereda Florencia, “estoy aquí para contribuir con la reforestación de un área que es estratégicamente muy importante para esta región, es el corredor entre la cordillera occidental; Parque Nacional Munchique y Parque Nacional Puracé en la cordillera central. El mensaje es que, en Popayán y en todo el departamento participemos en este tipo de eventos y nos comprometamos, porque si no cuidamos esto, el supuesto desarrollo que se viene, va a destruirlo todo. Tenemos que salvar estas áreas”.
Cabe resaltar, la gran importancia que tiene esta reserva natural y sus alrededores, pues por este lugar transitan diferentes tipos de animales silvestres y de fauna muy importantes para la región. De ahí que, la actividad que se realizó resulta primordial para recuperar estas áreas que han sido despojadas de vegetación, con el ánimo de proteger los suelos y salvar los cauces de agua, pues en la zona pasa la quebrada La Victoria y por el otro lado está el río El Cofre, que son significativos dentro de la Cuenca del río Cauca.
El Nuevo Liberal también hizo parte de esta gran sembratón y al indagar un poco sobre el origen de la gestora de toda esta importante actividad: Anne Marie Fankhauser, nació en Suiza, sin embargo, una vez conoció Colombia su corazón comenzó a echar raíz en este país, a tal punto que logró la doble nacionalidad y actualmente lleva 38 años viviendo en Colombia. “Llegué al Cauca viendo esta biodiversidad, además es de los departamentos más bio y mega diversos que tiene Colombia, eso me atrapó mucho, me enamoró, fuera de la gente que hay aquí, pues los colombianos son personas muy queridas y trabajadoras. Realmente estoy aquí porque vine a trabajar por la niñez en Colombia, empecé con los niños indigentes en Bogotá, ese fue mi primer trabajo de voluntaria y desde ese momento me quedé aquí, ya son casi 40 años”.
“Yo pienso que los árboles son nuestros hermanos mayores, los que nos proveen el oxígeno y la sombra. Colombia está perdiendo muchísimos bosques, centenares de hectáreas y kilómetros cuadrados en vegetación nativa y en bosque primario y secundario. De manera que, el llamado también es a la parte gubernamental para que esto cambie, tenemos una gran responsabilidad no solamente en nuestro país Colombia, sino ante el mundo, porque hacemos parte de la cuenca amazónica y pacífica, es decir, estamos produciendo oxígeno para el mundo, no solamente para nosotros, entonces siento que Colombia es un país mega diverso, el más rico en toda esa biodiversidad. Es por eso que creo que, las escuelas deben estar vinculadas a esta actividad, en Colombia, todas las instituciones educativas deberían trabajar de manera muy seria y con compromiso el tema bio-ambiental, porque lo que tenemos aquí no se encuentra en ningún otro país, entonces sembrar un árbol es sembrar vida”, agregó Anne Marie Fankhauser.
En ese sentido, según Fankhauser, se tiene que empezar a pensar que todo el desarrollo de una zona, los compromisos con todos los sectores y los gremios, giran alrededor del sector ambiental, ya que, si queremos sobrevivir como especie debemos pensar en restaurar lo que se ha dañado durante décadas. “Ahorita vemos todas las tragedias que hay por inundaciones, por temperaturas muy altas en otras partes del planeta y yo no veo otra opción que el compromiso con el medio ambiente”, agregó.
“Desde que vivimos en este sector, estamos restaurando nuestras laderas por eso tenemos senderos para el avistamiento de aves, en toda la meseta de Popayán, somos el lugar con un área grandísima, donde se han registrado más aves. Orgullosamente tenemos registradas 174 especies de aves y la presencia de una rana endémica que sólo se da en Colombia y hace diez años aproximadamente que no se tenía registro de su presencia en el país, pero aquí en nuestra reserva natural ya la tenemos”, dijo la directora de la Fundación Amalaka.
Por su parte, Andrés Cisneros Enríquez, presidente de la Fundación Cauca Verde Ambiental, se dedica a la restauración, reforestación y a conseguir la productividad social, ambiental y efectiva de las familias campesinas, indígenas y afrocolombianas de toda Colombia. “Esta actividad se programó para proteger no solamente toda esta montaña que está siendo deforestada, sino también prevenir deslizamientos de la cordillera con la siembra de 1.500 árboles. Queremos transmitir la necesidad de que todos siembren árboles, pues estos representan vida, agua, oxígeno y además, son los encargados de capturar CO2, es decir, gas carbónico, lo cual va a disminuir el cambio climático, de tal manera que entre más sembremos, vamos a dejar de ver estos estados de lluvia y calor permanentes por una verdadera estacionalidad del clima, volviendo al orden natural de las cosas”, explicó Cisneros Enríquez.
Por otro lado, cabe destacar que, en el mes de diciembre del año 2021, el Congreso de la República emitió la ley 2173, la cual dice básicamente que, cada municipio tiene que generar áreas de vida, espacios de restauración y Amalaka es uno de esos espacios donde lo están haciendo de manera consciente. Es la única reserva natural de la Sociedad Civil sobre la vía Panamericana, asimismo, es la única en el trayecto entre Popayán y Santander de Quilichao y es la única que alberga una institución educativa. De esta manera, la lección para todos los que estuvieron presentes en esta importante actividad y demás habitantes, es que los ecosistemas no se dañan, sino que se fortalecen y se establecen soluciones en pro de su sostenimiento.
Finalmente, no está de más recordar que, la riqueza de Colombia está en la biodiversidad, ahí es donde somos líderes en el mundo y al no protegerla se estaría dejando a la deriva nuestra propia identidad y soberanía. Asimismo, los niños deben educarse con ese principio, que es la protección de su mayor riqueza, la biodiversidad nacional.