Popayán, historia y cultura

JESUS PIÑACUE
Por: Guillermo Alberto González Mosquera

Cuando el sábado 5 de julio de l986 el Papa Juan Pablo II visitó la recientemente destruida capital del Cauca, un muchacho indígena que oficiaba como acólito en la imponente ceremonia central que tenía lugar en la explanada de Campamento, fue testigo cercano de un hecho que iba a cambiar fundamentalmente su vida. Más de cincuenta mil personas seguían con febril devoción la misa que celebraba el Pontífice a campo abierto, en que se había incluido la participación, en el momento del ofertorio, de un representante de las etnias indígenas del departamento. El escogido era Guillermo Tenorio, perteneciente a la región Pez quien habría de leer un texto previamente revisado con minuciosidad vaticana por los encargados de cada uno de los actos en los que participaría el Santo Padre. Sin embargo, la sorpresa fue mayúscula cuando Tenorio apartándose totalmente de lo convenido, presentó ante la multitud un memorial de severo tono y contenido recriminatorio, que de inmediato provocó la intervención del Dean de la Catedral de Popayán, con el propósito de impedir que continuara la lectura. El Pontífice ordenó, benévolo, que no se interrumpiera el discurso hasta su conclusión y el incidente, quedó por supuesto, registrado en palabras e imágenes que dieron la vuelta al mundo.

Jesús Piñacué

Jesús Piñacué, entonces de veintidós años y quien adelantaba estudios de filosofía con la intención de seguir la carrera del sacerdocio, resolvió ese mismo día que su vocación no era la eclesiástica y que tenía que regresar a su nativa Tierradentro para meditar acerca de su futuro, al lado de su pueblo. Había nacido en el Resguardo de Calderas, en los límites entre Inzá y Páez, y todos sus ancestros eran paeces. Sus estudios primarios los realizó en Toez, la pequeña aldea que contaba con un centro de capacitación para muchachos indígenas. Pasó luego a la secundaria de Inzá y muy pronto se fue al Instituto Intermisional de los Padres Javerianos en Bogotá. Su paradigma era entonces, el Padre Alvaro Ulcué, un sacerdote indígena que terminó su breve existencia, asesinado por sectores reaccionarios que no le perdonaron su lucha en favor de los derechos humanos. Piñacué sentía que debía continuar esa tarea a través de la vida sacerdotal, hasta que presenció el incidente ocurrido con la visita del Papa a Popayán.

En los siguientes 10 años vivió en Tierradentro, buscando la forma de encontrar su identidad política y encauzando sus propias aspiraciones de algún día representar a las gentes de su raza. En los dos primeros años, tomaba «chicha» en las cantinas y perdía el tiempo en ocupaciones inútiles. Pero bien pronto, lo sedujo la forma como el CRIC, – el polémico y batallador Consejo Regional Indígena del Cauca -, encaraba la lucha en favor de los derechos de sus corraciales, especialmente los relacionados con la ampliación del territorio de los resguardos y el reconocimiento de las autoridades propias. Piñacué tuvo entonces, la oportunidad de participar en las tareas estratégicas del CRIC, pero nunca quiso comprometerse en la lucha armada, que por los mismos años, llevaba a cabo el grupo insurgente Quintín Lame, cuyo principal territorio de acción era Tierradentro. No coincidía con ellos en el argumento de que el uso de la violencia era el camino para conseguir los objetivos de cambio de las injustas condiciones del indio colombiano.

Con el advenimiento de la Reforma Constitucional de 1991, Piñacué encontró que su aspiración de llegar al Parlamento era posible, adquiriendo así la preminencia política que requería para sus propósitos de liderar las luchas de su pueblo. Fracasó en su primera postulación en 1994, pero lo volvió a intentar con una estrategia más refinada en 1998. No quiso acogerse a la circunscripción especial que privilegiaba su condición étnica, sino que se presentó por la nacional, que implicaba una mayor libertad en la campaña y más amplias oportunidades para ponerse en contacto con grupos independientes de todo el país. Logró sus propósitos ampliamente. Entre más de trescientas listas de aspirantes a ocupar un escaño en la Cámara Alta, obtuvo un honroso decimoquinto lugar, con amplio respaldo no sólo en el Cauca, sino también en Bogotá y el Valle. Estaba, así, asegurado el escenario para sus actuaciones futuras. Había demostrado, como lo venía preconizando de tiempo atrás que para sus objetivos era preferible, una democracia más amplia y participativa, que una de dádivas y concesiones facilistas.

Piñacué ha querido que su tarea política sea una secuencia de lo que en el pasado realizaron corraciales suyos como La Gaitana, Manuel Quintín Lame o Juan Tama. No quiere dejar perder el hilo conductor de la historia. La ha estudiado y tiene bien claro que su misión es «tender un puente que permita una comunicación con efectos positivos entre las distintas manifestaciones de la vida del país y las de los paeces».

En suma, Jesús Piñacué representa una nueva generación de caucanos que se siente orgulloso de saberse parte principal de una etnia de enorme significación en la historia colombiana. Su posición independiente está más de cara al siglo que viene. Sin renunciar a su tradición cultural, quiere ir más adelante para aprovechar legítimamente una circunstancia en la cual está jugando un papel decisivo para el futuro de su raza y para su propio lugar en la historia de los caucanos del Siglo XX.

 

SAN FRANCISCO

Martes 11 de abril 2000
De: Mario Pachajoa Burbano

El Liberal de hoy dedica una página a nuestro hermoso templo San Francisco. Reproducimos una parte muy reducida de ella y lo invitamos a admirar las fotos corrrespondientes y texto completo, en la dirección, sociales, siguiente:

San Francisco es el tesoro más valioso que posee la Ciudad Blanca.

La iglesia un museo vivo de la historia religiosa
En el camino de San Francisco
Por Durley Castro
El Liberal

San Francisco es el tesoro más valioso que posee la Ciudad Blanca. Ella encierra tesoros religiosos, que son fruto del amor hecho realidad en obras positivas. Se puede pensar que ante el misterio insondable de muerte, el hombre quiere permanecer vivo a través de sus obras que son la proyección de sí mismo hacia el futuro de una existencia que transcurre fugaz en el correr misterioso del tiempo y se diluye en el infinito.

El púlpito de la iglesia, perteneciente a la escuela quiteña del siglo XVIII, estilo barroco granadino, tallado en madera y decorado en pan de oro. Se le califica como la mejor obra que hay en Colombia. Poseía seis estatuillas representando a la orden Seráfica de San Francisco, actualmente sólo quedan dos; en la canéfora se observan frutas típicas de la región como también la enredadera de la vid con aves nativas y rostros indígenas.

Las imágenes

En el altar mayor se encuentra la Virgen de Nuestra Señora de las Gracias, patrona de los franciscanos. La iglesia posee una serie de imágenes sacras, siendo las más importantes:

Cristo de la Veracruz

Llamado así por cuanto tiene incrustada una partícula de la propia cruz donde murió Jesucristo. Se cree que fue traído de España y es una de las más hermosas imágenes que tiene Popayán, de Jesús crucificado pendiendo de una cruz.

La cruz está enchapada en plata repujada, posiblemente traída del Perú. En una de las láminas de plata se encuentran escritas en tinta negra el año 1600 con las iniciales MMPM que posiblemente son del nombre del escultor y se atribuyen a Juan Martínez Montañés.

Cachorro

Imagen española que fue donada al templo por el expresidente Guillermo León Valencia en 1952, quien refirió que habiendo asistido a la procesión de Sevilla (España) se había situado en un balcón en una de las calles centrales por donde pasaría la Santa Imagen y al encontrarse la mirada del Santo Cristo denominado el Cachorro con su mirada quedó extasiado ante aquellos dulces y penetrantes ojos.

De allí la idea de tener una auténtica copia y traerla a la ciudad para las procesiones. Lo encargó en España al artista José Lauriel en 1952 y fue agregado a las procesiones en 1955.

El cuadro del cajón de Cristo.

Este lienzo tiene la fecha de 1667 y aparece como obra de un pintor arcaizante más relacionado con santafereño que con lo quiteño su posible autor es Juan Pérez Mexia Sorro.

Los osarios.

En ellos se acostumbraba a enterrar a las dos familias que más aportaban económicamente a la iglesia como era la familia Valencia y la familia Mosquera. Algunos de los más antiguos son el de Manuela Petrona Celestina Mosquera 1856 y el corazón de José Rafael y Mosquera 1876. Los túneles de flagelación pasan por encima de las dos naves laterales. Estos eran utilizados por los antiguos franciscanos del convento para purgar sus pecados flagelándose con el disciplinario de cuero o de alambre según la gravedad de estos. También permanecían ahí cuando estaban enfermos de algún virus contagioso.

Las momias de San Francisco

Hay dos momias que fueron halladas hace unos cuarenta años en la iglesia por el párroco Laureano Mosquera y que tienen cerca de 200 años.

De ellas hay varias teorías. Dos son: 1- Se dice que una de ellas la que está vestida de obispo pudo haber sido Fray Serafin Barbetti, el arquitecto franciscano que construyó el puente del Humilladero. La otra se dice que pudo haber sido Simon Scheinner, un jesuita arquitecto que hizo los planos del puente viejo de Cauca. 2- También se dice que pudieron ser los directores del colegio de Nuestra Señora de las Gracias llamados Diego de la Pobreza y Thomas de Velardy.

También está la maquinaria del reloj que había en la fachada de la iglesia y que con el terremoto del 83 se cayó y se destruyó. El otro túnel se conserva en toda su originalidad.

El campanario.

Su campana es una de las más grandes de Colombia y la gran del Cauca. Fue mandada hacer por Pedro Agustín de Valencia el primer Valencia hombre nacido en Popayán.

La campana tiene una inscripción en la parte superior que dice don Pedro Agustín de Valencia año 1780, dedicada a San Antonio de Padua. Ya que la familia Valencia fue la que trajo la devoción de San Antonio a Popayán.

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Interior de la iglesia
Su campana es una de las más grandes de Colombia y la gran del Cauca.

 

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