Columna de opinión
Por: ÁLVARO JESÚS URBANO ROJAS
Urge declarar la situación de calamidad pública y urgencia manifiesta, para facilitar las actuaciones gubernamentales, necesarias para atender daños y desplazamientos poblacionales, por causa del deslizamiento de 50 hectáreas en el kilómetro 75, es decir, entre 8 a 9 millones de metros cúbicos, en Rosas Cauca, situación compleja sin solución inmediata; justo cuando inicia la época de mayores lluvias: febrero, marzo, abril y mayo.
Más del 40% de la seguridad alimentaria del Valle del cauca y el eje cafetero, provienen del Cauca, Nariño, Caquetá y Putumayo. Alrededor de 3.200 toneladas de alimentos, ingresan a diario a la Central de Abastos CAVASA. La ola invernal incrementará sus costos, afectando los precios al consumidor del Cauca y Nariño, que recibe del Valle alimentos procesados, los que incluso, llegan al norte de Ecuador.
La coyuntura generará una presión adicional en la inflación de alimentos y bebidas en la medida en que las alternativas de transporte de estos productos, por vía terrestre, aérea o marítima impliquen mayores tiempos de viaje para empresarios y comerciantes. Se calcula que desde el Cauca y Nariño salen a diario 564.000 litros de leche provenientes de 43.000 pequeños productores, que abastecen el territorio nacional.
La infraestructura vial del sur del país, tiene un retraso de más de ochenta años, resultado del ancestral aislamiento que impide la comunicación adecuada interregional del centro del país con los países vecinos, lo cual obliga a habilitar la vía por la frontera ecuatoriana destino Rumichaca, entrando por la Hormiga – Popayán – Caloto. Así como fortalecer las vías terciarias por Mocoa-Pitalito y mejorar vías alternas como la de Sucre-La Sierra-Rosas, Coconuco, Paletará, San José de Isnos, Totoró, Inzá, Belalcázar, La Plata Huila.
Hay que reducir el costo del transporte aéreo, con aeropuertos locales a tarifa cero por conceptos de tasa aeroportuaria nacional, derechos de aeródromo, estacionamientos y servicio de protección al vuelo nacional.
Construir la vía férrea y reactivar la empresa Ferrocarriles del Pacífico, inversión de bajo impacto ambiental, interconectando Tumaco, El Charco, Guapi, Timbiquí, López de Micay, Buenaventura, Quibdó, Urabá antioqueño y Panamá, ampliando la carretera al mar por el Cauca, habilitada por los actores armados ilegales, así como la terminación de la doble calzada hasta Ipiales, vía Timbío y el Estanquillo de 62 km. Con inversiones cercanas a los $32.4 billones, ojalá conectando el corredor vial Quibdó-Pereira al de Pasto-Mocoa y Pitalito, opción que debe ser evaluada de manera conjunta con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
Participar en el megaproyecto corredor intermodal Tumaco-Puerto Asís -Belem do Para; consolidando el eje de integración de desarrollo de la región Panamazónica (Pacífica-Andina- Amazónica) tomando como referencia el exitoso modelo de la Superintendencia de la Zona Franca de Manaos, activando la frontera que compartimos con Ecuador, Perú, Brasil, que requiere un esfuerzo inteligente del Estado, aprovechando nuestra posición geoestratégica en el contexto global y regional en un proyecto que hace parte de la iniciativa para la integración de la infraestructura regional Suramericana.