CAYO BETANCOURT
Un líder es capaz de adaptarse a situaciones cambiantes y entornos diferentes, sus habilidades le permiten asociar acciones individuales a patrones de comportamiento y entender porqué las personas se comportan de cierta manera, guiándolas adaptativamente a conseguir un resultado grupal. La cultura corporativa está compuesta de los comportamientos, normas y reglas no escritas en los manuales de las compañías. La forma de interactuar de los seguidores y la conducta grupal constituyen un reto interesante para los líderes, especialmente cuando son nuevos en el entorno, o existe un proceder general de rechazo cuando se asigna una persona del equipo para dirigir las actividades.
Las compañías plantean una visión asociada a la meta esperada en el futuro, entretanto la misión constituye las acciones y la razón por la cual conducen a esa meta. La visión y la misión deben estar asociadas con un rendimiento financiero y este soportado por una estrategia. Un error común es suponer que la cultura corporativa está englobada en la misión y visión de la compañía, en el mundo ideal es lo esperado, pero en la realidad existen variaciones y el tamaño de estas genera disrupción frente a las expectativas de los líderes.
Es habitual indicar que la estrategia es tomada como desayuno por la cultura corporativa, especialmente cuando los líderes plantean un camino para conseguir objetivos y este camino está desconectado de las expectativas y necesidades de los colaboradores. Las lecciones aprendidas generan observaciones valiosas para estos entornos, especialmente cuando se analizan estrategias pasadas que fallaron en el pasado, una compañía debe estar en la capacidad de registrar el resultado de los planes estratégicos y generar un análisis en el momento que estos fallan. El estudio de las condiciones en un entorno posterior, apoya la construcción de un marco de trabajo asociando las necesidades de la compañía con las expectativas del mercado y busca involucrar activamente a los empleados para generar empoderamiento en la consecución de la meta. Un líder debe analizar las diferentes variables que generan disrupción en su equipo de trabajo, entender los comportamientos, generar un balance entre las necesidades de los colaboradores y la estrategia de la compañía.
En términos generales, la cultura corporativa debe observarse como un valor intangible de la organización, independiente de la industria y el tamaño de la empresa; coexistiendo en un equilibrio que soporte los objetivos de la organización y apoyando las necesidades de los empleados. Cuando el equilibrio entre cultura organizacional y objetivos estratégicos se rompe, las personas están desmotivadas, los ingresos de la compañía se ponen en riesgo y la continuidad de la empresa genera preocupación. El rol de un líder es generar este delicado equilibro, discutiendo cambios que promuevan el desarrollo de las personas y eliminen aspectos negativos en el comportamiento grupal.
Cuando las organizaciones están en problemas financieros, deben discutirse abiertamente las prioridades, porque solucionar inconvenientes en el comportamiento grupal debe pasar a un segundo plano y enfocarse en generar ingresos que permitan una estabilidad en el mercado, lo cual se refleja en estabilidad laboral. Un líder visionario es directo, crea expectativas claras y promueve el apoyo de los colaboradores en situaciones críticas; las expectativas falsas y promesas no cumplidas generan pérdida de credibilidad y disminuyen el factor motivacional de los empleados.
La perspectiva de liderazgo y capacidad operativa debe observarse en diferentes planos, especialmente desde fuera de la organización. Cuando un empleado es comprometido, genera valor con sus actividades, impulsa su equipo de trabajo, se observa como un elemento valioso que debe replicarse; desafortunadamente, algunos de estos casos obedecen a comportamientos adictivos al trabajo, que son compartidos por varias personas en el grupo, pero generan disrupción en los entornos familiares y sociales. Buscar un equilibrio general debe convertirse en la prioridad de un líder, cuyas acciones apoyen el crecimiento de la compañía y el bienestar se sus empleados.