GUILLERMO VARONA COLMENARES
Desde hace varios años los caucanos hemos venido padeciendo los continuos cierres de la Via Panamericana que nos comunica con el Valle, con lo cual en especial los habitantes residentes en Popayán, tenemos que vernos sometidos a la escasez de alimentos, gasolina, medicamentos, etc. Todo lo anterior por la actitud intransigente de algunos líderes indígenas que con la disculpa de que el gobierno no les han cumplido promesas, proceden a desquitarse con el resto de la población sin tener en cuenta que ellos mismos se ven afectados por la paralización de la economía y los inconvenientes en salud y educación que estas posiciones extremas implican. Con los mismos argumentos se han atravesado en la ejecución de la segunda calzada de la Via Panamericana en el tramo Santander de Quilichao- Popayán, desde hace por lo menos seis años, perjudicando no sólo al Cauca sino al resto del país y al mismo tránsito, comercialización y turismo con los países del sur del continente.
En la actualidad con motivo del paro nacional y las repercusiones de la pandemia del Covid 19, la situación del bloqueo de las vías se ha visto agudizada en el Cauca, con la intervención de las mismas organizaciones de indígenas y de otras de campesinos, afros y jóvenes sin trabajo ni acceso a la educación. Por ello, al igual que en años anteriores, se ha tenido que acudir a una solución de emergencia, cual es la de utilizar de manera provisional la vía alterna entre Suárez y Piendamó, sin que esto quiera decir que se encontró el mejor camino, debido al mal estado del tramo Suárez Morales el que debe acondicionarse de afán para permitir por algún tiempo su utilización.
Pero esto tampoco quiere decir que el problema esté resuelto, ya que los vehículos deben recorrer la vía hasta Piendamó, y esto implica que se encuentren con nuevos taponamientos y bloqueos entre este municipio y Popayán, como viene sucediendo el día de hoy. Por ello, como ya se mencionó anteriormente, si este viacrucis se viene dando por lo menos dos veces al año desde hace seis, ¿por qué no se ha acudido por parte de nuestros líderes y agremiaciones a lo que parece ser la solución más indicada de exigir al gobierno de turno la ejecución del trayecto de la vía entre Suárez- Cajibío- Popayán? Desconozco cuál será la distancia entre estos puntos pero estimo que debe andar por los sesenta kilómetros y con base en este estimativo puede obtenerse el valor de la ejecución de este proyecto, de la mayor importancia para el Cauca y el sur del país.
De manera que en estas circunstancias, considero que vale la pena hacer llegar de manera urgente al gobierno esta iniciativa, debidamente complementada y pulida por los organismos adecuados y apoyada por las empresas y agremiaciones locales.