Por Alexander Paloma
Reportero Gráfico El Nuevo Liberal
Ha tenido acogida por parte de la ciudadanía la ciclovía dominical en la Panamericana. Cientos de personas aprovechan el cierre de este corredor vehicular para entrar en actividad física; los más encantados son los niños y lo más recurrente es ver a las familias reunidas y recorriendo todo el circuito que va desde los semáforos de Torres del Río hasta la glorieta de Simón Bolívar.
Los payaneses esperaban volver a tener la posibilidad de hacer deporte en la Panamericana como hace muchos años atrás, ya que es un corredor apreciado por las personas, pues da la opción de poder estar bajo la sombra de un árbol mientras algún familiar o amigo se ejercita, esto hace que la ciclovía sea incluyente, además, contar con presencia de personas que velan por el orden durante todo el recorrido les da seguridad y tranquilidad a los usuarios.
La mayoría de los participantes han atendido las recomendaciones de acudir a este espacio de esparcimiento con las medidas de bioseguridad, lo han hecho pensando en el bienestar de todos en este espacio público, aun así, unos pocos infringen la norma, aspecto que no agrada a los que se han tomado en serio la pandemia.