Ni se compra ni se vende

Predios en el abandono que ni sé remodelan, ni sé pueden demoler y tampoco se pueden comprar o vender dan mala presencia a la ciudad.

Por Alexander Paloma Reportero Gráfico El Nuevo Liberal

En varios sectores de la ciudad se pueden encontrar predios que están en total abandono y que se han constituido en centros de inseguridad o en el mejor de los casos espacios para pasar las noches algunas personas en condición de calle. Cuando son viviendas que han sido abandonadas estas son desmanteladas por algunos reducidores que encuentran en estos lugares la posibilidad de conseguir recursos desmantelando la infraestructura de estos predios.

Lo preocupante de que existan estas propiedades abandonadas además de la inseguridad es que se están utilizando para estafar, personas inescrupulosas utilizan comisionistas para que pongan aviso de venta y se ofrezcan estos predios; las personas que ingenuamente pueden pensar que están negociando con los propietarios, dan parte de los recursos para adelantar papeleos, el comisionista recibiría el dinero, sacaría un porcentaje del adelanto como ganancia y el resto se lo entregaría a los estafadores.

Quienes están haciendo este tipo de estafas no suelen vivir en la ciudad, son organizaciones que cuentan con profesionales en derecho que fácilmente con sus conocimientos hablan de normas jurídicas para adelantar la venta de los predios, de esta manera ingenuamente son engañadas algunas personas e incluso los comisionistas.

Varios de los casos de estos bienes están en proceso ante juzgados por conceptos de sucesión, ya que algunos herederos no llegan a acuerdos para poder dividir las propiedades y ante esta situación hasta tanto un juzgado no resuelva, los predios no se pueden vender y quedan a expensas del paso del tiempo, las inclemencias del el medio ambiente, los vándalos y los estafadores.

En otros casos conocidos en la ciudad, sobretodo en el centro histórico, algunos predios se encuentran en abandono porque han sido sancionados por Planeación Municipal al infringir algunas normas de construcción y protección del patrimonio representado en la arquitectura de la antigua ciudad colonial, hasta tanto no exista un pronunciamiento de los entes de control y se resuelva legalmente, las propiedades deberán soportar el paso del tiempo o como en otros casos verse caer.

A este predio lo empezaron a intervenir para una remodelación y por no contar con los permisos requeridos fueron multados los propietarios, hasta tanto no se tome una decisión por parte de los entes de control, los predios colindantes seguirán corriendo el riesgo de deteriorarse.
La falta de que se ejecuten de manera constante las normativas de protección al centro histórico, está dejando ver cómo se están cayendo las casas que están dentro de la zona de patrimonio de la ciudad y adicional a ello, vender estas propiedades no es nada fácil cuando quien las quiera negociar no puede hacer mayores modificaciones.
Personas en condición de calle aprovechan estos bienes abandonados para resguardarse de alguna u otra manera.
Procesos jurídicos por sucesiones que se demoran años y décadas hacen que los bienes se dañen hasta el punto que se caen y solo quedan los lotes.
Se hace necesario colocar avisos para que se advierta a las personas que los predios no se venden.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.