Aprobado documento CONPES orientado a la ejecución de proyectos que reflejan el compromiso del país con la gestión del cambio climático.
El Consejo Nacional de Política Económica y Social aprobó el CONPES 4088 que declara de importancia estratégica siete proyectos de inversión que buscan aportar en la reducción de las emisiones de Gases Efecto Invernadero (GEI) y la adaptación al cambio climático en el país.
El documento es resultado del trabajo entre los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sostenible; Agricultura y Desarrollo Rural, y Comercio, Industria y Turismo; y el Departamento Nacional de Planeación (DNP). Los siete proyectos se desarrollarán entre 2022 y 2025 con una inversión superior a los $187 mil millones de pesos.
Con la aprobación de este CONPES, el país reafirma su compromiso con el mundo para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y su vulnerabilidad a los efectos del cambio climático. Además, promoverá el desarrollo social, la diversificación económica y la competitividad de los sectores.
Los proyectos establecidos en el documento conducirán al cumplimiento de diez metas de mitigación, contribuyendo a la meta de reducción del 51% de las emisiones de GEI a 2030, aportarán a cumplir once metas de adaptación al cambio climático y cuatro medios de implementación. Además, entre sus proyectos, el CONPES resalta la restauración de más de 10 mil hectáreas de ecosistemas naturales y la puesta en marcha de más de 100 mil hectáreas en plantaciones forestales.
Inversiones para la gestión del cambio climático
Los recursos de los siete proyectos permitirán la implementación de 7.500 estufas ecoeficientes, la restauración de cerca de 10.000 hectáreas con ecosistemas y la ejecución de proyectos de carbono azul en manglares.
Se modernizará la red de estaciones hidrometeorológicas del Ideam y se fortalecerá el Sistema Integrador de Información sobre Vulnerabilidad, Riesgo y Adaptación al Cambio Climático para que el país cuente con datos y evidencia que fortalezca los procesos de planificación territorial y sectorial.
También apoyará a los productores agropecuarios con el acompañamiento en el uso de información para afrontar los riesgos climáticos y la implementación de más de mil hectáreas de sistemas productivos, además de cerca de 107 mil hectáreas de plantaciones forestales que aportarán en la disminución de emisiones de GEI y la generación de empleo.
Estas medidas se complementarán con el apoyo que recibirán las empresas de la industria manufacturera colombiana para que desarrollen procesos productivos y sostenibles, que reduzcan sus aporten de GEI. Esto incluye, la cofinanciación de 187 proyectos para el uso eficiente de recursos y la formación y capacitación de 1.400 personas.
Los proyectos se ejecutarán dentro del marco de cuatro objetivos que buscan:
- Implementar procesos para la conservación y uso sostenible de ecosistemas terrestres y marinos.
- Generar capacidades para la captura y análisis de información hidrológica y meteorológica para la gestión del cambio climático.
- Reducir la vulnerabilidad del sector agropecuario a la variabilidad climática y las emisiones de GEI.
- Acompañar al sector industrial manufacturero para reducir sus emisiones de GEI y la vulnerabilidad de su cadena de valor.
Para Colombia los asuntos ambientales son una prioridad, por lo que viene liderando acciones de política que permitan la mitigación y adaptación al cambio climático. Entre ellas se destacan, el documento CONPES 3700 Estrategia Institucional para la Articulación de Políticas y Acciones en Materia de Cambio Climático en Colombia publicado en 2011. La Política Nacional de Cambio Climático aprobada en 2017, la Ley 1931 de 2018 que establece directrices para la gestión del cambio climático, y evidentemente la inclusión de directrices en el Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022 dentro del Pacto por la Sostenibilidad.
Así mismo, el Gobierno avanzó en la definición de sus metas de cambio climático a través de su Contribución Nacionalmente Determinada (NDC por sus siglas en inglés) y la Ley de Acción Climática 2169 de 2021 que impulsa el desarrollo bajo en carbono y resiliente al clima en el país.