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Redacción El Nuevo Liberal
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Argelia, Balboa, Buenos Aires, Cajibío, Caldono, Caloto, Corinto, El Tambo, Jambaló, Mercaderes, Miranda, Morales, El Patía, Piendamó, Santander de Quilichao, Suárez, Toribío y los tres municipios de la costa Pacífica caucana (Guapi, López de Micay y Timbiquí) son los 20 territorios de este departamento que hacen parte de la lista de 170 municipios que el Gobierno Nacional priorizó para desarrollar los Planes de Desarrollo con Enfoque Territorial.
Así quedó definido en el decreto 893 del 28 de mayo de 2017 que expidió el Gobierno del presidente Santos, y que en cumplimiento de lo pactado en el Acuerdo de paz, específicamente en el punto uno sobre la ‘Reforma Rural Integral: hacia un nuevo campo colombiano’, escogió estas zonas teniendo en cuenta que han sido los municipios con mayores índices de conflicto armado, pobreza, debilidad institucional y cultivos ilícitos.
Sin duda, la priorización de estos 20 territorios en el Cauca se convierten en un desafío para el Gobierno departamental y para cada una de las administraciones locales, quienes deberán junto a las comunidades, porque eso también es fundamental en los Pdet: la participación comunitaria, construir estos Programas de Desarrollo, los cuales deberán responder a las necesidades más sentidas de los caucanos y caucanas que esperan que en 10 años (lo que duran los Pdet) puedan al menos tener iguales o mejores condiciones de los que hay en las urbes.
Según el decreto expedido hace más de dos meses establece que “en el marco del Acuerdo Final, la Reforma Rural Integral (RRI) busca sentar las bases para la transformación estructural del campo, crear condiciones de bienestar para la población rural y de esa manera, contribuir a la construcción de una paz estable y duradera. En ese sentido, la RRI es de aplicación universal y su ejecución prioriza los territorios más afectados por el conflicto, la miseria y el abandono, a través de Planes de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), como instrumentos de reconciliación en el que todos sus actores trabajan en la construcción del bien supremo de la paz, derecho y deber de obligatorio cumplimiento”.
Y aunque en la ruta inicial de los Pdet (ver imagen 2) el lanzamiento de estos Programas se haría el 18 de julio, solo hasta este miércoles 2 de agosto desde el municipio de La Paz en el departamento de Cesar, el presidente acompañado por el Alto Consejero para el Posconflicto Rafael Pardo y la directora de la Agencia de Renovación Territorial Mariana Escobar Arango, oficializaron el lanzamiento de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial a realizarse en 170 municipios de 19 departamentos, los cuales concentran alrededor de 11 mil veredas.
“Esta semana termina la última fase de esa primera etapa la dejación definitiva de las armas. Están saliendo de las zonas veredales los contenedores con las armas para que Naciones Unidas las convierta en tres monumentos como fue acordado, pero lo importante es que ese paso de sacar las armas de las zonas veredales significa realmente que ahí comienza esa segunda etapa, la más importante y en la que todos debemos participar, que es la construcción de la paz y nos hemos concentrado en los municipios que más sufrieron el conflicto por eso le estamos dando la alargada a un proceso que va a llevar tiempo, va a llevar esfuerzos, pero va a cambiar la vida de esos municipios y la vida de Colombia, y son los Planes de Desarrollo con Enfoque Territorial”, señaló el presidente Santos.
Así mismo destacó que lo más importante de estos Planes, es que por primera vez se van a construir desde “abajo hacia arriba”, ya que se ha establecido que “las comunidades deben participar, ser protagonistas, deben tener su voz y sus votos en la prioridades de esos Planes, pero para eso es necesario organizarse, tener vocería organizada y eso es lo que estamos construyendo en esa primera fase: la organización para que las comunidades decidan qué tipo de desarrollo quieren, cómo se imaginan a su municipio o vereda en 10 o en 15 años, cuáles creen ellos que deben ser las prioridades porque los recursos no son ilimitados y hay que escoger; pero cada comunidad va a tener esa oportunidad única de escoger qué es lo que quiere”, puntualizó el mandatario.
Por su parte el Alto Consejero para el Posconflicto Rafael Pardo, aseguró que debe ser prioritario el restablecimiento de la tierra, la producción del campo y el apoyo de la empresa privada para brindar mayores oportunidades en los municipios, razón por la cual, en 700 municipios del país el mayor empleador es el Estado.
“Si no hay una trabajo con la empresa privada es muy difícil salir adelante, la empresa se debe volcar con proyectos de producción, con generación de empleo e infraestructura para aportar al desarrollo del territorio”, afirmó el Alto Consejero para el Posconflicto.
De ahí que sea este mes de agosto donde empiece esa primera etapa para que así aproximadamente entre octubre y marzo del próximo año (podría ser menos tiempo) las comunidades formulen sus Planes y entre los 170 municipios se construya el Pacto municipal de renovación del territorio, para entre marzo y abril de 2018 en las 16 subregiones (donde el Cauca está en dos: en la subregión Alto Patía y en el pacífico medio) se construya el Plan de acción para la transformación regional y así finalmente en mayo de 2018 culminar con la socialización y apropiación del Plan de Acción para la Transformación Regional y hacer la socialización a nivel regional (en cada departamento, municipio y vereda) y ante el nivel nacional ante todos los sectores.
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