Algo que estaría relacionado con la poca planificación del proyecto, dejando de lado las necesidades y problemas reales del sector.
Por: Leidy Capote López
El pasado 27 de abril Delegados de todos los sectores de la plaza de mercado del barrio Bolívar de Popayán, de manera unánime, le dijeron NO al proyecto que implicaba la construcción de una nueva galería. Pese a esto surgieron un sin número de reacciones tanto de la administración municipal como de la ciudadanía en general, unos en contra y otros a favor de la decisión final.
Sin embargo, lo anterior estaría relacionado con una planificación débil del proyecto, que no respondía a las necesidades y problemas reales del sector y de todos los trabajadores que hoy laboran en la plaza de mercado. Según los delegados de la organización, se trataba de un proyecto que no tuvo en cuenta la completa participación de los comerciantes, un proceso de diseño que fue realizado sin escuchar a la comunidad del lugar oportunamente, y en el que, en su ejecución y funcionamiento dejaba por fuera a más de la mitad de vendedores que tienen su sustento diario en este mercado.
Cabe recordar, que esta plaza de mercado nace junto con la ciudad de Popayán, cuando se empieza la primera dinámica entre indios y criollos comenzando así, el ejercicio de venta y compra. Principalmente inició en el Parque de Caldas, posteriormente pasa a las instalaciones del que después se convirtió en el Centro Comercial Anarkos, estuvo un tiempo ahí y finalmente la plaza de mercado fue trasladada al barrio Bolívar.
Carlos Granada, es uno de los delegados de la plaza de mercado del barrio Bolívar, también dijo NO al millonario proyecto que buscaba mejorar la arquitectura de uno de los lugares más emblemáticos y representativos de la Ciudad Blanca de Colombia. “quienes somos delegados, somos personas que hemos recibido una autoridad y responsabilidad, un derecho a votar, elegir y ser elegido dentro de este proceso. En este caso, nuestro sector de carniceros, me dijeron: nuestra posición es no, no hay proyecto, porque no nos sirve, porque el proyecto nos atropella, porque no pensaron en nosotros y en ningún momento fue concertado con la gente, fue un proyecto que se hizo a espaldas de la ciudadanía”. Asimismo, esta posición la compartieron los demás delegados de cada sector que conforman la Galería.
“Nosotros vimos un proyecto muy bonito visualmente, pero cuando comenzamos a detallarlo bien, vimos las falencias, tuvimos 30 reuniones con la Alcaldía en las cuales se habló el mismo tema, pero de qué nos sirve reunirnos y sentarnos a hablar si hay inamovibles, entre los que está el hecho de no sobrepasar el área que ya se estipuló para construir, entre otros”.
En ese sentido, la pregunta de los comerciantes, en cada reunión que se llevó a cabo, era ¿dónde iban a quedar más de 1.000 personas, si el proyecto era únicamente para 452? Cabe recordar que el 60% de las personas que trabajan en la plaza de mercado son mujeres cabeza de familia y el 40% son personas que tienen más de 40 años de edad, además hay trabajadores venezolanos, desplazados, personas de muchos otros lugares quienes confluyen en esta plaza de mercado por el rebusque, por lo cual era preocupante para ellos, por su economía, sus familias, la dinámica de comercio, el hecho de quedar ubicados en un parque, durante 12 meses, tiempo en el cual, según el Alcalde, se iba a realizar la construcción.
“A nosotros como delegados y como miembros de la plaza de mercado se nos cae de peso que, en algún momento, si en mi familia son diez me van a construir una casa para cuatro y el resto que se vayan, es algo que no tiene presentación. La plaza de mercado no es solamente esta estructura o esta manzana, sino que, es todo lo que se relaciona en el comercio de lo que llega del campo. Todas las casetas que están aquí pagan cumplidamente al municipio, las personas que no tienen locales pagan con boleta, toda persona que pare a vender, así sea un cilantro, automáticamente llegan los cobradores del municipio. En alguna ocasión quisimos que los comerciantes no pagaran eso porque estaban en espacio público, entonces mandamos un documento, pero el Juez nos dijo que no podía aceptar esa petición porque las personas que están ahí hacen parte de la plaza de mercado, o sea, que debían pagar”, indicó el delegado Carlos Granada.
“Este era un proyecto bonito, pensado en la estética, no pensado en la comunidad, claramente el Alcalde muestra mediante un video cómo quedaría la plaza visualmente, hasta nosotros nos deslumbramos cuando lo vimos, pero como todo tiene un trasfondo, no todo está dentro de la apariencia sino, también tiene la parte interna que era; 452 comerciantes beneficiados y somos más de 1.000 comerciantes en este momento, ¿dónde van a quedar 800 comerciantes? Si ahora hablan de que van a construir un malecón, ¿para dónde se va a ir esa gente? ¿qué va a suceder con ellos?”.
“Nos muestran en las maquetas del proyecto, por ejemplo, las carnicerías con carne colgada, mientras el Ministerio de Salud no deja que nosotros tengamos nada colgado al aire, todo tiene que ser en vitrina y si nos dejan 2 m x 2 y medio, dónde ponemos las vitrinas, dónde despostamos, dónde organizamos. Entonces son cosas muy puntuales que no dejan que la plaza de mercado siga su dinámica ejecutando ese proyecto”.
Después de meses de conversatorios, pues no se establecieron mesas técnicas, y faltando 15 días para que los delegados votarán, ejerciendo así la voz y decisión de toda la plaza de mercado, el mandatario municipal, les informó que el mercado campesino lo harían en la Escuela Gerardo Garrido y además, que le invertirían 4.000 o 5.000 mil millones con el fin de hacer una plaza de mercado para los campesinos. “personalmente no creo en eso, es casi imposible que el señor Alcalde tenga la capacidad de hacerlo, viendo que no fueron capaces de hacer un proyecto bien hecho, teniendo el dinero, ahora van a venir en un acelere a decir que el mercado campesino lo van a hacer en la Escuela, que queda ubicada diagonal al planchón”, dijo Granada.
De otro lado, Mesa Larga es una de las tradiciones culturales de Popayán y precisamente se creó y nació en la plaza de mercado del barrio Bolívar, sin embargo, en el proyecto se tenía planteado una reestructuración física en este ámbito, “pensaban hacer unos cubículos estilo campanario, de manera que se pierde la esencia cultural, algo que no debemos dejar perder, una tradición cultural de tantos años y la cual fortaleció el reconocimiento que la UNESCO le dio a Popayán en la parte gastronómica, pues no fue solamente por el festival que hicieron ellos allá (de los ricos para los ricos), sino que fue también gracias a la fuerza de nosotros como pueblo, pues aquí vienen negros, indios, mestizos, etc. De todas las clases, entonces la invitación es a no dejar perder nuestra identidad porque Popayán es turística por eso, por la identidad que tenemos”, puntualizó el delegado de la plaza de mercado.
Asimismo, agregó: “cuando se formula un proyecto, cualquiera que sea, se debe tener plan b y plan c y en ese proyecto nunca hubo ese plan. Nosotros le planteamos a la administración municipal que, si no se puede invertir esa plata en la plaza de mercado, trabajemos organicemos y pensemos en el parque Carlos Albán que se convirtió en zona de drogadicción, alcoholismo, etc. Entonces la opción que nosotros damos es que se construya en el parque Carlos Albán, que es un área doble a la que tenemos acá en la plaza, es decir, habrá espacio para más comerciantes, no es lo mismo dejar 800 familias por fuera a dejar 200, se mitiga un poco y cuando esté terminado nosotros nos pasamos”.
“Pienso que el nuevo proyecto debería ser un progreso para la ciudad, pero retrasarnos 200 años enviándonos a los parques, que tumben esta plaza y esperar a que construyan, sin saber cuándo nos van a entregar la plaza de mercado, eso es algo incierto, que a uno le dicen 12 meses, pero sabemos cómo es aquí en Popayán, cuantos elefantes blancos no han hecho en la ciudad y salen a mostrar ‘yo hice esto’, pero realmente no le sirvió a la gente”.
“La ciudadanía piensa que haciendo una plaza de mercado nueva y bonita se van a acabar los problemas, la inseguridad y venta de droga, pero por qué no han quitado todo eso si tenemos una estación de Policía con 300 uniformados ahí al frente, pasan y la gente fuman frente a ellos y venden la droga frente a ellos. ¿Será que tenemos que tener una plaza bonita para que la Secretaría de Salud y demás entes municipales ejerzan su labor en esta zona?”.
“El trabajo de nuestros ancestros no lo vamos a perder, porque una persona en medio de su afán de dejar un sello, así sea mal hecho, por encima de 800 o mil familias que van a quedar por fuera, nosotros como ciudadanos no podemos aceptar eso, es que no es solamente pedir y hacer algo, si lo vamos a hacer hagámoslo bien hecho que realmente sirva para la dinámica del comercio de la gente. Nos dolió mucho rechazar esa inversión, pero era mejor decir no en este momento, a que 800 o 1.000 familias se quedaran sin sustento”, enfatizó Carlos Granada.
Resulta importante indicar que, el 80% de los delegados eran beneficiarios del proyecto, es decir, por ser propietarios actualmente de su respectivo local y con sus documentos en regla, ya tenían su espació dentro de la nueva estructura. “Íbamos a quedar ahí, pero como el liderazgo no se basa en tomar lo mejor para uno, sino en sacar lo mejor para todos, entonces pensamos en quienes tienen su puesto por fuera, no pensamos sólo en nosotros”, dijo Granada.
Finalmente, quienes conforman esta importante galería afirman que van a organizar el espacio, por sus propios medios, con respecto a la seguridad, el tema de las basuras e incluso indicaron que, de ser posible pagarán vigilancia privada. “Trabajaremos por cambiar la cara de la plaza de mercado, apoyarnos del Sena para que nos vengan a dictar charlas de atención al usuario, con el fin de que los clientes cada día se sientan mejor atendidos, cómo surtir los negocios de verdura para que se vean más bonitos, etc. Además, buscaremos cómo darles atención a los niños que vienen desde las tres de la mañana acompañando a sus padres a trabajar, porque no tienen dónde ni con quién dejarlos. Vamos a seguir trabajando, porque no podemos decir no a un proyecto y quedarnos con los brazos cruzados, vamos a trabajar duro para demostrarle a la ciudad que no es solamente que le ofrezcan a uno dinero en un proyecto, hay algo más allá y es la gente”.