WALTER ALDANA Q.
Con el más alto grado de cinismo y oportunismo, sin pensar en Carlos Holmes Trujillo, Julio Roberto Gómez, amigos del gobierno y en los miles de fallecidos por culpa del covid y la lentitud para enfrentarlo, el gobierno Uribe-Duqista, hizo el show de las vacunas.
Al mejor estilo de los carteles promocionales del circo de los hermanos Gasca, se vio al presidente y su sequito posando con las inyecciones llegadas al aeropuerto.
Y mientras Chile reporta vacunados a más de dos millones de sus ciudadanos, acá presentaban el espectáculo; el mandatario mirando la aplicación de las primeras vacunas, con Cara de ponqué, así como a gobernadores de algunos departamentos alzando las cajas para la foto.
Como seria de ridículo el sainete que hasta la gobiernista Salud Hernández critico el show mediático de Duque.
En Chile aplicadas más de dos millones de dosis, con una población de diecinueve millones, un poco más de cuatro millones en Brasil, Argentina trescientas noventa y un mil, en Colombia cincuenta y cinco mil vacunas para una población de cincuenta millones de habitantes, parafraseando a nuestro nobel, esta es la “soledad de nuestro país”.
Y fue el pasado 15 de Febrero que llegaron las 50 mil vacunas del laboratorio Pfizer desde Bélgica, de un lote de un millón seiscientas cincuenta mil que deben llegar en las próximas tres semanas según anunció el presidente Duque.
Los países “ricos” en dinero, aportaran a través del fondo COVAX veinte millones de dosis a Colombia, y hemos comprado (según el gobierno) cuarenta y un millón quinientos mil, para un total de 61’500.000, recordando que son dos dosis a aplicar a cada ciudadano, alcanza para vacunar a treinta y cinco millones doscientos cincuenta mil habitantes, es decir el 70% de la población.
La comunidad internacional nos ve con estupor: A los más de mil líderes y lideresas sociales asesinados desde la firma del acuerdo con las Farc, se suma un ministro de defensa que propone un protestodromo en una ingenuidad ( o perversidad) sin límite, tres policías con casa por cárcel por dejar morir a ocho ciudadanos dentro de un CAI en Soacha, un fiscal de bolsillo hecho a la medida para absolver al ex presidente Uribe, una consejera de DH con investigaciones por parapolítica, investigaciones por supuestos sobrecostos en el millón seiscientos mil mercados para los más pobres durante la pandemia, desde una dependencia adscrita a la presidencia de la república, en fin, etc. etc.
Y como todos participan en la “comedia”, no podía faltar el papel deplorable de los grandes medios de comunicación; “que la enfermera jefe del hospital universitario en Sincelejo puso la manito en el pecho como la imagen del centro democrático (coincidencia? o estaría en el libreto?), con un mandatario mirándola y a punto de llorar de la emoción, con vicepresidente emocionada a más no poder, como dijo el hijo del presidente Santos; “solo falto la Papayera”.
Yo confieso; tengo algunos conocidos del centro democrático en la esfera nacional y la departamental, creo que entre ellos les da pena decirse las cosas; por ejemplo lo despreciable que es el bachiller Macías, pero hoy después de este novelón de la vacunación debo decirles que siento… VERGÜENZA AJENA.