ÁLVARO JESÚS URBANO ROJAS
El Cauca ya no aguantan más, Popayán su capital, tuvo una variación de 4.5% en el índice de precios al consumidor para el mes de mayo, siendo la ciudad más cara del país. El cierre de negocios y el desempleo motivado por las restricciones impuestas a la movilidad, por el Covid-19, y ahora las consecuencias del paro nacional, ponen en duda el ritmo de mejoría de nuestro maltratado y maltrecho departamento. La Cámara de Comercio, estima que en el Cauca se están perdiendo unos 20 mil millones de pesos diarios por cuenta del paro nacional y se suman las afectaciones compartidas con el departamento del Valle del Cauca, las pérdidas en estos 45 días superan los 6 billones de pesos.
La ciudadanía respeta y comparte la protesta pacífica, pero rechaza con contundencia los actos vandálicos que atenten contra la infraestructura urbana y golpea las actividades comerciales y empresariales; por lo que es urgente construir consensos y de parte del gobierno nacional, políticas públicas de reactivación social y económica y ante todo, afrontar la lucha contra la corrupción, el desgreños administrativo y financiero del Estado, con mayor austeridad en el gasto público.
El desabastecimiento de las cadenas productivas, deterioraron la industria, la construcción y el comercio, perjudicados a los consumidores de ingresos más bajos, pues se estima una caída del 65% de los ingresos de los sectores más pobres de la sociedad, por el alto índice de desempleo, el cierre de negocios y empresas por las incalculables pérdidas, impactando en las alzas en bienes y servicios de la precaria canasta familiar.
El sector ganadero, asumió pérdidas por $121.335 millones. Solo en Putumayo, Cauca y Nariño, los bloqueos de vías impidieron la recolección de 820.000 litros de leche al día, ni se pudieron mover 6.400 novillos semanales. En el Valle y Cauca se dejaron de vender 420.000 litros de leche al día y 3.500 cabezas de ganado en la semana. En la región hay 42.000 camiones parados y se calcula que las pérdidas superan los $84.000 millones. Entre esta carga hay 26.000 toneladas de carne de cerdo, pollo y pescado. Por cada semana de paro se perdieron $32.000 millones en la industria piscícola, siendo los productores de trucha los más afectados. El comercio estima sus pérdidas, por el paro y el vandalismo, en más de $420.000 millones en la región.
Los promotores del paro lograron movilizar a más de 20.000 personas, cuyos costos de desplazamiento asciende a más 640 millones de pesos, pues para su transporte se necesitan más de 400 chivas, cuyo precio oscila entre 400 mil y 600 mil pesos diarios y la alimentación a razón de veinte mil pesos diarios por persona, supera los 40 millones de pesos, por los treinta días se necesitarán más 1.200 millones de pesos, sólo en alimentación. En logística, publicidad y comunicaciones se necesitaría más de 240 millones de pesos, utilizados en: gasolina, telefonía celular, reuniones previas, sonido, refrigerios etc. ¿Quiénes y cómo se financia el paro? Hay dudas sobre la fuente de esos recursos, algunas fuentes provienen del esfuerzo propio de los sectores sociales involucrados en el paro, una buena parte de fuerzas oscuras del narcotráfico y la narcoguerrilla y algunos de recursos desviados del Sistema General de Participaciones provisionado con los impuestos que pagamos todos los colombianos. Ojalá este gran esfuerzo valga la pena y el pueblo en las próximas elecciones sea consciente de la necesidad de reformar el desprestigiado Congreso de la República.