Objetivo popayan dos

JUAN SANTACRUZ

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Uno de mis seis seguidores (mi mama y mis hermanos) me sugirió que es importante conservar el RITMO en la escritura. Atesoro la insinuación, aprendo y aplico. En rigor quisiera en lo posible escribir como los autores raizales quienes tienen el don de imprimirle a sus textos jocosidad, “repentismo” y desparpajo así sea el tema más serio en el mundo. No tengo la suficiente experiencia, pero con los días me concentrare en implementarlo.

Elucubramos anteriormente: Uno. El AMOR por la villa-capital es lo único que puede salvarla. Dos. Las MEMORIAS nos permiten direccionar el futuro, máxime en una ciudad que se fundamenta en tradición, olores, historia, sabores y valores.




Continuamos con el punto cinco de mi TEST para precandidatos; LA CALLE DE LA PAMBA originalmente uno de los cuatro “cuarteles” en que se dividía la comarca. Su extensión abarcaba la calle tercera entre carreras tercera y séptima. Su nombre proviene del quechua PLANADA. Tal vez el primer barrio fundado en Popayán, perteneció al GRAN CAUCA en consecuencia fue uno de los lugares más importantes de la nación. En el pernoctaron, comieron, vivieron, hicieron pipi y popo (mis excusas, pero no eran cuerpos gloriosos) virreyes, arzobispos, sabios, próceres, presidentes, poetas, etc. En el enclave original existieron grandes mansiones de los ricos de la época. Colindando con él se encuentra EL CALDAS. Se dice que fue la primera URBANIZACION creada en la comarca, más o menos en 1954. Históricamente el lote en que se levanto fue de propiedad de la familia del sabio, se le llamaba LA CASA CUADRADA. Si devolvemos un poquito el tiempo en el conjunto de las comunidades hermanas La Pamba, Urbanización Caldas, El Liceo, Loma de Cartagena, Santa Inés desarrollaron proceso de vida personales alcaldes, gobernadores, ministros, congresistas, concejales, magistrados, que el día que les dé por crear una ruta del político y si su ceguera les permite; se darán cuenta que vivían al frente de su más acérrimo contradictor. En la geografía actual la zona presenta otras secciones aledañas; Vásquez Cobo, El Refugio, Santa Catalina, El Arenal, El Bolívar, La Universidad del Cauca. Revisten significativa importancia los monumentos ignorados por la municipalidad y atormentados por los depredadores de dos patas; El Morro de Tulcán, El Puente del Humilladero, El Chorrito de la Pamba. Igualmente nos rodea el cerro tutelar y pulmón vital de la villa-capital LAS TRES CRUCES. Triste y frecuentemente regentado por la MARIHUANA.

CONCLUSION. Después de tanto poder y tan magnos inquilinos, no entendemos la INEXCUSABLE ORFANDAD al que nos someten los entes gubernamentales. Claro está que la falta de sufragios y la estoica paciencia que nos caracteriza, genera en parte el flagelo. Calles internas desbaratadas, inseguridad desbordada, drogas y alcohol en su punto máximo de ebullición escenificados en espacios públicos como parques y andenes que no tienen que ver con la procedencia de los infractores, BARES hasta en los árboles, destrucción de identidad arquitectónica. etc. La autoridad policial estigmatizada y atacada. Faltos de recursos tanto humanos como económicos. Ahondando la crisis las decisiones emanadas por las altas cortes. Redundando la preocupación de los ciudadanos sigue en modo INCRECENDO. Los derechos de las gentes del sector son reiterativamente vulnerados.

Es imperativo que los POSTULANTES asuman posiciones concretas y soluciones cercanas a la realidad.

Como dice Don Guido Enriques Ruiz de quien tome algunos datos para elaborar el presente “ES NECESARIO CUIDAR SOBRE MANERA ESTOS LUGARES, PARA QUE NO NOS MATE LA INCULTURA”.