Lo que cambió con la Independencia

Acontecimientos que fueron definitivos para destruir el orden monárquico e inaugurar un régimen republicano representativo.

David Fernando Prado Valencia

Historiador

Academia de Historia del Cauca

A partir de los eventos de 1819 prosiguió una serie de trasformaciones que borraron el régimen político preexistente y dieron apertura a la democracia colombiana. 7 Suministrada – El Nuevo Liberal.

Este año se cumplen doscientos años de una serie de acontecimientos fundacionales: la inauguración del Congreso de Angostura (15 de febrero, 1819), el combate de Gamarra (27 de marzo), la victoria de las tropas republicanas en los Llanos, exactamente en el sitio Las Queseras del Medio (2 de abril), luego en Boyacá (7 de agosto) y finalmente la publicación de la Ley Fundamental que consagró la Unión de la Capitanía de Venezuela, el Virreinato de la Nueva Granada y la Presidencia de Quito bajo el nombre de Republica de Colombia (17 de diciembre).

Estos acontecimientos fueron definitivos para destruir el orden monárquico e inaugurar un régimen republicano representativo. Sin embargo, prolifera la versión de que la independencia sólo significó una sutil sustitución de gobernantes españoles por una generación de criollos.

Dicha afirmación trivializa la historia ya que a partir de los eventos de 1819 prosiguió una serie de trasformaciones que borraron el régimen político preexistente y dieron apertura a la democracia colombiana.

De esta forma, en este reportaje, se exponen cinco procesos históricos que tomaron forma definitiva a partir de 1819 y redefinieron los rasgos de la sociedad.

  1. El creciente interés por la instrucción pública fue un cambio significativo.

Entre las gentes de los pueblos y ciudades se denominó como instrucción pública el fomento de centros educativos, un asunto que convocó la participación colectiva. Consolidado el gobierno republicano en los territorios, creció el propósito por abrir escuelas en las parroquias donde no las había antes y se hicieron otras en las ciudades que tenían algunas desde la época colonial; también se erigieron universidades en ciudades en las que antes no había y de manera decidida se involucró a los vecinos de las localidades a trabajar colectivamente para alcanzar el propósito de tener un centro de instrucción costeado por el Estado. Por ejemplo, la gente en las parroquias recogió entre los vecinos contribuciones para levantar la escuela y dotarla de los materiales necesarios. Así mismo, la gente participó en el proceso de selección del maestro adecuado y se encargó de ajustar el pago por su trabajo. En las ciudades se crearon asociaciones con el objetivo de fomentar la instrucción pública e incentivar el estudio de las localidades y provincias, así como el cultivo de la ciencia experimental. Por lo tanto, la apertura de centros de enseñanza irrumpió tras la independencia y marcó un nuevo tiempo para la sociedad.

  1. La división de poderes tomó fuerza a partir del establecimiento de la Republica de Colombia.

Durante el primer período de la Independencia (1808-1815) la división de poderes fue un asunto que los revolucionarios trataron de consolidar. El restablecimiento de la Monarquía (1816-1819) frenó este proceso, que no tuvo limitaciones después de la expulsión de las autoridades españolas y sus tropas. El hecho es bastante significativo evidenciando que el régimen republicano fue muy distinto al monárquico, ya que en éste último una sola autoridad o cuerpo colegiado podía asumir funciones administrativas y de justicia, una situación que cambió definitivamente con la independencia y la instauración de la República de Colombia. Por ejemplo, antes en las ciudades el Alcalde 1º presidía el cuerpo de gobierno de la ciudad, que era el Cabildo, y así mismo asumía la primera instancia en los asuntos judiciales de carácter criminal. Tras la independencia, el juez aparecerá como una figura independiente.

  1. La independencia produjo nuevas condiciones para acceder al poder, un proceso que inició desde 1810, en el que tener un cargo de gobierno quedó supeditado a la deliberación pública y al voto.

Si bien, muchos vecinos de familias acaudaladas accedieron a importantes cargos en el nuevo régimen político, las condiciones para llegar a ellos fueron radicalmente nuevas pues debieron exponerse al escrutinio público y a ganar la mayor parte de los votos posibles. El voto como mecanismo para llegar a un puesto de gobierno fue algo totalmente novedoso, pues antes para ser regidor del Cabildo de una ciudad se llegaba a este puesto de gobierno por herencia o comprando el titulo si había una vacante. Ahora, esta nueva modalidad para acceder al gobierno también abrió paso a la incorporación de actores sociales que no hacían parte de las capas prominentes de la sociedad, incluyendo en el gobierno a sujetos que antes no estaban dentro de dicho ámbito, lo cual hizo que la votación y la deliberación borraran rasgos importantes de lo que había sido el régimen monárquico.

  1. La proliferación de periódicos contribuyó al cambio de percepción sobre el poder y el gobierno.

En sus páginas se examinó, criticó, juzgó o defendió una idea o la actuación de un funcionario. Antes de la independencia las determinaciones de gobierno quedaban supeditadas a la percepción de quienes estaban involucrados en las instituciones, una situación que cambió con la instauración de la república de Colombia. La esfera pública debilitó el ámbito privado de las determinaciones de gobierno, conduciendo la información o la opinión a otros sectores que antes no tenían acceso a ella y mucho menos podían exponer públicamente sus críticas a los gobernantes y sus acciones. La prensa fue una importante innovación: por ejemplo, durante el régimen colonial, una ciudad como Popayán no tenía imprenta, ésta solo se instaló en 1814, publicando el primer periódico del suroccidente: La Aurora cuya publicación fue clausurada con la restauración monárquica. Hacia 1821, bajo el nuevo régimen, volvió la prensa, esta vez con el título del El fósforo con notables editoriales que examinaban las nuevas leyes de la Republica y fijaban su opinión sobre varios asuntos políticos del momento.

  1. Finalmente, desde el inicio de la revolución en 1810 cambió para siempre la participación de los sectores populares en la deliberación política.

Lejos de los argumentos que señalan que nada cambió para los sectores populares están los hechos que hablan de su abierta participación en las controversias políticas durante la independencia y después de ella; algunos apoyaron al rey, otros defendieron la causa republicana y luego de la independencia se involucraron en las tensiones políticas que la republica generó. Lo cierto es que los sectores populares no fueron una masa amorfa que las elites amoldaron a su conveniencia, sino que, por el contrario, establecieron demandas a las nuevas autoridades, se involucraron activamente en la disputa por el poder negociando o enfrentándose con otros sectores en el contexto de la sociedad republicana.

Estos procesos, significativos de muchos otros que han sido estudiados por los historiadores, nos permiten acercarnos al rico periodo fundacional de la República de Colombia, un evento trascendental que fijó los derroteros por los cuales ha transitado por doscientos años la historia de nuestra Nación.

La conmemoración debe ser una oportunidad para conocer nuestra historia muchas veces pauperizada por el desinterés o las explicaciones maniqueas que terminan liquidando los hechos en favor de una postura ideológica que trivializa el pasado.