La problemática del Cauca da para puntuales reflexiones

NELSON EDUARDO PAZ ANAYA

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No son buenos estos tiempos para las expectativas del Cauca, en temas que van más allá de las consideraciones sobre la protesta Estudiantil, Docente, Campesina y la Minga indígena y social del Cauca, que terminaron con nuevos acuerdos, lamentando no se hubiera dado el encuentro esperado entre el Señor Presidente y la Minga.

Como en los tiempos de los viejos imperios, el señor Trump, Presidente de los Estados Unidos, es por decir lo menos; grosero e irresponsable con el Señor Presidente de Colombia, de quien se refiere en términos que rompen las más elementales normas de protocolo y de respeto, en un mundo que se supone civilizado.

Esta aceptado que el señor Trump, no es precisamente brillante, pero su ignorancia no lo autoriza para insultar al Doctor Duque Márquez, y menos con temas relacionados con los cultivos de uso ilícito, por cuanto, no hay en el hemisferio, estado con más compromiso y mayores sacrificios que el nuestro, y peor aún, para que agregue: “que los colombianos que van a su país, son delincuentes”.

Colombia, ha adelantado amplia gestión diplomática, para aislar a Venezuela, con el fin de estar del lado de los Estados Unidos; pese a los muchos problemas y dificultades que conlleva entrar en conflicto con un vecino y hermano histórico, con el que se comparten 2.219 Kms, y que ha sido el mayor socio comercial de la región, razón por la cual, extraña como se desconoce la actuación.

Mencionar la intervención de los Estados Unidos, en la pérdida del Canal de Panamá, hace parte de un necesario ejercicio pedagógico, tema que no admite discusión, después del pago de 25 millones de dólares como reconocimiento o indemnización, pero bueno, se dirá que es parte del nuevo colonialismo y que dentro de este esquema nada extraña.

Objetivamente el obstáculo para el crecimiento y bienestar del Cauca de hoy, está en las políticas establecidas por los norteamericanos, para los países en desarrollo.

El Pacto de Cuotas Cafeteras, que mantuvo estables los precios de compra del Café durante años, se terminó por condicionamiento de los Estados Unidos en el año de 1.989 y que hoy, por la manipulación de las utilidades financieras, acabará con la única posibilidad de 92.000 familias cafeteras del Cauca, que incrementaran su pobreza, según la preocupación del Gerente de la Federacion Nacional de Cafeteros.

Al café Colombiano, se impone el precio en la Bolsa de Nueva York, en donde operan los mercados a futuro, mecanismo que permite inmensas ganancias a los comercializadores a costa de los productores que no pueden participar ni siquiera de un diez por ciento de las utilidades del grano.

La producción y el aumento por árboles o por espacios sembrados, asi como las especies y calidades, dejo de ser asunto de los países productores y compradores, para ser maniobrados por los grandes comercializadores del mundo, estando cada vez más distantes los caficultores campesinos.

Aquí entran en juego los fertilizantes y las especies a cultivar, porque dependen de las compañías gringas que producen y comercializan los abonos y los demás productos vinculados al cultivo.

Pero, el problema no solo está en el café, que decir de los cultivos de caña panelera, de azúcar y etanol, con posibilidades de desaparecer porque los Tratados de Libre Comercio, no permiten la sostenibilidad de estos renglones de la economía y no se está hablando de indios o de campesinos, sino de empresas agroindustriales, como son los ingenios del Norte del Cauca.

La realidad muestra un departamento fraccionado de su ciudad capital, no es fácil integrar su economía, el reciente paro demostró la debilidad de su estructura productiva y su relación con la fragilidad del auto sostenimiento urbano y los bajos rendimientos de su encadenamiento con sectores como el de productores de leche que se vende por debajo del 50% de su costo de producción en tiempos normales, no hay transformación de la leche, una grave debilidad.

Si a estas situaciones, se suma la presión para acabar con los cultivos de coca con aspersión de glifosato, se aumentaran las condiciones de violencia en muchas zonas rurales y urbanas del territorio y se corre el riesgo de una desaceleración de la economía en Popayan, que agravará la precaria situación de hoy.

Sera que es viable una pregunta: Ante estas y muchas otras situaciones, será posible pensar siquiera que todos los sectores puedan llegar a un punto de reflexión en el cual se defina un gobernador para el cauca y no un gobernador para un grupo político, realidad que ha hecho tanto daño? Todos los actores tienen la palabra.

Los tres encuentros anteriores con el alto gobierno nacional, demostraron nuestra baja capacidad propositiva, se espera la reunión de Timbio, pueda mostrar un Cauca diferente.