La poesia tiene la palabra

JOSÉ ANTONIO CONTRERAS 

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Made in Colombia: Jericó llora el futuro con lágrimas decantadas de tristeza minera. Todos estamos manchados de suspenso jurídico que se pasea por las urbes de Bucaramanga, soñando enredarse con miles de taxistas residuales de pico y placa que se exaltan oyendo los goles del América y del Deportivo Cali. Todos nos rebelamos pues el paro cívico de Buenaventura ha sido levantado inmisericorde a través de canales de agua en territorios desconocidos por la nobleza. No existen acuerdos para señalar a los corruptos y constructores de Cartagena. En el otro lado de la realidad los estudiantes, reserva cultural, ideológica y política de nuestra nación, protestan contra los desmanes insólitos, con cara sucia, del Consejo Superior, bloqueando carreteras que no entienden de Reformas Administrativas, que no tienen otra intención que pisotear violentamente el futuro adolescente que por negligencia se convierte en rebeldía.

MEDELLÍN: Jericó decide si prohíbe la minería en sus territorios.

Suspenso en Bucaramanga por lío jurídico que enreda pico y placa.

CALI: Taxista y sus pasajeros cayeron en canal de aguas residuales de Cali.

Ibagué y Cúcuta, opciones para clásico del América y Deportivo Cali.

Estos son los acuerdos que permitieron levantar paro en Buenaventura.

Funcionarios de Cartagena, señalados de corrupción en construcciones.

Protesta estudiantil tiene bloqueada a la Universidad del Tolima.

Y así Colombia se despierta del desfasado siglo violento que, con el apodo de Acuerdos, nos apura a la globalización. Las noticias tienen vida y claro, cómo no, también poesía.