El Pacífico le hace un llamado a la paz
Por: Olga Portilla Dorado
@olguitapd
“Yo tengo ya mis años ¡y aún estoy aprendiendo a caminar! Porque una cosa es ser orientadora y otra cosa es ser líderesa. Todavía hay mucho por aprender y dar”, dice Emelda Jiménez, Mayora del Pueblo Yanacona del Resguardo de Pancitará ubicado en el municipio de La Vega (Cauca); como Emelda, otras decenas de personas participaron del evento denominado ‘De la palabra a la acción en la región pacífica’.
Dicho evento se llevó a cabo en Buenaventura, hasta donde llegaron hombres y mujeres, docentes, artistas, comunicadores, gestores culturales y de paz de diferentes municipios de los departamentos de Cauca, Chocó, Nariño y Valle, quienes invitados por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz (Oacp), hicieron parte de esta iniciativa nacional que pretende organizar acciones de movilización en sus territorios para el cambio social, que apoye la transición de la guerra a la paz, del silencio de los fusiles a la confianza en el otro, y al respeto de la vida.
Desde el 15 hasta el 17 de septiembre se reunieron y realizaron varias actividades, convirtiendo al Pacífico en el primero de seis grandes proyectos regionales que se esperan estructurar, consolidar y ejecutar para posteriormente converger en un gran evento nacional a favor de la transición de la guerra a la paz, a partir de herramientas artísticas, comunicativas y pedagógicas propias del territorio.
Los invitados por cada Departamento son líderes sociales que han aportado en sus municipios y veredas a la resistencia pacífica en temas de jóvenes, víctimas, mujeres tejedoras, mujeres cantoras y pedagogas del juego y goce de la vida.
Como antesala al encuentro realizado en Buenaventura, estos hombres y mujeres asistieron al evento de arranque de esta iniciativa, en Bogotá, realizado por la Oacp en julio pasado: ‘Un, dos, tres… ¡Contemos una nueva historia!’, en el que comenzó la búsqueda del mensaje o narrativa que se instale en el imaginario de los colombianos y les permita concebir y creer en la idea de una Colombia merecedora de su paz; para empezar a construirla y vivirla en esta etapa de implementación del Acuerdo final de paz y de transición de la guerra a la convivencia pacífica.
“Todos y todas podemos crear una acción colectiva que irrumpa, que le diga a la guerra ¡nunca más! y que sea una bienvenida a la esperanza en la tierra del currulao, de los colores, de indígenas, afro y campesinos en armoniosa convivencia”, señaló Diego Cancino, asesor de la OACP y coordinador del Nodo Pacífico.
Entre las conclusiones de la jornada realizada en el puerto de Buenaventura, los asistentes acordaron hacer un trueque cultural de la región Pacífica, que tendrá lugar en Tumaco, otro municipio emblemático de la belleza y la lucha del país.
Se espera que sea a mediados de octubre, donde líderes de Cauca, Chocó, Valle y Nariño se desplazarán hasta la Playa del Morro, en una caravana cultural y creativa que movilice e informe por donde vaya pasando, el mensaje de paz y de que sí se puede vivir con gozo, conociendo los derechos y deberes y los acuerdos de paz que ha logrado el país y que marcan el comienzo de la reconstrucción de la confianza.
En la Playa del Morro habrá murales preparados por colectivos sociales artísticos, y presentaciones musicales y teatrales, como una ‘Feria de Pedagogía de los Acuerdos de Paz’, audaz, creativa, con intercambio cultural de los cuatro departamentos que conforman la enorme riqueza del Pacífico de Colombia.
“Se necesita hacer una jornada nacional de vacunación contra la desconfianza. No es fácil que la gente crea; en los procesos, en el Estado, en la guerrilla, en el otro… Pero si no nos vacunamos, no va a cambiar nuestra historia”, señaló José Rutilio Rivas, de Istmina, Chocó, activista del Programa Regional de Desarrollo y Paz Ciederpaz.
Del Cauca, asistieron entre otros líderes, María Dolores Grueso, la mayora del pueblo Yanacona, Emelda Jiménez, tejedora de la región, y Nelly Valencia, coordinadora del grupo de mujeres del Consejo Regional Indígena del Cauca, Cric.
La pedagogía de la corridez en la construcción de paz
La maestra María Dolores Grueso, ‘Lola’, como todos la conocen, llegó desde el corregimiento de Galíndez en Patía, con su elocuencia y espontaneidad, con sus saberes y creaciones, para participar del encuentro en Buenaventura.
‘Lola de Galíndez’ es la autora de la pedagogía de la corridez, una manera alternativa de enseñanza para jóvenes y niños de su comunidad, quienes aprendieron y siguen aprendiendo matemáticas, biología, geografía, escritura y música con las bondades que les ofrece su contexto, la naturaleza. Pero también aprenden de valores y de las bondades de la vida.
Por la Institución Educativa Dos Ríos, que dirige Lola, han pasado generaciones de patíanos, quienes han visto en su maestra un gran ejemplo de perseverancia, dedicación y amor por lo que se hace.
Lola, que es conocida no solo en el Cauca sino en el resto del país por su labor como maestra, es una lideresa a la que esta comunidad le debe mucho, y por eso ahora ella camina la palabra y participa de diversos escenarios para compartir su oralidad, sus experiencias, y su resistencia, porque también fue víctima. A Lola le mataron a uno de sus hijos, la guerra también le tocó su corazón; pero ella sigue valiente y dicharachera, con su turbante, sus coloridos colores y pulseras, recitando versos de amor y de perdón.
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