Cauca presente en el II Foro Mundial de productores de Café

Caficultores de todos los continentes se reúnen para buscar soluciones ante situaciones como la sostenibilidad económica de los productores, el estado de los cultivos, la volatilidad de precio en los mercados internacionales y las adversidades climáticas.

Cauca presente en el II Foro Mundial de productores de Café.

Con una nutrida agenda y la participación de más de 1.500 productores de todos los continentes, inició hoy el Segundo Foro Mundial de Productores de Café, en Campinas, Brasil, encuentro que se centra en buscar soluciones para procurar un ingreso digno para los 25 millones de familias que se dedican al cultivo del grano en el mundo, 90 mil de ellas caucanas.

Danilo Reinaldo Vivas, representante de los caficultores caucanos ante el Comité Directivo y Nacional,  Luz Aida Cotazo y Uriel Solarte, miembros del Comité Departamental de Cafeteros del Cauca; representan al Cauca en este importante evento que confirma la voz de liderazgo de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC) ante la industria global en la búsqueda de un ingreso digno para los productores, pues la institución ha participado activamente desde la concepción del foro, su puesta en marcha y vigencia.

A propósito, el Gerente General de la FNC, Roberto Vélez Vallejo, reiteró su llamado a un precio remunerativo para los caficultores.

El líder gremial llevó a este importante foro la propuesta que ha venido liderando en diversos escenarios en beneficio de los productores de Colombia y del mundo, en el sentido de que la dimensión económica de la sostenibilidad tiene que ser tan importante como la social y la ambiental, pero que ha quedado rezagada.

“No parece ético ni moral que una industria que está ganando plata pague a los productores por debajo del costo de producción. (…) Nos falta que parte de la industria entienda que este es el deseo de los productores de café”, dijo.

El Gerente recordó que el productor es el eslabón más débil de la cadena, pero el más necesario para sostener esta cadena a futuro. “Queremos que esta cadena se presente al mundo como el gran ejemplo de sostenibilidad, y que sea esta la que comande la economía hacia el futuro y no ‘el mercado es el mercado’. No hablamos de lápices o sillas, sino de seres humanos”, subrayó.

Vélez Vallejo propuso en concreto crear una cadena de custodia del precio pagado por el café para que una proporción digna llegue efectivamente al productor y no se quede en la cadena.

Sugirió que la industria pague al menos dos dólares por libra de café a los productores, quienes certificarían, tal vez con un sello, a la industria y a los consumidores que en efecto reciben un precio remunerativo, que les permitan cubrir sus costos de producción eficiente y obtener una rentabilidad.

“Un sello que daríamos los países productores a la industria que esté comprometida y dispuesta a pagar esos dos dólares y nos den a los productores la posibilidad de tener una vida digna, de poder continuar el negocio hacia delante y pasarlo a la próxima generación”, expuso.

El Gerente General propuso por último que los países productores capturen más valor de la cadena mediante la creación, por ejemplo, de un sello de café “tostado en rigen” emitido por quienes procesen la materia prima antes de ser exportada.

Del diagnóstico a la propuesta

En la inauguración del II Foro Mundial de Productores de Café, el orador principal, Profesor Jeffrey D. Sachs, propuso la creación de un Fondo Mundial del Café para cofinanciar la sostenibilidad de los caficultores.

Este fondo, que sería de USD 10.000 millones al año, se alimentaría inicialmente con recursos por USD 2.500 millones por parte de la industria, a los que se le sumarían aportes públicos y privados para inversiones directas en finca por otros USD 2.500 millones, desembolsos presupuestales por el mismo valor y aportes de donantes por igual monto.

De lo contrario, es difícil que muchos productores subsistan a falta de apoyos para reinvertir en tecnología y productividad, lo que llevaría al abandono de más y más fincas, como ya se ve en Centroamérica con los migrantes, y pondría en riesgo el suministro global del grano.

Todo esto hace necesario un esfuerzo conjunto de los principales actores de la industria, de forma articulada con gobiernos, para invertir en la sostenibilidad del sector caficultor, lo que, de resultar exitoso, se convertiría en un ejemplo para el mundo.