- Inicio
- Mi Ciudad
- Mi Región
- Política
- Opinión
-
Deportes
- Copa El Nuevo Liberal
- Judicial
- Al estrado
- Clasificados
- Especiales
Por: Gabriela Guerrero Riaño
@GabyGRiao
La violencia y la agresión son palabras que a la par, con la emotiva y esperanzadora, palabra paz son comunes o de “moda”. Pero finalmente, es la concentración de las miradas de la sociedad en un problema que ha existido durante años y que en ciertas zonas se marca con mayor frecuencia, evidenciando que en la violencia social muestra de exclusión y discriminación a la que cientos de colombianos se ven expuestos a diario, siendo una de las causas más profundas para generar el conflicto en diferentes entornos.
Para definir exactamente el significado de Violencia y los índices que enfrentan los ciudadanos del Cauca, esta Casa Editorial analizó el informe emitido por el Instituto de Medicina Legal “Para Volver a Sembrar” (2007-2016), identificando cuales son las causas frecuentes de esta respuesta negativa por parte de la sociedad.
Existen varios tipos de violencia no solo la física, sino la verbal y no verbal, que tiene un impacto directamente psicológico, generando respuestas agresivas por parte de la sociedad. Según estudios, algunas veces ha llevado a las personas al suicidio o a matar a sus agresores en el momento que no soportan la situación, el problema es latente y se debe atacar para lograr tener paz en los entornos y aportar al proceso histórico de Colombia.
Los colombianos hablan de paz, de construir nuevas oportunidades, pero todo parte de la erradicación de la violencia en diversos escenarios. El respeto y la educación al saludar, algo mínimo que para muchos no tiene ningún tipo de importancia, es el punto de inicio donde se aceptan a las personas con sus diferencias y da inicio a la relaciones sociales sanas, siendo esto clave para reconstruir el tejido social fomentando expresiones de tolerancia y paz.
Según el último informe de Medicina Legal, que analiza los años 2007 a 2016 en todo Colombia se registraron lesiones fatales de causa externa en el 2007: 27.920; el año 2015 fue uno con las cifras más bajas en Colombia donde se registraron 24.681, y para el año 2016 25.438 en el territorio nacional.
En el país los homicidios pasaron de 11.585 en el año 2015, a 11.532 en el año 2016, las lesiones fatales en accidentes de tránsito se incrementó de 6.884 a 7.280 en el año 2016, las lesiones fatales en accidentes incrementaron de 2.675 en el 2015, a 2940 en 2016 y los suicidios en el país pasaron de 2.608 a 2.310 en el año 2016.
De otro lado las lesiones no fatales de causa externa, en el año 2007 fueron de: 282.457 y en el año 2016 disminuyó a 270. 967. Así las cifras que se reportan son: violencia Interpersonal, pasaron del año 2015: 126.803 a 123.298 en el 2016; la violencia Intrafamiliar en el 2015 fue de 74.233 y en el 2016 fue de 77.180. De otro lado las lesiones no fatales en accidente de transporte fueron en el 2015 de 45.806 y en 2016: 45.256. Así mismo los exámenes por presuntos delitos sexuales fueron de 22.155 en el 2015 y de 21.399 en 2016.
La información emitida por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencia Forense ha servido, para conocer la realidad del país y es un insumo para que los gobiernos municipales del territorio nacional tomen medidas acordes en sus políticas públicas buscando las estrategias necesarias para erradicar este tipo de violencias.
El resultado epidemiológico de la violencia en Colombia, muestra que la disminución de muertes al cesar el fuego del conflicto disminuye, sin embargo, la violencia sexual, física y social sigue generando conflictos en el departamento.
Violencia contra la mujer
Uno de los principales obstáculos que enfrentan las mujeres en el Cauca, es la violencia sistemática a la que se ven expuestas en su vida cotidiana, tanto en ámbitos públicos como privados, y se exacerba en el conflicto armado. La apuesta del gobierno departamental es que disminuya con la firma del acuerdo de paz. Empero, el período 2009-2014, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses (INMLCF) en su informe enunció que se presentaron 306 muertes violentas en mujeres en el departamento del Cauca. Discriminadas de la siguiente forma: 241 homicidios y 65 suicidios; así mismo, se registraron 15.465 valoraciones médico-legales por violencia interpersonal, violencia intrafamiliar y violencia sexual (INMLCF, 2015).
En Popayán, las entidades prendieron las alertas y en cuanto a la violencia direccionada a la mujer se ha tomado medidas de prevención y campañas para mitigar este foco de violencia, trabajan conjuntamente con la comunidad para brindar el tratamiento correcto basado en temas de género.
La investigación evidencia que Popayán (34%) y Barranquilla (33%), son las ciudades donde más acciones se generan para mitigar este problema en la sociedad. Sin embargo, las alertas están abiertas y el gobierno sigue articulando procesos, como el decreto 2733 que establece beneficios de contratación para mujeres víctimas de violencias, con miembros del gremio empresarial de la ciudad, hoy la OIM, USAID y la Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer, para afrontar la desigualdad y la violencia de género en el departamento del Cauca por medio de iniciativas que buscan incrementar la empleabilidad, creando empoderamiento y liderazgo en las mujeres.
Violencia generalizada en Colombia y Popayán
Según el informe “Forensis 2016” los efectos de los procesos de paz sobre las violencias social y política en Colombia, arrojan las siguientes cifras:
En Colombia, la violencia social y política, o mal llamada sociopolítica, durante los diferentes procesos de paz entre 2004 y 2016 con algunas pautas explicativas; se revisa tangencialmente su relación con la criminalidad, delincuencia común y organizada y su impacto en contextos urbanos. Arrojando datos positivos Entre 2004 y 2016 donde se marcó una reducción considerable de los homicidios cometidos en el país por violencia sociopolítica, pese a los últimos casos de asesinatos de líderes sociales que se han perpetrado en algunas regiones de Colombia.
Sin embargo, la reducción de la violencia social-política es efecto del proceso de negociaciones entre el Gobierno y el ahora grupo desmovilizado de las Farc EP.
La puesta del gobierno nacional y de las autoridades es crear garantías para la comunidad con el fin de brindar seguridad, con la desmovilización de los grupos armados los retos para el país se incrementan, razón por la cual el aparato estatal debe fortalecer su presencia en el territorio y garantizar los derechos de toda la ciudadanía. La excusa de años anteriores por parte del gobierno nacional era el conflicto en el territorio, pero con la desaparición de las Farc como grupo armado, el Estado debe llegar a todos los rincones del país.
Uno de los grandes problemas de violencia es la muerte de líderes sociales, que según el informe de Forensis 2016, Medicina legal para el corte anual solo registraba 39 casos de asesinatos políticos. No obstante, con el Acuerdo de paz este puede incrementarse el riesgo de muerte de desmovilizados y líderes que hablan de paz y cambios en el país, que puede llegar a presentarse como paso en procesos de paz y desmovilización vividos anteriormente. Es posible que estos pases por homicidios comunes por lo tanto organismos internacionales deben hacer la revisión reglamentaria.
Este informe hace gran énfasis desde la página 540 a la 649 al acuerdo con las Farc, donde las cifras de disminución de la violencia son pequeñas en el año 2016, pero pueden disminuir los efectos de la violencia en el campo positivamente con la implementación del acuerdo, evitando que la violencia se repita.
Desde 2015 hasta el 2016 y con la firma del acuerdo con la guerrilla la cifra es paso de 11.585 en 2015 a 11.532 en 2016, lo que argumenta que esto se debe a que la violencia con las armas en conflicto del campo se traslada a otros factores. Se ha presentado un incremento de muertes en la población campesina por hechos de violencia interpersonal en centros urbanos y factores como el asesinato de consumidores de sustancias psicoactivas.
Por otra parte, el asesinato de 127 líderes sociales y activistas en 2016, en gran medida en zonas en las que se desmovilizaron las guerrillas (en el Valle del Cauca por ejemplo) visibilizó a la vez el incremento de los homicidios selectivos que en muchos casos la investigación no aclara de donde provienen estos ataques a la población.
Finalmente, en Popayán el riesgo de la violencia se puede enmarcar en varios tipos de violencia como la discriminación, la falta de oportunidades y el riesgo al que se exponen diariamente los líderes sociales en las regiones aledañas, así como el ajuste de cuentas que en los últimos días ha dejado ya 6 homicidios en la municipalidad de Santander de Quilichao, incluso al cierre de esta edición se conoció de un hecho de sicariato en una discoteca de la ciudad y el pasado viernes en un gimnasio de Quilichao una mujer fue víctima de un atentado también por un sujeto armado que disparó contra su humanidad.
Comentarios recientes