Por: Carolina Rico C.
Fotografía: Yeissón Yondapiz.
Gerardo Ambrosio Muñoz, cultivador de flor del corregimiento de Tunía, Municipio de Piendamó, decidió en el año 1971 dedicarse a sacar adelante su organización Tairona Garden´s que hace parte de la asociación de floricultores del centro del cauca, ASOFLORICCA.
Este reconocido productor de flor, amablemente comparte sus memorias con este medio y relata desde que llegaron los primeros cultivadores a la región. Comenta, con un poco de nostalgia que en el año 1974 llegó el primer cultivo de flores tipo exportación a ubicarse en la cabecera de Piendamó, con el nombre “Targa de Occidente”, empresa manejada por antioqueños que buscaban una zona geográfica con buena luminosidad solar y que tuviera las características óptimas para el cultivo del crisantemo y sus variedades.
Legado y Tradición
Gerardo, recuerda que la instalación de esta empresa abrió grandes opciones económicas y laborales a la gente del sector, pues se empezó a utilizar mano de obra local, al mismo tiempo se fueron instalando otras empresas en diferentes sitios del Departamento como Pisochago en Coconuco, Falcón Farms y Aranjuez en Cajibío, y la empresa con mayor referencia en el municipio de Piendamó “flores del Cauca” que dejo un gran legado a sus colabores, no solo por la vinculación laboral sino por el conocimiento que adquirieron.
Con el pasar del tiempo y al ser liquidada esta empresa, hoy, familias enteras se siguen beneficiando de lo que un día fue “Flores del Cauca”.
Este conocimiento sobre el manejo del cultivo de las flores ha venido pasando de padres a hijos, a la fecha se puede decir que se cubre para el sur occidente colombiano las necesidades en flor nacional, el Huila también se beneficia con esta producción que se amplió a mercados nuevos como Pereira y Bogotá.
Una nueva visión del cultivo
Con la iniciativa de 7 productores de la región se crea ASOFLORICCA, que nace con 32 asociados y que a la fecha cuenta con 67 cultivadores asociados de los municipios de Piendamó, Silvia y Cajibío, iniciando una nueva etapa de crecimiento empresarial y abriendo la posibilidad de ser más competitivos para el mercado nacional.
Durante estos dieciséis años se ha ido tecnificando y mejorando la producción gracias al apoyo de entidades como el SENA, CORPOTUNIA, Instituto Técnico Agropecuario de Tunia y algunas entidades del Estado.
Cabe destacar que hubo un proyecto de vital importancia en el año 2007, a través de la USAID y el Municipio, con el cual se logró el apoyo para el mejoramiento vegetal contando con el SENA a través del Laboratorio de Biotecnología obteniendo tres mil quinientos esquejes in-vitro con el cual se mejoró genéticamente las plántulas y se logró un aumento del 30% en la producción, en esta fase en el Instituto técnico agropecuario de Tunía se desarrolló la etapa ex vitro que consistió en la adaptación al campo del material vegetal, de esta manera, se pudo entregar once mil esquejes semanales a cada productor asociado durante un año y medio.
Como complemento de este proyecto, se construye un cuarto frío de 39 metros cúbicos y con capacidad de almacenamiento de 100 cajas de flor, en la bodega que se pudo construir gracias al aporte económico de los asociados y el apoyo de la alcaldía de Silvia y Piendamó.
Asofloricca, ha tenido la oportunidad de beneficiarse de algunos proyectos a nivel nacional por la gestión de sus asociados, pero aún falta mucho para lograr su mayor objetivo que es el de llegar a mercados internacionales, ya que se cumple con todas las características exigidas de calidad para la flor, pero falta más tierra y un volumen de producción más alto, para que esto sea rentable.
Responsabilidad Ambiental
No hay que desconocer que este sector de la floricultura es considerado como una de las agroindustrias más contaminantes, debido al manejo de pesticidas de alta toxicidad y enorme residualidad de los insumos, sin embargo, estos 67 productores le están apostando al buen uso de los recursos naturales y a los procesos de las buenas prácticas agrícolas(BPA).
Prioridades
Gracias al compromiso de productores como Norbey Gonzales, de la vereda Farallones, que facilitó su espacio para la instalación de una parcela demostrativa, ASOFLORICCA pretende hacer un llamado al gobierno nacional. departamental y local, para buscar su atención y apoyo en proyectos como el de la instalación de un sistema de riego por goteo automatizado, que constituye una tecnología de punta para el manejo apropiado del agua y la sustitución de bombillos incandescentes por lámparas de luz led, con las cuales disminuirían el consumo de energía.
Este 2016, la asociación, le apunta al mejoramiento ambiental de las 17 hectáreas de cultivo, de las 36 hectáreas que son en total de la región
Fortalecer los convenios existentes con empresas como ‘Campo Limpio’ quienes se encargan de la recolección de envases plásticos de pesticidas, ‘Plásticos San Francisco’, quienes recogen el plástico de cambio de los invernaderos.
Continuar con el SENA, institución que a través de la capacitación los está impulsando al manejo del plaguicida de origen vegetal.
Concientizar a los productores y cultivadores que implementen en sus microempresas la seguridad industrial con la utilización de equipos de protección con el fin de cumplir con la norma de bioseguridad. Aumentar el número de empleos directos que están alrededor de los 450 en la zona.
Gerardo Muñoz, en su dialogo para este medio, desea resaltar la importancia de la unión de los cultivadores de flores alrededor de un producto tan importante para la economía local y destacar que el éxito de la empresa floricultora, está estrechamente ligado al trabajo en equipo de todos los asociados.
Farallones aporta al enlucimiento multicolor
Once productores de la vereda Farallones del corregimiento de Tunia, hacen parte de ASOFLORICCA, hombres y mujeres que traen ese legado de ‘Flores del Cauca’.
Con sus manos desde hace más de quince años vienen cultivando sus pequeños espacios llenos de amor y color, Crisantemos en todas sus variedades, Gerberas en todas sus tonalidades, estas personas crearon microempresas y son generadoras de empleo.
Con su aporte ayudan a cubrir las necesidades del consumo nacional de flor.