Transformación digital: un reto empresarial

ORIANA MENDOZA VIDAL

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Las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones – TIC han tenido un desarrollo exponencial en las últimas décadas, impactando positivamente el desempeño de todas las actividades económicas y de la vida misma de la sociedad. Se viene transformando la forma de hacer negocios, los canales de comercialización, surgiendo nuevas oportunidades en el mercado, lo que se enlazada indiscutiblemente con las competencias digitales que cada día debe adquirir el talento humano de una empresa.

Recientes estadísticas indican que actualmente el 50% de los empleos a nivel mundial requieren cierto grado de habilidades tecnológicas, pero proyecciones de entidades como la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos, afirman que ese porcentaje aumentará a 77% en los próximos diez años. Así las cosas, el mercado laboral de Colombia requiere de mayores habilidades digitales, tal como se evidencia en las estadísticas de la plataforma LinkedIn, en la cual hay registrados 6,7 millones de colombianos y 158.000 empresas, que disponen de 128.000 vacantes en diferentes áreas que no se pueden cubrir principalmente por un déficit de nuevas habilidades digitales. Los sectores con mayor participación son educación, finanzas, software y servicios tecnológicos, servicios corporativos y bienes de consumo.

Hace pocos meses el Banco Interamericano de Desarrollo – BID, publicó el estudio “Economía digital en América Latina y el Caribe: situación actual y recomendaciones”, en el cual se analiza con cifras y hechos el desarrollo económico de los países bajo estudio y su evolución en comunicaciones electrónicas, que se ligan directamente al avance de las TIC. Dicho estudio revela que un aumento promedio del 10% en la penetración de banda ancha en los países de América Latina y el Caribe (ALC) genera un alza del 3,19% del Producto Interno Bruto (PIB) y del 2,61% de la productividad, a la par que genera más de 67.000 empleos directos. Se escucha desde varias orillas públicas y privadas que uno de los cuellos de botella para acelerar el desarrollo socioeconómico de Colombia es el bajo crecimiento (o estancamiento) de la productividad, pues bien, todo lo relacionado con las TIC realiza un aporte importante para mejorar dicha situación, dentro de un adecuado ecosistema para su desarrollo.

El BID señala que es importante reconocer la importancia de la instalación y uso de la banda ancha para obtener mejoras en la economía y la sociedad, ésta y las TIC en general, deben analizarse como un ecosistema compuesto por elementos básicos y necesarios agrupados en torno a la oferta (acceso) y la demanda (adopción y uso), y unos aspectos transversales (política pública y regulación), todos ellos dentro de un marco institucional donde cada uno de los distintos actores desempeña un papel especifico. Las TIC se convierten en un facilitador para la prestación de servicios básicos a los ciudadanos en educación, salud, servicios públicos, dado que permiten su acceso en lugares remotos, mejorando la experiencia del usuario con dichos servicios o aumentando la eficiencia en la provisión de los mismos. Así mismo, la adopción de servicios y aplicaciones habilitados por la banda ancha puede mejorar de forma muy significativa la competitividad de las empresas, como reflejo de la adopción de aplicaciones que permiten adelantar una gestión más eficiente de los recursos disponibles, aumentar la productividad de las empresas, desarrollar nuevos productos y modelos de negocio, proveer servicios y crear capacidad de competir en un mercado global.

Cada vez es más común en el mundo digital hablar de Inteligencia Artificial, Internet de las Cosas (IoT) o Blockchain, por ello, más allá de una “alfabetización digital”, es necesario escalar a una educación digital y transformación cultural frente al uso de las TIC, no sólo en el desempeño de nuestras actividades empresariales sacando ventajas de plataformas como Google Ads, Facebook marketing; sino como ciudadanos, inmersos en una economía que cada vez se desarrolla más Online que Offline. Ejemplos de la era digital como Alibaba que no tiene inventario, Uber que no tiene vehículos propios, Airbnb que no posee bienes raíces, Facebook que no produce contenido y Waze donde las actualizaciones del tráfico son realizadas por los usuarios, son muestra de la transformación digital que rápidamente “invade” los mercados.

Recordemos que la expansión de las nuevas tecnologías es uno de los principales soportes para el desarrollo de la economía naranja a nivel global, así como en transformación digital las TIC pueden y deben cumplir un rol fundamental en el mejoramiento de los principales servicios sociales, generando inclusión y superiores condiciones de vida en los sitios apartados de la geografía nacional. De este modo, señor empresario usted decide si “llorar o mejor, vender pañuelos”, es decir, subirse al bus de la era digital y sacar ventaja para su negocio, o seguir quejándose, viendo como disminuyen sus ingresos, poniendo en riesgo la sostenibilidad empresarial y la generación de empleo.