Santander de Quilichao debería ser la capital del Cauca porque está más cerquita de Cali, que es la sucursal del cielo. Y bajo el cielo de Cali lo que no hay, no existe. Por ejemplo, en Cali encontramos mejores oportunidades de estudio en universidades de garaje, más variedad de lupanares y más descomposición social. Eso sí, menos decencia en muchas cosas, pero eso es, lo que es una capital.
El comercio al interior de las paredes blancas de Popayán es lento, perezoso, de pueblito. Casi todos los negocios los cierran temprano en las noches y los fines de semana no hay donde tomarse un café. En cambio, en Quilichao tenemos un comercio caótico, vigoroso. Por sus calles hierve el dinero (del bueno y del malo) sin recato alguno. Los días de mercado pululan los comerciantes, las cantinas, las rebajas, los traquetos, las rebatiñas. Se nota que hay gente comprometida con la circulación del billete. Y eso es lo que le falta a Popayán, que circule el billete entre la gente y no solo entre los contratistas de los sistemas burocráticos. Porque como decía el viejo Chauz en los confines de tierra dentro, en este pueblito es más vigoroso el sistema burocrático que el bancario. Como quien dice, a Popayán le falta corromperse un poco más para tener cara de ciudad capital como si la tiene Quilichao.
Los últimos alcaldes de Popayán, pro hombres del comercio y lejanos del concepto idealista de la política, han padecido el dolor de tener que dedicarle más tiempo a la destrucción de la confianza pública que a gobernar como estadistas. En cambio, en Quilichao todo es una maravilla. Allí los políticos realizan gestiones impolutas. Administran con conceptos de avanzada, sin chambonadas. Por ejemplo, en asuntos de tránsito y movilidad, o en usos de espacios públicos han sabido gobernar con una imaginación increíble. Se nota que tienen estadistas al servicio de la ciudad.
En Popayán no hay mucha empresa que digamos. Es un pueblo de bajo perfil, que solo tiene burocracia y emprendimientos de barrio sin mucho presupuesto. Ah, pero en Santander si hay empresas. Y no solo nacionales.
Hay empresas e industrias internacionales y eso le da peso en la cola como ciudad capital. Esas empresas no es que tributen mucho, en realidad el aporte de esas empresas es como invisible y gaseoso (de un mínimo vital casi inexistente), porque son empresas que tienen las puertas y las chequeras mirando para Cali, pero no importa.
Quilichao debería ser la capital del Cauca por el calor, los cholaos, por la liberalidad y belleza de sus mujeres. Y claro, también por el machismo y la inteligencia de sus hombres, por la pluralidad étnica, por el sabor de sus piñas y la bondad de sus pandebonos. Y porque la gente piensa en modo valluno, y habla como valluno, que los hace más cosmopolitas y agradables.
Incluso me parece que en Quilichao el crimen es más organizado y eso nos podría dar mejor notoriedad internacional. Tener una ciudad que destaque a diario en los titulares de judiciales puede ser mejor turísticamente que una ciudad como Popayán que aparece en los periódicos solo cuando se habla de turismo de cuando en vez. Y siempre para decir lo mismo, o de otra manera: siempre lo mismo: que es una ciudad culta de museos abiertos y tal y tal.
Los envidiosos dirán que me la fumé verde, que es una propuesta oprobiosa. Pero como propuesta la considero mejor a la que tienen algunos para independizar los municipios del norte, al departamento del Cauca. Pensemos la idea.
Comentarios recientes