En el marco de su vigésimo quinto aniversario, bajo el lema ‘Protegemos el territorio, tejemos la vida’, la CNTI hace un llamado de alerta al Gobierno nacional y a la ciudadanía: las comunidades indígenas están en riesgo de etnocidio, debido a la exacerbación de vulneraciones de los derechos territoriales y de la violencia en un contexto de conflicto armado que tiende a reproducirse.
De acuerdo con el Observatorio de Derechos Territorial de los Pueblos Indígenas, como componente de trabajo de la CNTI encargado del monitoreo, análisis y la generación de información sobre las problemáticas territoriales y que apoya los procesos de exigibilidad e incidencia política de los pueblos indígenas, la cantidad de hectáreas formalizadas para resguardos ha disminuido considerablemente.
En agosto de 1996, se formalizaron aproximadamente 26 millones de hectáreas para resguardos, mientras que para 2020, esta cantidad apenas sobrepasaba los 33 millones. Esto quiere decir que en 20 años solo hubo un avance de 7 millones de hectáreas formalizadas.
El Observatorio también evidenció un bajo índice de respuesta por parte de la Agencia Nacional de Tierras (ANT) a las solicitudes de formalización de territorios, pues a diciembre de 2020 se tenía un registro de 779 resguardos constituidos frente a 1014 solicitudes sin resolver.
Actualmente cursan 180 solicitudes de protección a la ocupación, uso ancestral y tradicional territorial, frente a las cuales no se ha proferido la primera resolución de protección. Existen al menos 573 solicitudes de restitución de derechos territoriales frente a tan solo 17 fallos a favor de pueblos indígenas desde la adopción de la política de restitución de derechos territoriales, creada bajo el Decreto 4633 de 2011.
A la vulneración de derechos territoriales, se suma la violencia sistemática contra las comunidades indígenas. El observatorio de la CNTI cuenta con un Sistema de Monitoreo de Violencia Sociopolítica, a través del cual se ha podido registrar el homicidio de 361 indígenas desde la adopción del capítulo étnico del Acuerdo Final de Paz (AFP). En el periodo comprendido entre 2017 y 2020, se registró un preocupante incremento del 200% en el homicidio a líderes/as y comuneros/as indígenas.
En este contexto, la CNTI ha llevado a cabo un trabajo de incidencia y ha hecho un notable esfuerzo por posicionar las necesidades de los pueblos indígenas en materia territorial. Así mismo, continúa denunciando el permanente riesgo que enfrentan, a causa de la falta de reconocimiento formal de los territorios por parte del Estado, como una necesidad mínima para la garantía de los demás derechos.
25 años
La CNTI se creó mediante el Decreto 1397 de 1996, como respuesta a la vulneración sistemática e histórica a los derechos y a la integridad de los pueblos indígenas en Colombia. Su objetivo es la creación de espacios de diálogo y concertación entre los pueblos indígenas y el Gobierno Nacional para exigir la garantía y el goce efectivo de los derechos territoriales de las comunidades indígenas.
En conmemoración de los 25 años, el próximo viernes 13 de agosto se realizará un evento que busca recuperar la memoria histórica sobre las causas que originaron la creación de este espacio, como uno de los tantos que han tenido que ser ganados por los pueblos indígenas en la defensa de sus territorios, las razones que justifican su continuidad y los parámetros políticos que permitan mantener su vigencia en el marco de los actuales desafíos en materia territorial en Colombia y en perspectiva de superar la inseguridad jurídica sobre los territorios a la que están expuestas diversas comunidades.
El evento contará con la presencia de voceros/as, políticos/as, académicos/as, representantes de pueblos, organizaciones indígenas y sociales de diferentes partes del país, así como la presentación de los informes publicados por la CNTI en la última década. Además, se desarrollarán diferentes actividades con una perspectiva crítica que den cuenta de la actualidad territorial indígena y fortalezcan el quehacer de la organización a nivel local, nacional e internacional, en pro de la pervivencia de la cultura, los territorios, la dignidad de la vida, la paz y el equilibrio ambiental.