Los meses de Abril, Mayo y Junio en cifras (que entre otras cosas nos enredan el entendimiento), fueron para nuestra ciudad de pocos casos, personas descubiertas con el virus, la mayoría asintomáticos (que quiere decir que no lo sienten, no saben que lo tienen, pero además de ser portadores del virus, son transmisores del mismo).
Incluso en la tertulia de la cuarentena humana, resaltamos con la presencia del secretario de salud, Oscar Ospina, el comportamiento ciudadano con los “puestos de control” en veredas e incluso en barrios de Popayán, y teníamos claro que el confinamiento se daba mientras la institucionalidad adecuaba las condiciones de salud y concretamente: la creación de la red de apoyo familiar y comunitario RAFCO – VIGIAS DE LA SALUD, así como la ampliación del número de camas en las Unidades de cuidados intensivos -UCI-. Aumentaba el número de ventiladores, se conseguía y se contrataba el personal para manejarlos.
Mientras lo anterior se daba, el apoyo alimentario inicialmente con mercados, luego bonos, se convertía en aspecto clave para garantizar que en la población mayoritariamente obligada a la economía del rebusque, se cumpliera con la quedada en casa.
377 mujeres y 474 hombres, para un total de 851 personas son al primero de agosto la cifras de contagiados. Han fallecido 15 personas, recuperados hasta ahora 354, activos en casa 457 y hospitalizados 25. Las zonas con mayor número de afectados son la comuna dos con 153, la uno con 100 y la cuatro con 98, la zona rural con 89 personas y de otros municipios han llegado 37 paisanos.
Lo novedoso explica el secretario de salud de Popayán, con relación al manejo de otros departamentos está en “la red de apoyo familiar y comunitario que consiste en basar el sistema en la solidaridad, es decir el mutuo apoyo entre las personas, el auto cuidado de su familia y su comunidad, el derecho de las personas a participar en las decisiones adoptadas por el personal del sistema de salud que les afecte o beneficie”, en ultimas se resume en la integración operativa de las acciones poblacionales, colectivas e individuales.
Participación comunitaria, apoyo alimentario, consecución de elementos técnicos, científicos y contratación de personal calificado, deberán ser características con las que enfrentará (la institucionalidad en coordinación con la comunidad desde las junta de acción comunal), el denominado pico que se proyecta hacia finales de Agosto y primera quincena de Septiembre del presente año.
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