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Redacción fin de semana
@elnuevoliberal
Popayán, después de Barranquilla, es la ciudad donde el valor de los bienes y servicios de la canasta representativa del gasto de los hogares del país son más costosos, así lo revela el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, en su más reciente informe sobre Índice de Precios al Consumidor (IPC) (ver imagen 1), que, además, está estrenando nueva metodología.
Esta metodología cambia cada cinco años, y enero fue el primer mes en el que el Dane la utilizó, esta nueva metodología incluye nueva nomenclatura de los bienes y servicios, pues estos pasan de clasificarse por su naturaleza a organizarse por su uso.
Además, ingresaron unos nuevos y otros salieron de la lista, como por ejemplo se incluyeron: casco para motocicletas, cuello para bici usuarios, tarifa de alquiler de canchas sintéticas, servicios de streaming, y collares y jaulas para mascotas; mientras que se excluyeron arroz para sopa, impresión de fotografías y cera para pisos.
También se incluye una ampliación de cobertura para la recolección de información, se pasa de 24 a 38 ciudades (32 capitales de departamento, y seis municipios priorizados); además que por primera vez se agregan los hogares unipersonales, dada su relevancia ahora para el país.
Así mismo, para seguir los lineamientos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el Dane también clasificará la población y sus gastos en ingresos bajos, medios y altos para hacer posible las comparaciones con los demás países de la agrupación.
De acuerdo con la entidad, el IPC permite calcular la variación promedio mensual de los precios de una canasta de bienes y servicios representativa del gasto de los hogares del país. (Esto no implica que IPC calcule el valor de la canasta familiar); a esto se llega a través de una encuesta especializada que aplica con regularidad el Dane, denominada la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos.
“Esta encuesta permite tener certeza sobre el patrón de gasto y consumo de muchas familias en el país, específicamente en las áreas urbanas de la mayoría de las capitales de Departamento, se indaga sobre los gastos diarios de cada miembro del hogar, los gastos semanales, mensuales, semestrales y anuales del hogar. A partir de esta información, y de manera agregada, se puede constituir un patrón de consumo general para los hogares del país”, explican desde el Dane.
Es decir que aunque un hogar tenga un consumo particular, la lista de bienes y servicios es la misma para todos los hogares, solo que el consumo varía en cantidad, frecuencia de tiempo y combinación.
“Al tener Popayán el segundo IPC más alto de Colombia, justo después de Barranquilla, podríamos inferir que los payaneses no ahorramos dado que todo lo ganamos es justo para cubrir los gastos de la canasta familiar y por eso al payanés no le sobra dinero para ahorrar, entonces todo lo que le ingresa se lo gasta, puedo ganarme dos millones, pero si eso se me va en los bienes y servicios que adquiero pues no me sobra, pero posiblemente en una ciudad como Riohacha, me alcanza y me sobra ese dinero, esa sería la relación con el gasto”, explicó Felipe Acosta, doctorando en economía.
Lo cierto es, que la ciudad al tener unos precios al consumidor tan alto, pues la inflación de la ciudad es mayor, y si esto ocurre es porque, entre otras causas, no hay oportunidades laborales, carecen las industrias y emprendimientos; además, no hay que olvidar que Popayán es una de las ciudades con la gasolina más cara del país.
De otro lado, teniendo en cuenta la división de bienes y servicios, la variación de los precios al consumidor en Popayán –para enero- se movió así: alimentos y bebidas no alcohólicas: 2,13%, la más alta en comparación con las demás ciudades; bebidas alcohólicas y tabaco: 0,91%; prendas de vestir y calzado presentaron una variación del 0,35, mientras que en ciudades como Barranquilla, Medellín y Neiva esa variación fue negativa, al igual que la media nacional.
Otro de los servicios que mayor variación presentó durante enero fue el que incluye: alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles, que en Popayán tuvo una variación de 0,52% (la más alta del país). Esto se podría explicar en que un arriendo en la ciudad oscila entre los 600 y un millón para clase media, más de millón doscientos para clase alta (dependiendo del sector); al igual que en las tarifas de aseo, donde por lo menos, un barrio de estrato 3 paga $24.968, mientras que el servicio total de acueducto y alcantarillado es de $24.282.
“Estamos gastando muchísimo más en arriendo, un elemento que los ponderadores están presentando en función de clases sociales, es que incluso un hogar pobre bajo la clasificación internacional que estamos implementando para esta clasificación gasta aproximadamente un 20% de ese presupuesto para el arriendo. Colombia se refleja como un país que tiene las mayores participaciones del gasto en arriendo dentro de la canasta básica de toda la canasta latinoamericana”, dijo el director del Dane Juan Daniel Oviedo
Oviedo explicó que lo que prueban los datos es que los colombianos gastaron más en el sector inmobiliario, especialmente en arriendos, lo que hizo que la demanda aumentara, y por ende los precios.
Servicios como salud, también presentan una variación alta en Popayán, el Dane señala que fue del 0,56%, frente a la media nacional mensual que fue de 0,37%; información y comunicación presenta un 1,16% (menos que la media nacional que es 1,44%), recreación y cultura tuvo una variación de 0,36; restaurantes y hoteles 1,12%, y bienes y servicios diversos: 1,16%, el más alto de todo el país; el cual incluye productos de cuidado personal, finanzas y aseguradoras.
Así que si en enero de 2019 el costo de la vida de los colombianos fue, en traducción a las cifras del IPC, del 0,60 %, menor a la de enero de 2018 cuando se ubicó en 0.63%; esto quiere decir que en enero la vida de los colombianos costó un poco menos que en el mismo mes del año pasado, y fue, de hecho, la cifra más baja para ese mes desde 2014.
Para el caso de Popayán, la cifra en enero de 2018 fue de 0,27% y para este año se ajustó en 0,86%, por lo que los bienes y servicios para los payaneses costaron mucho más en enero de este año.
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