En días pasados Aquiles Revelo fue sacado de su hábitat natural: El Parque de Caldas, por un amigo que lo invito a conocer por dentro el nuevo Centro Comercial: Terra Plaza en el Norte de la ciudad, el cual se abrirá al público el mes de octubre, aunque no muy contento de dejar su Parque querido, se subió al bus qué pasa por ahí y que va hasta la Venta de Cajibío, fue un viaje de satisfacciones y frustraciones para Aquiles.
Las primeras cuando pasaban por las vías que están pavimentadas, el paseo era agradable, las segundas cuando el bus pasaba “a mil” por los huecos y parando donde le diera la gana al conductor, sufriendo golpes con las ventanas, empujones y pisones.
A Aquiles no le quedó de otra que decirle al amigo que se devolvieran, que otro día podrían ir hasta el Centro Comercial, como en efecto sucedió. Estando de nuevo en su “casa” el Parque de Caldas, como en señal de oración, con los brazos extendidos y mirando a los cielos, exclamó: Señor haz que no demore tanto “el Cambio” a ver si alcanza a terminar las obras, pues lo que ha visto en tanto y en tantos años, es que el “tiempo” pasa… volando.
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