Columna de opinión
Por: Rodrigo Solarte
Haré diversos comentarios en esta columna septembrina de este histórico 2022 o primer cuarto del siglo XXI.
Son ya tiempos de complementariedad entre lo presencial y virtual, convertida también en un derecho humano universal a lograr en todos los países.
Esta transición científica y técnica influirá en todas las culturas, relacionando intergeneracional e interculturalmente, la necesaria convivencia humana comunicativa de principios y valores en los quehaceres a todos los niveles de la sociedad.
El estar bien informado y formado desde las familias, comunidades y sociedades diversas, hace parte de las historias de vida individual y colectiva, que en redes, imita nuestro SER HUMANOS en lo anatómico, fisiológico y funcional como sistemas cargados de energías que mueven la naturaleza y demás vivos, según las verdades que el poder del conocimiento va enseñando.
La historia constata polarizaciones permanentes entre lo viejo y lo nuevo, flujos y reflujos de procesos, que el pensamiento y experiencias van mostrando como adecuados para un mejor vivir en el planeta y las localidades que lo conforman en el espacio cósmico correspondiente.
Desde las comunidades primitivas hasta las actuales, divididas en imperios económicos y militares, centrales y satélites, el deseo de libertad y autonomía, individual, familiar y colectiva, han prevalecido como razones que sustenten la organización democrática, representativa y comprometida con el querer de las mayorías, procesos que a su vez, gestan nuevas propuestas que las nuevas generaciones, hijas de su tiempo, sugieren o deciden organizadamente lograr con las presentes y pensando en las que nazcan.
La Universidad concebida como receptora humana de lo local y universal, es a la vez sujeto colectivo, más que individual, partícipe de lo que acontece e investiga para conocerlo y contribuir para mejorar, transformar o mantener, con sus estamentos, lo mejor para las comunidades cercanas y de donde provengan quienes la conforman o han egresado de las diferentes disciplinas del conocimiento que forme: seres humanos, ciudadanos y profesionales cualificados para servir, más que para competir con otros egos.
Los nuevos tiempos exigen, corrección de las taras que heredemos institucionalmente, confiando en la autocrítica constructiva argumentada, de las anteriores y nuevas generaciones; autoestima necesaria que valore historia y potencialidades de todos y cada uno de los estamentos (egresados, administrativos, profesores, estudiantes, diversos funcionarios, madres y padres o acudientes de las y los estudiantes); creatividad ante la problemática acumulada, solidaridad fundamental para el trabajo en equipo en los cuales entran las mismas comunidades con sus delegados o representantes, y tantas otros valores y principios de vida, convivencia humana y con el planeta.
Las consecuencias de la globalización iniciada con lo económico e internacionalizada con la virtualidad, impacta lo regional y local, que ya nuestra Constitución política de 1991, tuvo en cuenta con la Descentralización, consecuente con la Democracia participativa, que hoy se pregona para llevarla a la práctica progresiva, gracias al propósito ciudadano mayoritario comprometido con la Paz, justicia, dignidad sin discriminaciones para centrarnos en LA VIDA durante todo el proceso vital que se inicia con la gestación y salud integral de mujeres, madres, trabajadores y familias en general.
Desde las Ciencias de la Salud Unicaucana, la especialidad en Pediatría está en su cumpleaños cuarenta y siete ( 47 ) de haberse iniciado. Progresivamente, manteniendo el énfasis clínico centrado en la enfermedad y atención hospitalaria, se ha ido relacionando con los demás niveles de atención, integrando progresivamente prevención de la enfermedad y promoción de la salud física, emocional, familiar, comunitaria y social o colectiva, la misma que como ATENCION PRIMARIA INTEGRAL Y PROMOCIONAL, será nacionalmente la puerta de entrada al sistema que actualmente se oficializará.
Bienvenidos este 10 de septiembre de 2022 a quienes nos acompañen en este cumpleaños.
Mientras los anglosajones consideraron a los primeros pobladores de América de «Gente incomprensible» o los franceses de «Gente buena pero salvaje», solo la Corona creyó que solo ampliando la familia, se podría realizar un proyecto de gran humanismo. Solamente que en la república , ese gran ideal, se ha visto difamado por personajes como López Obrador, exigiéndole al Rey de España y al Papa, de pedir perdón , lo que está provocando una guerra civil, entre los mal llamados indios, contra medio indios, y Negros, algo que si no se ataja a tiempo, los tiempos futuros se ven dramáticos.