Objetivo Popayan: los candidatos

JUAN SANTACRUZ

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 “Si cincuenta millones cometen una burrada; no por eso deja de ser una burrada”. Anatolle France.

Los votantes somos conscientes que es intrínseco en los postulantes pensar que “el éxito colectivo es dar sin pedir nada a cambio y trabajar para gente que no conoces” (¡JA¡). Quince pre aspirantes más los que hacen falta; es un indicador importante en favor de la democracia. Pero la malicia indígena nos pone a cavilar inforadamente ¡qué será lo que dan tan bueno en ese edificio frente al sabio Caldas¡

Álvaro Urbano manifiesta en una de sus últimas columnas, que a los aspirantes las elecciones los cogieron con los calzones abajo. Varias de las plataformas políticas parecen calcadas; está como el cuento de las reinas cuando se le pregunta por su personaje favorito y contestan que es el papa Juan Pablo Montoya.




Nelson Paz Anaya en su defecto, invita a los que opinamos a llamar las cosas por su nombre. En rigor, sin demeritar a nadie y mucho menos asumir posiciones ya que por ninguna me decanto hasta el momento, conceptuó sobre actuaciones anteriores de los candidatos que en mi parecer para no cometer ‘burradas’ hay que tener en la mira: Santiago Zambrano; patojo, preparado, buena gente, le corre pipián por sus venas. Oscar Ospina; según mi contacto en el congreso fue un hombre juicioso y estudioso. En el Susana, demostró sus cualidades como administrador. Jorge Bastidas, lo que me llama la atención, es la constancia y defensa de sus preceptos. Pablo Parra; joven, pelion, no le tapan los ojos fácilmente, para mi uno de los mejores concejales. Argenis Gómez; tiene la valentía de ir por la Alcaldía, por eso la incluyo en mi listado. Desgraciadamente lo poco que se de ella tiene que ver con que en el otro diario un comunicador la llama la bella, resaltando más sus atributos físicos que sus capacidades. Y no sé si realmente sea guapa, porque en las fotos siempre aparece sesionando, atrás de los micrófonos y un poco despeinada. Claro está que una dama tan corajuda, se tiene que despelucar cuando habla y los únicos que le ponen cuidado son los finados de los cuadros, porque los vivos literalmente, están inmersos en su celular escuchando el ultimo hit del filósofo Maluma (como aconseja el fan number one Duque).

Don Horacio Dorado en su opinión del último domingo nos da la lección de un buen profesor; no solo critiquemos también aportemos soluciones. Pese a que el equilibrio en la información exige “dar palo” a quienes consideramos abusan del poder, tendré propositivamente muy en cuenta su enseñanza.

El sufragio es consecuencia directa de nuestro nivel de conciencia.

ADENDA. Sugiero calurosamente para aprender de Popayán y su historia, leer libros agradables y sencillos de autores como: Don Horacio Dorado, Don Omar H. Velasco, Don Marco A. Valencia, Don Guido Enriques, etc.