Una tragedia anunciada: Gobernación del Cauca

Como una tragedia anunciada, que generó amenazas de muerte y originó la renuncia del Secretario de Gobierno de Santander de Quilichao, resultó el fatídico suceso en la mina de la vereda San Antonio, en la segunda ciudad del Cauca, que deja, hasta el momento, tres muertos, dos heridos y trece desaparecidos.

Aunque los lugareños, y testigos de la tragedia, dicen que los muertos sobrepasan la treintena, las autoridades no se atreven a especular y esperan los resultados de la acción que se lleva a cabo con ayuda de doce retroexcavadoras, para el rescate de los cadáveres.

Ricardo Cifuentes Guzmán, actual Asesor de la Gobernación del Cauca, quien desde finales del año pasado denunció las inconveniencias por la desmedida explotación aurífera, ante la Agencia Nacional de Minería, el Gobierno Departamental y Nacional, fue objeto de amenazas de muerte y debió renunciar de su cargo como Secretario de Gobierno del Municipio de Santander de Quilichao.

“Es lamentable que después de todo lo que se denunció, en relación con la ilegalidad y la forma de explotación aurífera que se realizaba en este sitio, hoy estemos llorando el sacrificio de más de 20 vidas. Esto se le informó con tiempo a la Agencia Nacional de Minería, a través del gobierno municipal de Santander de Quilichao y del Gobierno Departamental, pero hoy estamos viendo el resultado de la ineficacia de las acciones que se solicitaron”, puntualizó de manera enfática Cifuentes Guzmán.

Sin descanso, día y noche, los diferentes organismos de socorro, Cuerpos de Bomberos, Cruz, Roja, Defensa Civil, Ejército, Policía Nacional, el CTI, Medicina Legal, las alcaldías municipales de Buenos Aires y Santander de Quilichao y la Gobernación del Cauca, adelantan las labores de rescate de las más de 20 posibles víctimas de la tragedia por el derrumbe de una de las minas de la vereda San Antonio.

Tras la denuncia y los requerimientos hechos a los mineros, en el sentido de abandonar sus prácticas de explotación, por no contar con las debidas condiciones de seguridad laboral, el funcionario fue agredido a piedra, el pasado 6 de diciembre, por más de 500 personas que explotaban de manera ilegal las minas de San Antonio y El Palmar. “Esa es la verdad”, dijo Ricardo Cifuentes Guzmán.