Operativos contra el licor adulterado y de contrabando en Popayán 

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edidas preventivas para evitar la venta de bebidas alcohólicas adulteradas se vienen desarrollando en Popayán por parte de la Policía Metropolitana de Popayan.

Uniformados de la Policía Nacional en Popayán ejecutaron planes para el control del licor adulterado, efectuado diferentes operativos y controles para prevenir la venta y consumo de licor de dudosa procedencia que, al consumirlo, puede ser letal para la salud de los habitantes de la capital caucana. 

La festividad decembrina que se avecinan, hace que la Policía Nacional fortalezca las actividades de prevención y control contra el licor adulterado, ya que se presenta un aumento significativo de consumo de bebidas embriagantes. 

Operativos en locales comerciales de venta de licores desarrollaron las autoridades con el fin de impedir la venta ilegal de bebidas adulteradas.

De esta manera la policía en sus diferentes especialidades y con el Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes buscan prevenir a la comunidad para que esté atenta en el momento de adquirir licor, llegando con recomendaciones hasta los establecimientos comerciales abiertos al público. 

Estas son algunas de las recomendaciones de la policía para comprar licor: Cómprelo en sitios autorizados y reconocidos; las bebidas alcohólicas no deben presentar partículas en suspensión; verifique que las tapas de las botellas no estén abolladas, raspadas, ni golpeadas; en cuanto a las etiquetas, estas deben traer todas las leyendas obligatorias, como nombre y marca del producto, nombre y ubicación del fabricante, número de registro sanitario aprobado mediante resolución motivada, contenido neto, número o código del lote de producción y si es nacional, registrar la expedición de industria colombiana.  

Adicional a esta campaña la autoridad recomendó no poner en riesgo la vida de los hijos y las familias payanesas evitando conducir en estado de embriaguez, pues los sentidos disminuyen y la capacidad de maniobra en más de un 50% convirtiendo a los consumidores en un peligro inminente y mortal.

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