El Nuevo Liberal habló con la poeta, maestra, egresada de la Universidad del Cauca y vocera de las nuevas generaciones literarias del Pacífico Colombiano.
¿Cuéntanos un poco de tu biografía para quienes no te conocen?
Inicio presentándome, soy Jheym Leonor Hidalgo, una mujer apasionada por la lectura y la escritura, casada y con dos maravillosos hijos, Emanuel y Miguel Ángel.
Con relación a mi formación académica, soy egresada de la Universidad del Cauca del programa de Licenciatura en Educación Básica, con énfasis en lengua Castellana e inglés, actualmente maestrante en Educación desde la Diversidad en la Universidad de Manizales; docente de primaria por más de diecisiete años, he sido asesora pedagógica del Programa para la Excelencia Educativa “Todos a Aprender” desde 2013 hasta el 2016, del Ministerio de Educación Nacional ; jurado en el concurso departamental de cuento Palabras de Paz en agosto del 2019 aquí en Popayán, poeta invitada en el Primer Encuentro de Poesía en Silvia-Cauca “Al vuelo del Pájaro”, participante en el Festival internacional de Literatura “Gabriel García Márquez” Versión virtual 23 de junio 2020, así mismo tengo conocimientos en pedagogía y formación en estrategias pedagógicas para el pensamiento humano, en pedagogía humana, estrategias para el mejoramiento de la comprensión lectora, creación de modelos de estrategias didácticas innovadoras y psicopedagogía . Actualmente, me encuentro vinculada a la Institución Educativa Cajete, donde soy docente en la sede Bajo Charco; lugar que por cierto agradezco infinitamente que haya llegado a mi vida, de este lugar hablo cada vez que me dejan porque cómo no hablar de lo bueno, para llegar allá solo hay que seguir la voz de las montañas que hablan entre ellas de esperanza, encontrar el río que pasea por donde quiere; en ocasiones entrando a las casas sin pedir permiso, además hay que encontrar el caminito de piedras que se confunde con la ancha carretera de cemento y ser muy ágil para no perderte entre el laberinto que dejan los ladrillos después de pasear en camioneta, para llegar a Bajo Charco tienes que borrar de tu vocablo la palabra extranjero y traer tu mirada limpia como lo diría Skliar un escritor que admiro.
¿Cómo nace tu vocación literaria?
Considero que la vocación está muy ligada a los gustos e intereses que una persona tiene hacia algo, lo que me permite entonces afirmar es que la pasión por la lectura ha marcado camino en mi existencia; desde niña tuve mucha fascinación por leer y escribir, poco a poco fui adquiriendo una habilidad que hasta la fecha mantengo activa y la cual no descuido, es que es imposible desprenderse de la belleza literaria cuando la encuentras…más aún, cuando ni ella misma quiere abandonarte porque todo espacio que me rodea ofrece un lenguaje que merece ser escrito y leído, así que dejo que las letras me seduzcan. ¡Cómo negarse a este deleite que me coquetea sin control!!!
¿Por qué te gusta la poesía sobre otros géneros?
El gusto por la narrativa es exquisito, esto no quiere decir que me enfoque en un solo género literario en cuanto a lectura y escritura se refiere, al contrario, exploro todo lo que pueda ser leído. Obviamente que el género lírico tiene conmigo un filin especial y esto hace que me motive a converger con ella, a sentirla como algo sagrado, quizá por eso es que me ligo a ese sentir poético que vibra en quien lo escribe pero que tiembla en mi desde mi singularidad, desde una conexión íntima con la palabra escrita.
Hablamos de la poesía.
La poesía para mí es un encuentro con un tiempo, una memoria y una historicidad que no es ajena a nadie, la poesía tiene una voz que habita en el lenguaje de todos y que, como voz no se pasea en el silencio, aunque tiene el “don” de hacerlo, pero su esencia no le permite quedarse callada porque no da tiempo para quedarse en el mutismo; la poesía cuando te habla lo hace desde una intimidad que invita a no salir de ella.
¿Qué autores te gustan, qué poemas recomiendas leer?
Si hablamos de escritores, me gusta mucho Andrés Caicedo, Jairo Aníbal Niño, Edgar Allan Poe, García Márquez, Mario Mendoza tengo varios; en poesía me gustan, Neruda, García Lorca, Bécquer, Baudelaire, Alexandra Pizarnik, Silvia Plath, Alfonsina Storni y Delmira Agustini. Ellos y ellas tienen una significancia invaluable en mi existencia. Ahora mismo llega a mi memoria “Intima”, que es un poema bellísimo de Delmira Agustini, el amor absurdo de Irene Gruss y Alma desnuda de Storni.
No es fácil escribir un poema o un verso así de… “escribe para ver que sale”, probablemente habrá quienes en su intento por escribir les salgo algo especial; a manera personal trato con mucha delicadeza cada verso para no herir cada línea viva; pero bueno te pudo compartir un poema diferente al que utilice para participar en el concurso Matilde Espinosa,
/La lluvia se desliza sin permiso/;/Nace la locura, //La brisa en segundos dilata pensamientos caldeados/. /Entre un canto de suspiros, se concluye el cortejo. /
¿Qué significa este premio para ti?
Imagínate, me siento orgullosa de lo que he ido construyendo, de ver cómo lo que escribo toma fuerza en otros y que mis escritos hagan resonancia en las emociones de otros, como me sucede a mi cuando llega a mis manos un poema de Meira del Mar por ejemplo; considero que este premio es un reconocimiento y un estímulo que la poesía hace para conmigo; el haber quedado como ganadora en el quinto concurso de poesía Matilde Espinosa, de la categoría Verlaine, hace que mis manos sigan sosteniendo un lápiz y papel, porque está en mí el cuido de las letras, de la palabra, de la poesía.
Compártenos por favor, el poema ganador.
Son dos, los poemas con los que participé en el quinto concurso de poesía Matilde Espinosa cuya temática era, Pasión y cuerpos. El primer poema se llama “Sueño” y el segundo
“Espero”.
Espero
Emerge de la blanca luna
un manantial nocturno;
en medio de la montaña,
se siente la humedad que dejan
los surcos en la rivera;
se desliza en lo alto del sendero,
el tallo firme que sostiene la flor;
se ha fecundado en el portal
la herencia de lo sagrado.
Es mi nombre, que se agita con el tuyo.
Es mi gema, que destella en fuego;
son los colores del invierno
que buscan el encanto de tus labios
y el tributo de tu cuerpo.
Es de noche, aún espero.
Finalmente, agradezco la oportunidad de poder expresar mis pensamientos a partir de esta entrevista; en el Cauca y Popayán hay muchas personas que viven por la poesía y estos espacios que otorga el Club Matilde Espinosa impulsa a lectores y escritores a fundirse en el bello acto de la retórica. Gracias.