Columna de opinión
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Por Andrés Narvaéz
Nuestro departamento en términos de conectividad, es altamente dependiente del modo terrestre y de la vía Panamericana, como principal arteria conectora del departamento; con deficiencia en la red vial secundaria y terciaria.
En términos de transporte aéreo se cuenta solamente con un aeropuerto que tiene capacidad para recibir aviones de pequeño y mediano alcance, para vuelos regionales y nacionales que conecta a Popayán especialmente con Bogotá, Cali y con el municipio de Guapi, éste último terminal opera con un flujo menor, siendo el segundo destino aéreo del departamento.
Los vuelos que se ofrecen con costo excesivo que limitan la posibilidad de acceso del común de la población.
El Cauca es susceptible a la ocurrencia de todo tipo de procesos y fenómenos naturales por su configuración geológica, geomorfológica y topográfica en el cual se pueden presentar diferentes escenarios de riesgo entre los que podríamos enumerar: sismos, movimientos en masa, inundaciones, erupciones volcánicas, vientos fuertes, incendios forestales y otros; que se ven agravados por los efectos del cambio climático y el calentamiento global, como por ejemplo el incremento en la frecuencia e intensidad de las lluvias, temas que nos debe preocupar como sociedad civil.
El derrumbe del pasado 9 de enero en el municipio de Rosas requiere de respuestas inmediatas para disminuir la angustia y necesidades de nuestros paisanos, de la solidaridad característica del pueblo Caucano y de la empatía de los dirigentes locales y nacionales para llegar lo más rápido posible con soluciones a tantas justas demandas de los afectados, pero además se requiere la implementación de planes, acciones y estrategias de mediano y largo plazo que se convierten en un gran desafío a la nueva generación de gobernantes.
Con el anuncio del señor presidente Gustavo Petro, sobre la construcción de la variante Timbío – El Estanquillo, se debe superar la larga discusión sobre si esta nueva vía dejaría aislados a varios municipios del sur del departamento, y digo superar, porque ya no es una propuesta o iniciativa, es un mandato presidencial ante el cual, el mantener y mejorar la dinámica económica, cultural y comercial de esta zona tan importante del departamento, se debe convertir en una prioridad para la clase dirigente.
Dinamizar el turismo cultural y sus diferentes tipos, entre ellos el turismo rural o ecoturismo en el macizo colombiano, la estrella fluvial más importante y reconocida como reservorio hídrico de interés nacional; y en el majestuoso Valle del Patía; debe ser un propósito prioritario, estructurado con la comunidad y organismos nacionales e internacionales; pasar del discurso a la inversión y acompañamiento de los gobiernos departamental y nacional para que se consolide como cadena productiva a gran escala y convertir definitivamente el turismo como fuente de ingresos y de mejoramiento de las condiciones de vida de la gente.
Generar condiciones que le permitan al departamento, y en particular a esta importante zona, aprovechar su ruralidad y convertirse en despensa alimentaria de carácter nacional y así fortalecer la economía campesina.
En el municipio de El Patía la creación e implementación de una zona franca y construcción del nuevo hospital con servicios de mediana complejidad para posicionar a esta institución como cabeza de red de prestadores de salud del sur del departamento, serian proyectos emblemáticos para mantener a El Bordo como el puerto seco en el que se articulan muchas actividades del sur del Departamento y norte de Nariño.
Gestionar proyectos encaminados a lograr una excelente conectividad de todo tipo (vial, aérea, fluvial y marítima) que propendan a mejorar las relaciones al interior del territorio y con los departamentos vecinos y aprovechar este momento histórico del país, poniendo a consideración del gobierno nacional la construcción de un aeropuerto en el valle del Patía y un aeródromo para Piamonte que permita la conexión con el centro del departamento y con regiones vecinas.
Es solo una pequeña muestra de las propuestas necesarias para el sur del departamento, falta el sector educativo por ejemplo, y si se escucha a la población de las diferentes subregiones deben llegar muchísimas más iniciativas innovadoras para que desde ya el departamento planifique su futuro dejando a un lado el egoísmo, las conveniencias y la insulsa vanidad y arrogancia que con frecuencia se manifiesta cuando se ostenta un cargo público.
¡Que la unidad de la Raza Caucana prevalezca ante la adversidad!