“Las regiones deben aprovechar la inversión en infraestructura”

09:35 am 03-Abril

Reinaldo Hoyos Molina

@comunicauca

El país parece haber entendido que se tiene una deuda con la infraestructura. Hoy, según datos redondeados de las entidades del Estado, se están invirtiendo cerca de $70 billones en todo el territorio nacional. Una cifra alta, apenas justa para atender dicha deuda histórica.

Esto indica que la “la locomotora de la infraestructura” arrancó y está avanzando. Por lo que el llamado en general es que las autoridades locales se monten en ella, con gestión, propuesta y sobre todo con ejecución. Temas que tuvieron espacio de discusión en el Segundo Encuentro Regional de Infraestructura que se llevó a cabo en Popayán y que concentró a los gremios, a las autoridades nacionales y locales para ver el presente y futuro de la infraestructura en el Cauca.

En diálogo con el presidente ejecutivo de la Cámara Colombiana de Infraestructura, Juan Martín Caicedo Ferrer, se supo que el espacio sirvió para llegar a dos conclusiones principales: se necesita una unión para impulsar que la vía Popayán-Chachagüí sea incluida entre las primeras de la cuarta ola de las vías 4G; pero también es necesario seguir trabajando en la vías de terciarias que son claves para el posconflicto.

Reinaldo Hoyos Molina: Se había demorado el país en inyectar recursos importantes a este sector, ¿por qué?

Juan Martín Caicedo: Hay unos elementos que explican por qué esa locomotora, como lo ha definido el gobierno, despegó. Hay mejor institucionalidad, se han expedido, en los últimos años, normas que incentivan la participación de empresarios privados en el negocio de la infraestructura y por fin entendió el país que el desarrollo dependía de una buena inyección de recursos en este sector. No por nada somos actualmente el país en América Latina que más inversión está haciendo en esta materia.

R.H.M: Pero en ocasiones esa puerta abierta a los privados también ha abierto el espacio a la corrupción, un ejemplo los Nule. ¿Qué hacer en ese aspecto?

J.M.C: La corrupción en el ámbito subnacional, es decir en los departamentos y municipios se puede atender a través de un pliego estándar obligatorio, como lo tienen otros países del mundo. Es decir, córtale la posibilidad a que los funcionarios puedan discrecionalmente construir los pliegos exigiéndoles que tengan que basarse un referente único y obligatorio. Esto además facilita el control y la vigilancia por parte de la Contraloría y la Procuraduría. Estamos sugiriendo una reforma a la Ley 80 para que el pliego tipo sea uno vinculante por definición a la ley.

R.H.M: ¿Ha tenido cabida en el Congreso esta iniciativa actualmente?

J.M.C: Sí. Hace algún tiempo el gobierno era pesimista frente a la posibilidad de tramitar una norma con ese enfoque, pero hoy no. Hay un proyecto de ley que está en vísperas de ser radicado en las comisiones cuartas del Congreso de la República que prevé la posibilidad del pliego-tipo. Incluso sugiere un mecanismo interesante sugerido por el Banco Mundial, la Ocde, la Organización Mundial del Comercio y es que alcalde que quiera salirse del pliego-tipo tiene que justificar técnica y jurídicamente el por qué no quiere utilizar el pliego-tipo. Esta herramienta a juicio de la Cámara es definitiva para controlar el problema de la corrupción.

R.H.M: Volviendo al tema de la inversión importante que se está haciendo en infraestructura, ¿cómo el Cauca debería aprovechar esta oportunidad?

J.M.C: Primero es necesario que se unan las fuerzas gremiales y políticas del departamento del Cauca si en realidad estamos convencidos, como debemos estarlos, que aquí hacen falta unas obra que son importante, no solamente para la región, sino también para el país. Hablo de la carretera Popayán-Chachagüí, que infortunadamente no quedó incluida en la cuarta ola de las vías 4G, no tuvo aval fiscal. Ahora la propuesta es que con ese trabajo mancomunado logremos que esta obra quede entre los primeros lugares, los primeros turnos de prioridades.

R.H.M: ¿Este es uno de los compromisos de esta reunión?

J.M.C: Sin duda alguna. El clamor va a ser acompañado de las gentes de los departamentos vecinos, pero también por el resto del país. Porque esta carretera que nos lleva a las fronteras con el Ecuador no es una carretera de Nariño o el Cauca, es una carretera de índole nacional. De la cual depende la competitividad del país y del aparato productivo no solamente en el sur del país, sino en todo. Acordamos por ejemplo, visitar a las fuerzas vivas del departamento, una de ellas al Presidente del Congreso, para aprovechar, en el buen sentido, la investidura que hoy lo distingue y así hablar con las personas claves.

R.H.M: En general se habló de las grandes obras, pero hay otras que se deben hacer en las zonas apartadas de los departamentos, como las mejoras de las vías terciarias…

J.M.C: Evidentemente hemos hecho cálculos con el gobierno, de hecho existe un Conpes de vías terciarias que pone de presente que tendremos que invertir en los años inmediatos cerca de $50 billones en estas vías. Son fundamentales para el posconflicto porque donde no hay carretera o infraestructura, hay más conflicto armado. Esta es una manera de contribuir la paz.

R.H.M: No lo puedo dejar ir sin preguntarle sobre el papel de las pequeñas y medianas empresas constructoras, porque como está el asunto, son las grandes las que están haciendo su agosto.

J.M.C: No debemos desaprovechar este momento histórico de auge de la infraestructura para darle la oportunidad de crecimiento y modernización al pequeño y mediano empresario. De hecho, el Gobierno Nacional, gracias a nuestro ejercicio, ha empezado a tener en cuenta esto tan importante en algo que se plasmó en una serie de reuniones que se realizaron por cerca de cinco meses, donde, por ejemplo, se reivindica la figura del anticipo para la obra pública. También se plantea unos requisitos financieros que son acordes al tamaño de los pequeños y medianos empresarios. Se convierte en un referente para exigir a los funcionarios que haya una política pública para las Pymes.