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La disfunción eréctil es una disfunción de carácter sexual masculina común que se da cuando existen dificultades para lograr o para mantener una erección. Esta disfunción se vuelve más común a medida que se envejece, si bien no es una característica natural del envejecimiento. Además, la disfunción eréctil está íntimamente relacionada con la eyaculación precoz. En cualquier caso, para tratar cualquiera de estos dos problemas sexuales es recomendable acudir a una clínica de salud sexual masculina.
No obstante, hay que recordar que los problemas ocasionales de erección no son necesariamente un motivo para preocuparse. Sin embargo, cuando los problemas de erección se dan de manera continuada, sí podemos hablar de disfunción eréctil como una dolencia sexual. Así, es necesario que la incapacidad para mantener o para lograr una erección se prolongue durante al menos seis meses para que pueda ser considerada una patología. Además, deber producirse esta dolencia en una de cada cuatro relaciones sexuales para poder considerar a este problema como una disfunción eréctil.
Esta disfunción sexual que afecta a los hombres puede provocar estrés, afectar a la autoestima de quien la padece o provocar problemas para relacionarse con los demás. Sin embargo, aunque estas son las causas de padecer disfunción eréctil, también pueden ser las consecuencias de esta disfunción sexual, creándose un círculo vicioso complejo. En cualquier caso, los problemas de erección también pueden suponer un signo de una enfermedad que no haya sido diagnosticada y que necesite tratamiento, además de suponer un factor de riesgo de ciertas enfermedades cardíacas.
¿Como saber si se padece esta disfunción de carácter sexual?
Aunque lo realmente recomendable es acudir a una clínica de salud sexual masculina, lo cierto es que hay ciertos síntomas que nos pueden alertar sobre esta disfunción sexual y que nos pueden ayudar a descubrir si se padece o no esta dolencia.
La erección es un mecanismo nervioso y vascular en el que intervienen factores hormonales. No obstante, hay otras causas, además de las hormonales, que pueden provocar los problemas de disfunción eréctil. No obstante, cerca del 90% de los casos de disfunción eréctil están provocados por causas orgánicas, mientras que el 10% de los casos están provocados por causas psíquicas o nerviosas. Así, sólo repararemos en las causas orgánicas. Las causas son las siguientes:
1 Diabetes: esta dolencia es un trastorno que puede alterar el endotelio vascular, disminuyendo la circulación y provocando que la sangre que llega al pene sea menor, provocando disfunción eréctil.
2 Hipertensión Arterial: en este caso se produce la vasoconstricción periférica de los vasos sanguíneos, dificultando la circulación de la sangre en el pene y provocando disfunción eréctil.
3 Colesterol Alterado o Aumentado: tener niveles altos de colesterol en sangre puede provocar que las paredes de las arterias se endurezcan, lo que provocará que las arterias se contraigan y no se dilaten lo suficiente para permitir una correcta circulación sanguínea, pudiendo provocar disfunción eréctil.
4 Consumo de tabaco, alcohol y drogas: estos hábitos pueden afectar al endotelio vascular y puede provocar una mala circulación sanguínea, provocando disfunción eréctil.
5 Ciertos fármacos: existen ciertos fármacos que entre sus efectos secundarios cuentan con la provocación de la disfunción eréctil.
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