C
on una jornada de diálogo entre habitantes, fuerza pública, Administración Municipal y Ministerio Público, las familias accedieron a realizar el desalojo voluntario.
En la mañana del 21 de septiembre se conoció el proceso de desalojo para las familias que ocupaban el área de protección en la ribera de la quebrada Tinajas, ubicada al oriente de la capital caucana, situación que generó descontento en las personas que allí se encontraban. Sin embargo, tras una nueva jornada de diálogo entre habitantes, fuerza pública, Administración Municipal y Ministerio Público, las familias accedieron a realizar el desalojo voluntario, que culminó en la tarde del miércoles sin presentar actos violentos ni pérdidas materiales.
La intervención de desalojo fue el último recurso que se tuvo luego de agotar todas las instancias de diálogo con las personas que ocupaban el mencionado espacio público, así lo señaló el comandante de la Policía coronel Jesús Enrique Quintero, quien explicó que en el procedimiento no se usó ningún tipo de armas. «No se recurrió al ESMAD, sino a la fuerza disponible. Fue un procedimiento conforme lo establece la ley», afirmó Quintero.
Por su parte, la secretaria de Gobierno de Popayán, Elvia Rocío Cuenca, manifestó que desde la Alcaldía Municipal se garantiza el respeto por los derechos humanos y se propende por un proceso ejecutado en los mejores términos. Por tanto, se acompañó el procedimiento y se garantizó el bienestar de las familias, manteniendo una conversación permanente que posibilitó la concertación.
Finalmente, la zona fue desalojada el miércoles y se espera que no vuelva a ser ocupada, como parte de un compromiso conjunto por respetar los espacios protegidos con los que cuenta el municipio.