El sueño de los niños indígenas que practican taekwondo

En el resguardo indígena de San Andrés de Pisimbalá, al menos 40 niños practican taekwondo. Todos pertenecen al mismo club, el Yuc Kwt Zuun, que traduce de la lengua nasa yuwe, “los nietos de las piedras sagradas”. Todos, orientados por los profesores Alean Zabarain y Nelson Ramiro Cerón, han conocido el deporte de combate que ahora está a punto de brindarles nuevas experiencias.

Alean viene de Barranquilla, y fue designado profesor de biología y química en el colegio de la zona rural de Inzá. Nelson, por su parte, es un profesor de lengua castellana en el mismo colegio. Cuando Alean llegó al Cauca, le propuso a Nelson crear la escuela de taekwondo, un deporte al que él mismo le guarda mucho aprecio, ya que venía de ser cinturón negro en ‘La Arenosa’.

“La situación en el resguardo indígena ha sido siempre muy vulnerable. Estos territorios han sido centro de la guerra armada del suroccidente del país, y en medio siempre quedan los niños”, explica Nelson acerca de cómo se cultivó la semilla de este deporte entre los niños de San Andrés de Pisimbalá.

Desde entonces han tenido competencias internas en el resguardo, y entre otras más en el municipio. El de los nietos de las piedras sagradas es el único club de este deporte en el municipio, razón por la cual el cabildo indígena y la Alcaldía de Inzá han brindado su apoyo a la iniciativa.

Para entrenar, se las arreglaron con material reciclable que convirtieron en uniformes e implementación, y adecuaron una cafetería abandonada, cerca del colegio, para tener un lugar donde practicar de lunes a jueves en las tardes sin falta.

Fue un trabajo de todos los niños, los profesores y padres de familia, que ahora ven los frutos en la primera competencia internacional que tendrán varios de sus representantes. En total serán diez jóvenes, cuatro hombres y seis mujeres, los que participarán en el Campeonato Suramericano de Taekwondo en Cartagena, el primer evento fuera del municipio al que asisten representantes de Inzá.

Para participar, de la mano de Nelson y Alean buscaron apoyo. Llamaron a la W Radio,en la sección llamada ‘Soluciones W’ y recibieron a cambio los uniformes para competir, y con el cabildo y la Alcaldía de Inzá gestionaron algunos de los recursos necesarios para la participación.

A Indeportes Cauca también le tocaron las puertas, y su gerente, Milena Cabezas, se comprometió a brindarles los recursos para el desplazamiento en avión desde el Cauca hasta la capital del Bolívar, pero a última hora desistió de hacerlo argumentando que no tenía recursos disponibles para apoyar esta iniciativa.

Pero los sueños no se detienen, y por eso los diez niños viajarán por primera vez en avión, conocerán el mar y otras culturas. Todo eso a través del deporte que conocieron tan solo este año. En enero, cuando Alean le propuso a Nelson dedicar sus tardes, fuera de las aulas, a seguir formando jóvenes para un futuro en paz.