Reinaldo Hoyos Molina
Un debate de control político en la Asamblea Departamental del Huila que se llevó a cabo el pasado 16 de febrero, despertó de nuevo el lío limítrofe que existe entre Cauca y Huila, desde hace casi siglo y medio por el sector conocido como Santa Leticia-Moscopán. Este territorio comprende 44 mil hectáreas, que en los mapas del Instituto Geográfico Agustín Codazzi (Igac) aparecen como límite no definido.
En el debate al interior de la Duma huilense se dijeron varias cosas que se pueden resumir en la intención de unir esfuerzos desde las instancias departamentales y municipales de La Plata (Huila), para exigir a la Nación “la ratificación de los límites legalmente constituidos”, según los argumentos expuestos.
Mientras tanto, la noticia apenas está llegando al Cauca y su dirigencia política actual está en proceso de conocer los anales de este diferendo limítrofe. Pero ¿Cuál es el lío? ¿quién lo debe resolver y cómo está actualmente la situación?
Unas leyes confusas
En el caso de Cauca y Huila, según la información del Igac, la primera ley que define los límites es la del 18 de abril de 1.826 que dice que “la línea divisoria entre las provincias de Neiva y Popayán será el ramo Central de la cordillera de Los Andes, intermedio entre los ríos Magdalena y Cauca, quedando todas las parroquias de esta parte de dicha cordillera agregadas al cantón de La Plata.”
Basado en esta norma, es que el diputado huilense Orlando Ibagón Sánchez, ponente del debate del pasado 16 de febrero, viene reclamando desde el 2011 lo que según él “le pertenece al Huila y que el Cauca quiere despojar y legalizar como suyo”.
Pero lo que sucede es que, adicional a dicha ley, se realizaron otros actos legislativos que quitaban y volvían a poner territorios de uno y otro lado, lo que empezó a generar, según el mismo Igac, las confusiones que hoy aún siguen vigentes. “Estas agregaciones y segregaciones de territorios son las que originaron la confusión y en consecuencia la controversia limítrofe”, expresa a manera de conclusión en uno de sus informes.
Lo que sucede hoy en lo que se conoce como el corregimiento de Santa Leticia-Moscopán, a unas 3 horas de viaje desde Popayán, es que el municipio de Puracé (Cauca) es la entidad territorial que ejerce soberanía político administrativa; mientras que el municipio de la Plata (Huila) ha tenido históricamente descuidada esta zona, a pesar de que la misma no está excluida ni del Cauca, ni del Huila, según el mismo Igac.
El último gobernador del Cauca que estuvo en la zona fue Guillermo Alberto González, quien realizó una visita para ejercer soberanía en medio de una reedición de este pleito entre los departamentos entre los años 2008-2011. “Quien ha hecho un ejercicio político, administrativo y de inversión en Santa Leticia, ha sido el Cauca. Por eso la gente se siente más caucana que huilense”, comentó el exgobernador.
Sin embargo, desde 1.982 el mapa del Cauca tiene una línea punteada que indica que hay un diferendo limítrofe a la espera de solución de fondo que, según pudo conocer El Nuevo Liberal, al menos hasta ahora ninguno de los dos departamentos ha solicitado.
No hay litigio, solo un límite sin definir
“De acuerdo a la ley y a lo que le corresponde al Igac, no hay en el instituto ninguna solicitud de dirimir ese conflicto por límites. La solicitud la tiene que realizar los representantes legales donde se presente una situación de esas. En este caso, lo pueden hacer los alcaldes de Puracé o La Plata; o los gobernadores del Cauca o Huila”, explicó la directora territorial del Igac en el Cauca, Laura Inés Restrepo de Varela.
Lo que permite concluir que no hay litigio, es decir, no hay un ejercicio jurídico o de investigación de fondo que pueda desembocar en una decisión definitiva. Lo que hay es un límite sin definir en un territorio en donde el Cauca ha ejercicio soberanía desde Puracé. De hecho, los recursos del Sistema General de Regalías que benefician al corregimiento de Santa Leticia-Moscopán, por ejemplo, se canalizan desde el municipio caucano.
Ahora bien, según la ley 1447 del 9 de junio de 2011, para que se inicie un litigio, -que es el camino que se debe tomar para resolver este pleito-, una de las partes debe solicitar un proceso de deslinde. Desde ahí se iniciará un proceso recolección de información que terminará en la comisión de límites del Congreso de la República donde se tomará la decisión final.
El Huila ya empezó
Lo que es cierto es que el departamento vecino del Huila y su dirigencia política ya iniciaron. Según el diputado Orlando Ibagón Sánchez, el más incisivo en el tema, “al gobernador Carlos Julio González se le dijo: adelante, no le dé miedo, porque tenemos de lado la ley”.
Con esa seguridad se espera que el departamento solicite la información necesaria para pedir que definan de una vez y por todos dichos límites. “Uno de los puntos centrales del Plan de Desarrollo del Huila será la defensa del territorio y desde ahí habrá un capítulo especial para Santa Leticia-Moscopán, porque el municipio de La Plata no permitirá que le quiten este territorio, por eso crearemos un grupo interdisciplinario para que analicen este tema”, agregó Ibagón Sánchez.
Las 44 mil hectáreas en disputa tienen una riqueza arqueológica, de flora y fauna; potencial agrícola, debido a que está a una de las faldas del volcán Puracé y también un potencial turístico por las bellezas naturales en cascadas y aguas termales. Además de ser un punto de nacimiento de varios ojos de agua.
“Reconocemos que la dirigencia política del Huila ha descuidado la zona, que el Cauca es quien más ha invertido, y ese puede ser una variable argumentativa válida; pero nosotros tenemos la ley a favor y desde la Asamblea ya definimos que impulsaremos inversiones importantes para Santa Leticia-Moscopán”, agregó el Diputado huilense.
Mientras tanto, por parte del Cauca, los primeros en ponerse al punto fueron los concejales y el alcalde de Puracé, Jairo Rolando Certuche, quienes el pasado 23 de febrero estuvieron en pleno en las instalaciones del Igac, Cauca, recolectando información legal y de los últimos movimientos sobre este pleito.
El Nuevo Liberal conoció que lo mismo se estaría haciendo en la Gobernación del Cauca, en cabeza del gobernador Óscar Campo, quien quiere manejar el tema con ‘pinzas’, debido a que uno de sus fines es la concertación incluso con los gobernadores vecinos.
A su vez, se conoció que en la Asamblea Departamental del Cauca ya se estaría preparando un debate de control político para analizar la información que sobre el diferendo limítrofe exista.
En suma, en esta ocasión el departamento del Huila tomó la delantera y parece que está dispuesto a llegar hasta la última instancia para ratificar la ley que, según el diputado Orlando Ibagón, los ampara para “no perder las 44 mil hectáreas en disputa”. Mientras que en el Cauca el tema parecer haber caído de sorpresa y solo en los siguientes meses se sabrá cuál será la carta que jugará el departamento para defender el territorio.
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