- Inicio
- Mi Ciudad
- Mi Región
- Política
- Opinión
-
Deportes
- Copa El Nuevo Liberal
- Judicial
- Clasificados
- Especiales
JESÚS IGNACIO GARCÍA VALENCIA
La Costa Pacífica se convirtió en un escenario de violencia. Hace tres decadas nadie se podia imaginar que algún día la muerte violenta discurriera por sus hermosos parajes. Crimenes como el del lider social que fue arrebatado a una mision humanitaria causan horror, al igual que el asesinato colectivo sucedido en san Antonio Gurumendy.
En otros tiempos en la region se vivía de la pesca y del cultivo del coco y como expresión natural de la amabilidad y bondad de sus habitantes imperaba un clima de sana convivencia. La comunidad se cohesionaba en torno a sus valores ancestrales y a líderes respetables que representaban y luchaban por la region con verdadera vocacion de servicio. Gracias a ellos en el primer plan nacional de desarrollo que aprobó el congreso despues de promulgada la constitucion de 1991 se incluyó la construccion de la carretera para conectar la costa con el interior, obra considerada de relieve para el impulso de su desarrollo. El proyecto avanzó de manera normal hasta cuando la burocracia de planeacion nacional dictaminó que no era viable, porque afectaria el medio ambiente, ya que la via atraeria la colonizacion y con ella la destruccion del bosque húmedo tropical. Murió asi una real posibilidad de integrar el pacifico caucano con el resto del Departamento y continuó el aislamiento de sus municipios, tan ricos en recursos naturales, humanos y culturales.
Por esas calendas en ese territorio de paz incursionó la guerrilla, a la par con el narcotráfico y luego la minería ilegal, manifestaciones delincuenciales que se fortalecieron al amparo de la ilicita proteccion que le brindaban los insurgentes. Vino entonces el deterioro social con la irrupcion de una economia ilegal que pronto comenzó a cobrar vidas y acabó con el sosiego de la zona. Y el bosque húmedo tropical sufrió el embate de la ambición desmedida de los delincuentes y el daño ambiental que se quiso evitar prohibiendo la constucciòn de la carretera tuvo lugar sin ningún tipo de contemplanciones, mientras florecían los cultivos ilícitos.Los cauces de los rios fueron horadados y destruídos para extraer el oro y sus aguas contaminadas de mercurio afectando la principal fuente de alimentacion de sus habitantes.
Mirando lo sucedido en retrospectiva cabe preguntarse si no hubiera sido menos dañino construir la via al mar así llegara acompañada de colonos de seguro laboriosos y honrados y dispuestos a acatar las recomendaciones de las autoridades ambientales para evitar dañar el ecosistema, y que, además, hubiera procurado facilitar la presencia del Estado para prevenir el auge del crimen organizado en ese santuario ecológico.
Lo evidente es que el territorio fue dominado por las guerrillas que controlaban tanto el narcotrafico como la mineria ilegal. Y ahora, después de la firma del acuerdo de paz continua la presencia de grupos delincuenciales que como disidentes de la organización desmovilizada, se resisten a dejar sus lucrativos negocios y siguen atentando contra la vida y la tranquilidad de sus moradores, victimas de la violación de sus derechos y acorralados por el miedo generalizado, En buena hora el señor Defensor de Pueblo, Dr. Carlos Negret, encabeza una misión humanitaria para verificar la situacion de los Derechos Humanos y brindar asistencia y atencion a las victimas del conflicto y las que se siguen generando en la actualidad.
Llama la atencion que teniendo las autoridades conocimiento, desde cuando se negociaron los acuerdos de paz, de la existencia de los factores desencadenantes de violencia en la costa, no se tomaran oportunas medidas preventivas para evitar el flagelo que hoy viven sus pobladores y que estos quedaran a merced de los violentos ante la inexplicable inactividad del Estado, que debió hacer presencia con programas de recuperacion de la economia legal y del tejido social, al igual que con la fuerza pública instituida para proteger y garantizar los derechos ciudadanos.
Ojalá la presencia del señor defensor del pueblo y su mision humanitaria logren que el gobierno vuelva los ojos hacia esta importante region de la patria y tome acciones positivas para erradicar los cultivos ilicitos y la mineria ilegal que son el sustrato del drama que padecen sus moradores y se los reemplace por ambiciosos proyectos para explotar los invaluables recursos de la zona, en procura de mejorar la calidad de vida de sus gentes.
Comentarios recientes