El acuerdo será aprobado e implementado, la oposición es necesaria (III)

QUEIPO F. TIMANA V.

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Continuación

SALIDAS AL IMPASE QUE SE VIENE.

Se aceptarán algunas propuestas que no impliquen un cambio total del acuerdo, el acuerdo reformado será aprobado e implementado.

¿CÓMO?

Es muy factible que las 36 demandas que se presentaron contra el plebiscito, logren anularlo.

Por refrendación ciudadana se puede asumir la votación de la segunda elección Santos en el año 2014, 7’816.986 votos, con dicha votación se respaldó la bandera principal de su campaña que era la consecución de la PAZ, como se lo ordena el artículo 22 de la Constitución Nacional; también se puede hacer uso de la figura del plebiscito o de los cabildos abiertos. El Congreso de la República puede expedir leyes que posibiliten lo refrendado en el acuerdo. La decisión que se adopte debe buscar que lo acordado reciba el más amplio consenso, lo cual garantizará la gobernabilidad.

La oposición radical expondrá que al no haberse recogido todas sus propuestas presentadas y el haberse dado un tiempo tan corto, continúa en su oposición al acuerdo y que su candidato presidencial se encargará de ofrecer un real acuerdo que haga justicia y evite la impunidad.

Para la oposición radical algunos puntos pueden ser negociables o susceptibles de precisión en el acuerdo de la Habana, pero hay uno que no es negociable, preservas los privilegios de los grandes terratenientes e impedir la devolución de las tierras a sus legítimos dueños, los campesinos desalojados de sus predios por el conflicto armado. El más reciente censo agropecuario nos da las siguientes cifras: 77% de la tierra en las zonas ganaderas en manos del 13% de los propietarios pero el 3,6% de estos tienen el 30% de las tierras; más de 6 millones de hectáreas arrebatadas a los campesinos y 7 millones de campesinos desplazados en las dos últimas décadas.

El presidente Santos ha manifestado que hará uso de la Constitución nacional, leyes vigentes y jurisprudencias de Cortes que posibiliten aprobar el acuerdo, dado que hay un respaldo explícito de casi la mitad de los votantes en el plebiscito, más el respaldo de la comunidad internacional, se implementará el acuerdo, con las modificaciones consensuadas que puedan surgir de las conversaciones con los voceros del NO, para vadear su votación obstruccionista en función de mezquinos intereses.

¿QUE SE GANÓ?

.- El amplio respaldo internacional a la gestión del Presidente Juan Manuel Santos, de los gobiernos del mundo, en especial de Latinoamérica y de los organismos internacionales.

.- El reconocimiento a su voluntad inquebrantable de lograr la paz, por lo cual le fue otorgado el Premio Nobel de la Paz, lo cual se traduce en un fuerte espaldarazo al buen logro de su propósito.

.- En la Comisión negociadora y en las comisiones que pudieron presentar sus propuestas y reclamos en la Habana, en las cuales han participado hombres y mujeres, civiles y militares que son reales valores humanos de Colombia; paradójicamente los guerrilleros que participaron fueron transformados en el mismo proceso, en el presente piden perdón a las personas y a los lugares que ofendieron, inician actividades de reparación, como el señalamiento de terrenos en donde sembraron minas quiebra-patas y están ayudando a eliminarlas, porque reconocen los errores que han cometido y la gravedad de los mismos.

.- Todos los propiciadores de la violencia en Colombia, miembros de la sociedad, del Estado, sector privado, grupos insurgentes, deberán ser sometidos a los procesos judiciales estipulados en el acuerdo.

.- Se repite el gesto heroico de la juventud universitaria de 1990, cuando impulsaron la inclusión de la “Séptima papeleta”, la cual se convirtió en el hecho significativo para que se lograra la nueva Constitución Política Nacional, de 1991; ahora con sus continuas marchas en las capitales de los departamentos y de preferencia las realizadas hacia la plaza de Bolívar en Bogotá, es una demostración palmaría de su convicción ciudadana vertida en su juventud y de la sociedad civil, que hace uso de su derecho de protesta de manera democrática, por cuanto enarbolaron la bandera de luchar por el futuro de la sociedad que les va a corresponder dirigir y servir; la anhelan sin violencia por lo cual su determinación es que el acuerdo se logre ya.

.- El Presidente Santos formado militarmente, forjado en la guerra como ministro de defensa, quien dirigió los más duros golpes a la dirigencia de las FARC, puso en práctica la idea de su maestro Roger Fisher, quien le enseñó que hay un tiempo en que se debe negociar en la guerra, y arriesgando su legado y reputación, tomó la firme determinación de lograr la estabilidad, prosperidad y tranquilidad a su país.

.- La guerra es fácil; la paz es difícil, la juventud universitaria de Colombia revitaliza nuestros sueños y nos compromete al máximo en nuestros esfuerzos, por cuanto nuestros corazones y voluntades se hinchan de esperanza por lograr que nuestra Colombia sea territorio de paz y de progreso.