Editorial: Los polideportivos que faltan por entregar

10:05 am 04-junio

Muchos anhelos y necesidades de la comunidad han cambiado. Hablar de escenarios deportivos hace medio siglo era decir que una ciudad determinada necesitaba un estadio, un coliseo y algunos otros espacios para deportistas de alto rendimiento. Hoy, el asunto tiene otro norte por haber tomado conciencia la colectividad de que necesita escenarios polideportivos y de recreación aptos para el disfrute de sus ratos de ocio y para su salud.

Actualmente el deporte es una actividad cultural y social que da solidez al crecimiento del núcleo humano, mejora la capacidad de vencer obstáculos, canaliza la agresividad, educa sobre la racional solución de conflictos, contribuye a la formación de la personalidad, fortalece los vínculos sociales. Por eso en la agenda de los gobiernos municipales y demás entes territoriales debe estar en lugar destacado tanto el diseño, construcción, cuidado y mantenimiento de los espacios públicos e infraestructura deportiva y recreativa, como el hacerlo mancomunadamente con cada comunidad.




El deporte y la recreación son actualmente un derecho Constitucional fundamental, un componente de la cultura y del derecho social, exigen una estructura que involucre políticas públicas de promoción y desarrollo, implican el hacer estudios previos y un diagnóstico social, de conocimiento de las nuevas tendencias deportivas y recreativas, etc.

A nivel de Popayán, vemos con mucha preocupación el hecho que algunos de los polideportivos restructurados a través de la Gobernación del Cauca estén al garete por el simple hecho que no hay quién reciba los escenarios deportivos y recreativos. Ese es un reto de la administración municipal, el buscar una fórmula que no afecte al usuario de este tipo de espacios con cobros para el ingreso a las infraestructuras. En esa tarea, pareciera que no se ha adelantado nada en dos años y simplemente los escenarios o permanecen cerrados o son violentados por la misma comunidad que busca hacer uso de ellos.

En nuestros días es necesario, a nivel de cada localidad, llevar a cabo sólidas políticas deportivas y recreativas para la comunidad, captar la percepción positiva o negativa del núcleo humano sobre dichas actividades, determinar el tipo de oferta de infraestructura deportiva que desea y requiere la colectividad.

Basta analizar un fenómeno social de orden deportivo, el inmenso crecimiento de los juegos deportivos intercolegiados en el país, percatarse que varios millones de niños y adolescentes en todos los puntos cardinales de nuestro territorio, pertenecientes a todos los estratos económicos y sociales, participan y compiten en ellos; esa es la base de los futuros íconos de la nueva Colombia ya que en el mundo actual los deportistas son los nuevos símbolos nacionales, quienes logran enlazar las emociones de sus compatriotas.

Las cosas han cambiado, las administraciones municipales deben interactuar con la comunidad antes de diseñar y construir espacios deportivos y recreativos en los barrios y comunas, establecer claras pautas para su funcionamiento, lograr que sean suficientes y aptos para cada comunidad.