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El agro del departamento del Cauca tiene un potencial enorme, dado el buen talante de sus campesinos y la calidad de la tierra. Sin embargo, a pesar de algunos avances puntuales, es notable el atraso de esta tierra en el contexto económico de nuestra comarca, y sin una mejoría económica tampoco la puede haber social, que tanto se necesita.
Y entre otras cosas, como por ejemplo, el constante incumplimiento de acuerdos pactados con el Gobierno Nacional, esa condición social del campesinado es una de las reclamaciones centrales de la protesta que por estos días adelantan comunidades campesinas, docentes y otras organizaciones sociales del departamento del Cauca con carácter indefinido.
Cauca tiene un potencial agropecuario inmenso, pero requiere planificación y mucha acción. Hasta ahora han primado las buenas intenciones y la retórica, quizá por la complejidad del problema y el talante urbano de los dirigentes. Para muchos citadinos, el campo representa todo lo anacrónico, pero poca gente, a pesar de ser una verdad obvia y elemental, cae en cuenta que es el campo el que alimenta las ciudades.
Cauca necesita saber rápidamente, qué se puede sembrar y dónde, dos preguntas elementales, pero importantes porque de su respuesta depende el éxito de su agro. Y por supuesto, además de los productos básicos para la seguridad alimentaria, se debe producir lo que los mercados pidan para que los campesinos tengan excedentes y ahorren.
El café en las zonas templadas en muchos municipios caucanos necesita seguir avanzando en su mejoramiento de calidad y su comercialización y ojalá hacia el exterior. Para otros productos como el chontaduro del occidente del departamento, es menester pensar en toda la la diversificación que este producto brinda; enseñarle al campesino en ese sentido podría ser una buena fuente de entrada para las comunidades que hoy por hoy solo se dedican a bajarlo de la palma y trasladarlo, con muchas dificultades por las malas carreteras, hasta los centros poblados más grandes.
La ganadería es otro renglón importante, ya que la leche le da flujo de caja al campesino mientras sus cultivos son cosechados, y esta es otra actividad importante que debe ser mejorada. En este ítem se avanza con el proyecto de atención integral enfocado a pequeños productores de leche. Ojalá se apoye hasta el final y no se les vaya a dejar solos a quienes sueñan con mejorar su estatus económico a través de la red láctea.
Ya cualquiera repite que “hay que tecnificar el campo”, y suena bien, pero la verdadera tecnificación es el riego todo el año, sin el cual no se pueden sacar cuentas ni manejar el campo con criterio empresarial, y además, no se puede tener buena producción.
¿Qué hacer para ponerle orden a la producción agropecuaria del Cauca y establecer políticas productivas funcionales y benéficas para sus campesinos y para todo el Departamento? Es hora de hacer un análisis concienzudo sobre este tema, con verdaderas políticas que sobrepasen los gobiernos de turno y en las que se aprovechen los programas nacionales para el agro que podrían mejorar nuestra producción y productividad, para al menos trazar un camino hacia la dignificación real del campesinado caucano.
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