Editorial: El pueblo y la crisis de las basuras en Popayán

Cada día, la crisis por las basuras sin recoger en la ciudad de Popayán, hace crecer, como crecen los montones de desperdicios en todas las esquinas de la urbe, el desprecio ciudadano por la empresa privada ServiAseo SA ESP, ente encargado de la recolección y tratamiento de los desechos sólidos de los payaneses.

Toda esta ‘fétida y desaseada’ coyuntura se visibilizó luego que los residentes en los alrededores del relleno sanitario ‘Los Picachos’, protestaran con el taponamiento de la vía hacia la infraestructura sanitaria, cortando el paso de los vehículos recolectores que depositaban las basuras en dicho punto rural del suroccidente de la capital caucana. Los motivos de la manifestación tenían que ver con la contaminación de las fuentes hídricas de la zona debido a la filtración de lixiviados, que es un peligroso sobrante de los residuos sólidos acumulados en los rellenos sanitarios. De eso ya una semana y el problema y la solución al mismo pareciera estar lejana en el tiempo.

Serviaseo en principio minimizó las denuncias de la comunidad, pero horas más tarde, cuando la Corporación Autónoma del Cauca, CRC, intervino (por presión de los medios), se conoció que efectivamente la geomembrana impermeable que protege los suelos en la celda de recolección del relleno estaba rota y por tanto, si había filtración de lixiviados. De esta forma el relleno tuvo que ser cerrado, esta vez no por la comunidad sino por la autoridad ambiental, obligando a Serviaseo a buscarle una solución al grave problema de acumulación de basuras en toda la ciudad, el mismo al que ha venido reusándose por varios días.

Lo más preocupante hasta ahora es que todo este grave problema sanitario se ha convertido en un ring político en el que miden fuerzas las administraciones municipal y seccional, al igual que la CRC en contra ServiAseo SA ESP y en el que inevitablemente también tercian los concejales de la época que aprobaron la llegada de la empresa de aseo a la ciudad y la administración de turno que firmó el contrato de concesión del servicio. Pero además, como en río revuelto, la lucha es azuzada por los oportunistas politiqueros, que en pleno año electoral, lanzan su atarraya para ver que recogen a su favor. Y lo triste y lamentable en este magro episodio citadino, es que en todo este maremágnum social y político, queda el pueblo raso en medio del tire y afloje jurídico con el que todas las partes involucradas buscan pasar de ‘agache’ ante la verdadera responsabilidad de esta crisis que ya tiene tintes de emergencia sanitaria.

Esperamos que esta coyuntura sea el momento para encontrar una solución de fondo al problema del manejo de las basuras por parte de ServiAseo SA ESP. Porque más allá del rompoimiento de la geomembrana, la situación de bloqueos al relleno sanitario se está convirtiendo en otra Panamericana, un espiral sin fin que cada cuanto se manifiesta trayendo consecuencias para la ciudad de Popayán y demás municipios que depositan sus residuos sólidos en ‘Los Picachos’. La Superservicios debe demostrar que es un ente que actúa son severidad ante los incumplimientos de la empresa, que se escuda en las presuntas desacatos de la ley del municipio pero no cuestiona su propio actuar.